EL SIERVO SIN CORAZÓN
Perdón con perdón se paga
(Desconozco el autor)
Esta parábola puede encuadrarse dentro de las enseñanzas del Padre nuestro. Puede ser el comentario a una de las últimas peticiones: “Perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores”.
Jesús destaca en esta parábola que la razón por la cual debemos perdonar, es porque nosotros también necesitamos perdón. Somos pecadores. Esto nos debe llevar a una actitud de humildad y de amor.
La penitencia es una invitación a todos para que entremos en la dimensión del amor de Dios, de su misericordia, de su perdón a todos por igual. No hay acepción de personas.
Las enseñanzas de Jesús nos llevan a considerar que en el ser humano la caridad debe contar mucho más que la justicia.
Recordemos que en un primer tiempo era una Ley de represalia. Ver Génesis 4, 23-24. La venganza de Lemek será “setenta veces siete”.
En un segundo tiempo la Ley de justicia impuesta es una represalia igual: “ojo por ojo y diente por diente”. Es la Ley mosaica del talión. Exodo 21,23
En un tercer tiempo Cristo impone la caridad y el perdón: No hay represalia y debe haber perdon. Mateo 5, 38-39. “Han oído que se dijo ojo por ojo y diente por diente, yo les digo…”
Escuchemos la pregunta de Pedro: Mateo 18, 21-22. Cuántas veces debo perdonar…?
EL MANDAMIENTO DEL AMOR TIENE UNA NOTA ASCENDENTE:
Amar al prójimo como a nosotros mismos - Mateo.22, 35-39
Amar al prójimo como a Cristo Mateo - .25,40
Amar al prójimo como Cristo nos ama a nosotros - Juan.15,12
Amar al prójimo como Cristo ama al Padre - Juan.17,21-22