AGRADECIMIENTO A DIOS Y A LA VIDA.
Un doloroso día sufrí y perdí mucho,
entonces, lloré muy amargamente.
Aprecié mucho cuanto me fue dado,
amor, consuelo, fortaleza y paz.
Dios me rodeó con sus fuertes brazos,
Mi familia me abrazó con los suyos,
hermosos recuerdos llenaron mi alma.
Una etapa muy difícil comenzaba…
Fue allí cuando descubrí cuánto tenía,
comprendí que me rodeaba tanto amor...
Que no debería sentirme sola.
Bajé mi cabeza y agradecí, mucho.
Araceli