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General: ¿Cómo podemos tener paz en la tormenta?
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Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: hectorspaccarotella  (Mensaje original) Enviado: 27/09/2020 17:30
Aquel mismo día, los discípulos de Jesús vivieron muchos momentos en los que experimentaron el estar "en la cima" con el Señor.

Presenciaron grandes milagros como cuando la hija del principal de la sinagoga fue resucitada; dos ciegos recuperaron la vista; los mudos pudieron hablar; y el hombre poseído por demonios fue liberado. Pero cuando la tormenta llegó aquel día en el mar, el temor les invadió.

En aquel momento, sus mentes no podían recordar lo que habían aprendido sobre el poder y los propósitos de Aquel a quien seguían. Incluso, y por si fuera poco, ver caminar al Señor Jesús sobre el agua no les trajo alivio inmediato.

“Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo.” Mateo 14:26

Cuando las crisis nos golpean es fácil olvidar lo que sabemos de Dios. Se nos dificulta recordar cómo respondió a nuestras oraciones o simplemente nos rescató en el pasado, solemos olvidar la guía que hemos recibido del Espíritu Santo y las lecciones aprendidas en crisis pasadas. Solo el problema presente nos parece real.

Mientras nuestra mente da vueltas, la turbulencia emocional causada por las preocupaciones, no nos permite pensar con claridad.

Cuando esto sucede, la clave para recordar las verdades y promesas de Dios para nosotros, está en leer la Biblia. Otro recurso importante es un diario personal, de decir, que llevemos un registro escrito de nuestras experiencias diarias con el Señor.

El diario debe contener los detalles sobre cómo nuestro Padre celestial ha trabajado antes en nuestras vidas, es decir, las enseñanzas que hemos recibido y las veces que hemos sido bendecidos o librados de apuros por su mano.

Nos sirve como un mapa que nos señala dónde cada uno de nosotros estuvo antes y de qué manera fuimos socorridos por Dios. A pesar de que la prueba actual sea nueva, mirar hacia atrás nos y recordar la naturaleza inmutable de Dios a lo largo de los años y tenerla en cuenta, nos brindará consuelo porque si lo hizo aquellas veces, lo volverá a hacer.

Como cristianos, no solo tenemos que luchar a diario contra el yo carnal que tiende a razonarlo todo y a confiar solo en sí mismo, sino que también  tenemos un enemigo invisible quiere desenfocarnos a toda costa del Señor y sus promesas, así que debemos frustrar su estrategia dedicando tiempo a meditar en la Palabra de Dios y llevando un registro diario de lo que hace por nosotros.

Hacer esto nos ayudará a recordar cómo Dios nos ha socorrido personalmente y nos protegió con su poder divino a lo largo de nuestras vidas.



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