REFLEXIÓN VIERNES 10 DE FEBRERO DE 2017.
“El fiel amor del Señor nunca termina; su compasión no tiene fin, cada mañana se renuevan. ¡Inmensa es su fidelidad!” Lamentaciones 3:22-23.
¿Cuántas veces las cosas no salen como nosotros las esperamos? Muchos en esos momentos difíciles, acuden a expresiones que demuestran su desesperación. No es raro escuchar a alguien decir que se levantó con el pie izquierdo. Otros dicen: Todo me sale mal, tal parece que hubiera matado alguien. etc. ¿Le suenan familiares esas expresiones?
¿En qué situación desesperante y difícil te encuentras hoy? De pronto dices: No hay esperanza, esto que me está sucediendo no tiene solución. Esto solo le sucede al Chavo del Ocho y a mí. Pero no es así, nuestro Padre Celestial tiene el control y nada escapa a su mirada. Dios quiere que miremos con ojos de esperanza, confiados en su presencia y su poder. Para Dios nada es imposible y nada lo toma por sorpresa.
Cuando las circunstancias son difíciles, no hay que añadir necedad a la necesidad. Tiene más sentido confiar en el SEÑOR y esperar en su misericordia. “Que las misericordias del Señor jamás terminan, pues nunca fallan sus bondades; son nuevas cada mañana; ¡Grande es su fidelidad!” Lamentaciones 3:22-23.
Aunque tengas temor ó pases por intensa angustia, confía en el Señor, deja a El tus cargas. Podemos encontrar siempre consuelo, dirección y confianza, cuando nos apoyamos en la gran fidelidad de nuestro Dios.
ORACIÓN
“Soberano Dios y Padre Celestial: “Tú fiel amor nunca termina; tu compasión no tiene fin. Tus misericordias son nuevas cada mañana y cada noche proclamo tu fidelidad. Eres Todo Poderoso, arriba en el cielo y aquí en la tierra. Independientemente de mis circunstancias, dispongo mi corazón y extiendo a ti mis manos, porque mi socorro eres tú, oh Dios, que me salvas y me proteges; fortaleces mi alma y renuevas mis fuerzas, en el poderoso nombre de mi amado Señor Jesucristo.” Amén y Amén.
-FELIZ FIN DE SEMANA-
Arbey Serna Ortiz