REFLEXION...
Comúnmente pensamos que solo los pensamientos son los mensajes internos que nos llegan al Alma, al corazón, pero no es así. También las palabras son alimento para nuestro corazón, son órdenes directas para nuestro cerebro, están conectadas con nuestros pensamientos, como dice Louise Hay, LAS PALABRAS SON UNA PROLONGACION DE LOS PENSAMIENTOS y quizás porque no hacemos consciencia de esto, las decimos sin ninguna responsabilidad ante nosotros mismos.
Tener presente que las palabras que pronunciamos nos pueden hacer mucho bien, pero también mucho mal. Con ellas acariciamos o maltratamos nuestro interior, así mismo con ellas edificamos o destruimos nuestro mundo externo.
Evitemos palabras insultantes, agresivas, degradantes hacia nosotros mismos porque poco a poco estas se convierten en nuestra realidad y si nosotros nos tratamos así de mal, no podemos esperar que los demás nos traten con respeto.