El Conocimiento
Creencia y Confianza
"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no es de vosotros, pues es don de Dios" (Efesios 2:8).
La gracia de Dios es la fuente abierta que salva al pecador. "Por gracia sois salvos"
La gracia de Dios es un atributo infinito de Dios. El primer y último movimiento causa de nuestra salvación, es la gracia de Dios. "Ningún hombre viene a mí, excepto el Padre que me ha enviado", dijo Jesús. El llamamiento eficaz de Dios es la gracia. Incluso nuestra fe es el resultado de una operación divina. Nuestra salvación es por gracia mediante la fe en Jesucristo.
"A su debido tiempo, Cristo murió por los impíos" Dios en Su gracia maravillosa, proveyó este sacrificio el cuál borra todos nuestros pecados.
¿Por qué la fe es tan importante? La fe es el o conducto a través del cuál recibimos el regalo de Dios de la salvación.
Vamos a dejar muy claro que la fe no salvará. Somos salvos por la gracia de Dios. La fe no es una fuente independiente de la salvación. No es la cantidad de fe que tenemos como si fueramos a psicoanalizarnos mismos hasta un cierto nivel de fe. La fe no es el poder que salva. La salvación se recibe por "mirar a Jesús" Dios nos salva por Su gracia. La fuerza salvifica de Dios se encuentran en Su gracia, y no en nuestra fe. La fe se centra en nuestra mirada sobre Jesucristo quien murió por nuestros pecados.
"Por gracia sois salvos por la fe."Usted pensaría que no podría conseguir mucho más claro que eso. C. H. Spurgeon dijo que la fe se compone de tres cosas: "El Conocimiento, la Creencia y la Confianza".
Porque mientras aún éramos débiles (pecadores) en el momento adecuado, Cristo murió por los impíos, Dios muestra Su amor hacia nosotros (Rom. 5:6-8). Es este conocimiento esencial que necesitamos para ser salvos. Sin saber que somos pecadores, y que Jesús murió por nuestros pecados, no podemos ser salvos. Usted no puede salvarse sin conocer el hecho de que Jesús murió por usted, en su lugar en la cruz.
"La fe viene por el oír y el oír la palabra de Dios" (Rom. 10:17). Nosotros recibimos la justicia de Dios por la fe en Jesucristo, para todoa aquellos que creen, porque no hay distinción, por cuanto todos habíamos pecado y estabamos destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente, mediante la redención que es en Jesucristo, a quien Dios puso como propiación en su sangre por la fe.
ptr. J. B.
|