REFLEXIÓN UNA VENTANA AL CIELO VIERNES 7 DE JUNIO DE 2019.
“En lugar de rasgarse las vestiduras, rasguen su corazón. Cambien su vida y vuelvan al SEÑOR su Dios, compasivo y misericordioso, que no se enoja con facilidad, que está lleno de fiel amor y dispuesto a dar indulto.” Joel 2:13.
Nuestro Padre Celestial, nunca se cansa ni se fatiga. Siempre está atento a nuestros pasos y anhela mantener una relación individual con cada uno de nosotros. Por eso espera que independientemente del lugar y las circunstancias en que nos encontremos, nos volvamos a Él, reconociendo con sinceridad nuestros fracasos, nuestras debilidades y nuestras faltas.
El Altísimo conoce nuestro salir y nuestro entrar y nada de lo nuestro le es ajeno, Él es omnisciente y omnipotente. Nada de lo que sucede en nuestra mente y en nuestro corazón le es oculto. Todo nuestro ser está expuesto a su mirada. Conoce nuestra condición y nos extiende a cada uno de nosotros su compasión y misericordia y por su fiel amor nos cubre con su perdón. “En lugar de rasgarse las vestiduras, rasguen su corazón. Cambien su vida y vuelvan al SEÑOR su Dios, compasivo y misericordioso, que no se enoja con facilidad, que está lleno de fiel amor y dispuesto a dar indulto.” Joel 2:13.
Dios puede utilizar cualquier medio, aún los accidentes, las catástrofes naturales como instrumentos en sus manos para hacernos reconocer la necesidad de Él. Es como si nos dijese: Examina tu vida y tu conducta. ¿Estas obedeciendo mis mandamientos, poniéndome a mí en primer lugar? ¿Quieres seguir igual? ¿No quieres darle otro rumbo a tu vida? Cuando le entregamos el control de nuestra mente y de nuestro corazón al SEÑOR JESUCRISTO, nuestra vida es diferente, adquiere dirección y propósito.
Dios nos invita a que nos convirtamos a Él con todo nuestro corazón, aún con llanto y lamento. Nos dice que rasguemos nuestro corazón, y no nuestros vestidos. Nos invita a que nos volvamos de nuestros malos caminos. Él es misericordioso y se duele del castigo que nos aplica por nuestra desobediencia.
Es tu decisión: Escoge voluntariamente. Ó decides obedecer a Dios y permites que el transforme tu vida ó prefieres seguir en desobediencia y te sometes a su disciplina. No olvides nunca: “Dios es lento para la ira y grande en misericordia.”
ORACIÓN
“Soberano Dios y Padre Celestial: “Gracias porque eres compasivo y clemente, lento para la ira y abundante en misericordia y fidelidad;cercano estás, Altísimo Dios, a los quebrantados de corazón, y salvas a los abatidos de espíritu. Pues tú, Señor, eres bueno y perdonador, abundante en misericordia para con todos los que te invocan. Habitas en lo alto y santo, y también con el contrito y humilde de espíritu, para vivificar el espíritu de los humildes y para vivificar el corazón de los quebrantados. Te doy honra, gloria y alabanza, en el poderoso nombre de mi SEÑOR JESUCRISTO.” Amén y amén.
-FELIZ FIN DE SEMANA-
ARBEY SERNA ORTIZ