REFLEXIÓN UNA VENTANA AL CIELO VIERNES 29 DE DICIEMBRE DE 2017.
“Nadie puede agradar a Dios si no tiene fe. Cualquiera que se acerque a Dios debe creer que Dios existe y que premia a los que lo buscan.” Hebreos 11:6.
Muchos demuestran su poca fe, cuando se acercan a Dios en oración, solo cuando ya han fracasado en su intento de solucionar sus problemas por sus propios medios. Algunos cansados de acudir donde el brujo, el adivino y de utilizar la lectura de las cartas astrales y de los baños de hierbas etc., finalmente piensan que DE PRONTO Dios puede hacer algo por ellos. El que ora con dudas acerca de la verdad de las promesas de Dios, deshonra a Dios. Quien así procede recibe el nombre de persona de doble ánimo. “No piense pues quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor” Santiago 1:7.
La incredulidad funciona como un corto circuito que impide que Dios haga sus grandes obras. Cuando el Señor Jesús estuvo en Nazaret, su tierra, dice la Escritura: “Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la incredulidad de ellos.” Mateo 13:58.
En cambio, una fe tan pequeña como un grano de mostaza, cuando es situada en el camino correcto: DIOS y su PALABRA, es una fe que mueve montañas. El SEÑOR JESÚS le preguntaba a la gente si creían que Él podía hacer lo que ellos pedían. Cuando ellos respondían que SI, Él contestaba: “Conforme a vuestra fe os sea hecho” Mateo 9:29b.
Es casi imposible complacer a Dios sin fe: “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.” Hebreos 11:6. ¿Espera usted una respuesta? ¿Está acaso su incredulidad limitando el poder de Dios? ¿Qué cosas esperas recibir de parte de Dios en este año 2018? Si puedes creerle al SEÑOR JESÚS, Él te dirá: “Conforme a vuestra fe os sea hecho” Mateo 9:29b.
ORACION
“Soberano Dios y Padre Celestial: ”Presento ante tu amante mirada mi impotencia, porque tú conoces y comprendes, te preocupas y das respuesta. Tuyos, oh Dios, son los cielos y la tierra. Eres poderoso, soberano y eterno. Independientemente de mis circunstancias, en todo tiempo espero en ti; derramo delante de tu presencia mi corazón y solo en ti reposa mi alma. En ti está mi salvación y mi gloria; eres mi roca fuerte y mi refugio.
Hoy Dios y Padre Celestial te presento mi vida, saturada de defectos, pero sé que tu poderosa y divina mano me transforma, me anima y me guarda en cada paso que yo, mis hijos, mi familia y mi descendencia demos en este nuevo año que empezamos. Tú confirmas la obra de mis manos, tus bendiciones y tu paz me persiguen y mi alcanzan. Tú providencia cuida de mí, de los míos y de todos los que me rodean; me rindo ante tu providencia. Guarda mi mente y mi corazón y perfuma con tu aliento mi salir y mi entrar, cada instante de este nuevo año, 2018, dándote la gloria y el honor, en el poderoso y maravilloso nombre de mi SEÑOR JESUCRISTO.” Amén y Amén.
-FELIZ NAVIDAD Y VENTUROSO AÑO 2018-
ARBEY SERNA ORTIZ