.LA MAS BELLA HISTORIA DE DIOS.

El pesebre no puede ser un objeto decorativo más,

 con ocasión de las fiestas de fin de año:

 éste ha de ser montado en familia, poniendo en él un sello personal.

 Así, hay familias que se encargan de confeccionar ellas mismas

 el pesebre con figuras de cartón o arcilla.

 También hay quienes entregan pajas a los niños

 para que coloquen bajo la cuna de Jesús cada vez que hacen una buena obra;

 de esta manera, el Niño tendrá el calor de esas pajas,

 que es el amor de cada uno demostrado en pequeños servicios y sacrificios.

 Con el mismo propósito de hacer buenas obras para preparar el alma

 para el nacimiento de Jesús,

 hay quienes van poniendo

 ángeles o estrellas en el establo donde nacerá el Niño Dios:

 así, serán muchos ángeles los que lo adorarán y

decenas las estrellas que iluminarán la cueva.

 Por otra parte, familias de todo el mundo tienen la costumbre de

rezar la novena al Niño Dios ante el pesebre,

otras encienden cada domingo de adviento

 una vela de la corona y rezan esperando la llegada de Jesucristo.

 Otros cantan villancicos, preparan obras de teatro de Navidad...

 Son todas formas de dar un sentido cristiano a la Navidad y

crecer en la vida de fe.

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