REFLEXIÓN UNA VENTANA AL CIELO VIERNES 8 DE FEBRERO DE 2019.
“Ustedes viven siempre angustiados; siempre preocupados. Vengan a mí, y yo los haré descansar” Mateo 11:28.
Cuando alguien nos formula una invitación, nos solo, tratamos al máximo de aceptarla, sino que, también, nos desbordamos en palabras de agradecimiento, para aquél que se acordó de nosotros y nos invitó. JESUCRISTO, gratuitamente, conociendo lo que a diario vivimos, nos formula esta invitación: “Ustedes viven siempre angustiados; siempre preocupados. Vengan a mí, y yo los haré descansar” Mateo 11:28. ¿Cuál ha sido tu actitud? Te has desbordado en palabras de alabanza y adoración para agradecerle la invitación personal que te hace? ¿Le das gracias por pensar en ti, querer tu descanso y anhelar tu bien?
El Dios Altísimo lo contempla todo y sabe de nuestras angustias, de nuestras preocupaciones, de nuestras dudas y nuestros temores. Nada de lo nuestro le es ajeno, nada de lo nuestro le es oculto a sus ojos. No hemos sido llamados por Dios para que la pasemos llorando todo el tiempo a consecuencia de nuestras frustraciones, tampoco nos ha llamado a ser infelices y pasar tristes todo el tiempo. La depresión no es lo que Dios quiere para ninguno de nosotros.
Puede ser que, en este momento, estás ahí, a punto de llorar, desesperado (a) presionado (a), las cargas que te agobian parecen cada vez más pesadas, te invade la angustia, no ves una mano amiga que se extienda hacia ti, te sientes tan desamparado y perdido como un alfiler en medio de toda la arena del desierto; como dicen en cierta región del País: - Te sientes más mas perdido que envolatado-. Pero El Dios y Padre Celestial, en su infinita bondad, te dice: “Echa sobre EL SEÑOR tu carga, y él te sustentará” Salmos 55:22ª. Vayamos pues, confiadamente a los pies de Jesús y Él hará más livianas esas cargas que nos agobian.
ORACIÓN
“Soberano Dios y Padre Celestial” Deposito en ti, todas mis preocupaciones, mis tristezas, mis dudas, mis temores, mis planes, mi presente y mi futuro, en tus divinas manos. Tú tienes cuidado de mí. Descanso en ti, porque tienes el control de todo; infinito es tu amor y tu bondad. Le das gozo y paz a mi vida y a pesar de las circunstancias que me rodean, mi fe en ti me da gozo, fortaleza y confianza. Tu fidelidad es por siempre y para siempre, en el poderoso nombre de mi SEÑOR JESUCRISTO.” Amén y Amén.
-FELIZ FIN DE SEMANA-
ARBEY SERNA ORTIZ