REFLEXIÓN UNA VENTANA AL CIELO VIERNES 21 DE DICIEMBRE DE 2018.
“Y tú, niño, profeta del Altísimo serás llamado; porque irás delante de la presencia del SEÑOR, para preparar sus caminos; para dar conocimiento de salvación a su pueblo, para perdón de sus pecados, por la entrañable misericordia de nuestro Dios, con que nos visitó desde lo alto la aurora” Lucas 1:76-78.
Ese niño profetizado cientos de años atrás, es la luz del mundo. La Navidad trata de la luz y JESÚS es la luz del mundo. “En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron, contra ella.” Juan 1:4.
Por eso es especial la Navidad, porque contemplamos el regalo inefable de Dios al enviar a su amado Hijo JESUCRISTO “Para dar luz a los que habitan en tinieblas y en sombra de muerte; para encaminar nuestros pies por camino de paz.” Lucas 1:76-78.
No ignore esa luz que vino a este mundo y nació en Belén. Su nombre es JESÚS. El removerá tus tinieblas, embellecerá tu vida y te adornará como a una estrella. Te llenará de esperanza Te inundará tu vida con su luz. Deposite en Él tu confianza, Él nunca te dejará ni te desamparará, porque El no cambia, Él es eternamente fiel.
Clamemos a Dios con toda nuestra alma, para que nuestros corazones y nuestros hogares, resplandezcan con el conocimiento de aquel al que celebramos en la Navidad, a “JESUCRISTO”, el Hijo del Altísimo, El Dios hecho hombre, La Palabra eterna del Padre, La Estrella de la Mañana, El Cordero de Dios, El Sanador, El SEÑOR y SALVADOR. Hoy es tu día, has un alto en tu camino y permitirle al Rey de Reyes y SEÑOR de Señores, que inunde todo tu ser con su luz y te colme de su amor, su gozo y su paz.
ORACIÓN
“Soberano Dios y Padre Celestial: ”Gracias por el regalo precioso de tu amado Hijo. Nuestro Testigo, Profeta, Intercesor, Guerrero, Sacerdote y Rey. SEÑOR JESÚS, necesito tu luz, necesito tu verdad. Ven a mi corazón, perdona mis pecados, sálvame y enciende tu resplandeciente luz en mi vida. SEÑOR, ayúdame para que pueda reflejar tu presencia en mí, lo pido con gratitud, en tu santo nombre Amén y Amén.
-FELIZ NAVIDAD-
ARBEY SERNA ORTIZ