Por PA`I OLIVA
oliva@rieder.net.py
El año 1999 se fundó en Cuba la Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas de La Habana, en los edificios de la Escuela Naval de la Marina de Guerra (un buen ejemplo para nosotros, con tantos cuarteles inútiles que podrían convertirse en colegios y universidades). Según la BBC de Londres, hace varios años dijo Fidel Castro que lo que necesita Haití no eran soldados sino médicos. Y ahora lo ha cumplido.
Se graduaron en la primera promoción 1.610 jóvenes de 28 países latinoamericanos y 33 etnias (de ellos el 45,9% son mujeres).
Menos el pasaje en avión de ida y vuelta, el Gobierno cubano les ha pagado toda la carrera, incluyendo libros, alojamiento y comida. En la actualidad siguen sus estudios de medicina otros 10.508 jóvenes de todo el continente.
No puedo dejar de comparar esta Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas de La Habana con la tristemente famosa Escuela de las Américas en los EEUU, donde se formaron los militares que dirigieron dictaduras, dieron golpes de Estado o torturaron a miles y miles de compatriotas latinoamericanos. Ha llegado el momento de hacer justicia y de rendir un homenaje a una nación hermana que sometida desde hace años al bloqueo más injusto, hace Patria con la solidaridad internacional. Eso que una poetisa nicaragüense llamó "la ternura de los pueblos."

Lealtad