“El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente, generosamente también segará.” (1 Corintios 9:6).
Dios quiere que Le obedezcas, incluso cuando las cosas no van a tu manera. Si estás pasando dolor en tu matrimonio, comienza a ministrar a otros que están en necesidad. Cuando tus hijos se encuentran en situaciones difíciles, empieza a servir en el ministerio de los niños. Cuando tu economía está casi por los suelos y no ves que se acerque a ti ningún recurso, da siempre que el Espíritu Santo toque tu corazón y te mueva a dar.
Dios quiere que Le obedezcamos, amigos. Cuando tú Le obedeces, verás las ventanas del cielo abiertas para ti. Dios no va a retener Su mano de ti, porque Él desea derramar Su bendición sobre ti, para mostrarte Su favor.
Este es un mensaje de "bendición". Quiero verte bendecido y te animo a recibir la plenitud de la bendición de Dios, sea que tengas mucho, o que digas: "tengo tan poco". Dios honra eso.
Tal vez tú tengas sólo un poco de tiempo para servir a los demás en el reino de Dios, porque tu trabajo es tan exigente o debes que viajar mucho. Es posible que tengas poco tiempo para dar a tu iglesia, pero toma ese poquito que tienes y empieza a derramarlo sobre los demás y verás que Dios lo multiplicará. Se multiplicarán tu tiempo y esfuerzo, y te verás con más tiempo para hacer otras cosas además de más tiempo para estar con Dios.
Cuando te encuentras dando la más pequeña de las cosas, siendo generoso como Jesús lo es, el Espíritu Santo va usará las cosas más simples, casi lo necio de este mundo y te dará de vuelta una bendición.
“Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo” (Lucas 6:38).
GARY WILKERSON