Un estudiante de Pedagogía y dos de Medicina han sido expulsados de la Universidad de Camagüey por firmar el Proyecto Varela, informó el Comité Gestor Ciudadano de la iniciativa disidente.
Roger Rubio Lima, estudiante de segundo año del Instituto Superior Pedagógico José Martí, en la especialidad de Artes Plásticas, fue sancionado el 26 de septiembre de este año. Joan Columbie Rodríguez y Harold Cepero Escalante, alumnos de cuarto año de Medicina, corrieron igual suerte el pasado 13 de noviembre. En las reuniones para decidir el castigo participaron los máximos representantes del Partido Comunista de Cuba, la Unión de Jóvenes Comunistas y la Federación Estudiantil Universitaria en el centro docente.
El 12 de noviembre, los sancionados y otros 14 compañeros entregaron una carta donde proponían que, antes de emitir cualquier juicio, se sometiera el Proyecto Varela a debate colectivo, para que profesores y alumnos pudieran analizar si se trataba de una petición ciudadana justa o si iba en detrimento de la democracia cubana. Los estudiantes también llamaron la atención sobre lo establecido por el Código Penal vigente, que sanciona a quienes obstaculicen un derecho recogido en la Constitución.
Por otra parte, la estudiante de cuarto año de Derecho Yamilet Cruz, quien pidió explicaciones sobre la forma de actuación respecto a los jóvenes y sugirió la publicación de la iniciativa, fue citada por las mismas autoridades universitarias el lunes de esta semana. Por el momento se desconoce si adoptarán alguna medida en su caso.
El Proyecto Varela fue presentado en mayo pasado a la llamada Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, con el respaldo de más de 11.000 firmas. Su texto pide la realización de un referéndum para aprobar cambios a favor de la libertad de expresión, asociación y creación de empresas privadas. Además propone una amnistía para los presos políticos y la elaboración de una nueva ley electoral.
Las acciones represivas contra los jóvenes universitarios firmantes del Proyecto no constituyen casos aislados. El líder Movimiento Cristiano de Liberación y principal promotor del Proyecto Varela, Oswaldo Payá, ha denunciado en varias ocasiones la confiscación de firmas a los activistas disidentes, las amenazas e incluso golpizas a quienes han decidido contribuir a la propuesta.