FELIPE QUISPE, EX CANDIDATO PRESIDENCIAL DE BOLIVIA: "EL MAS ES UNA ESPECIE DE PROSTIBULO"
El líder indígena Felipe Quispe no duda en calificar a Evo Morales como un "oportunista" que nunca ha peleado por los derechos de la "nación indígena". Ahora estará pendiente de si cumple con sus promesas.
Por Gaspar Ramírez El Mercurio Chile Infosearch: Francisco Díaz Dept. de Investigaciones La Nueva Cuba Diciembre 25, 2005 El líder indígena se desmarca del Presidente electo Evo Morales y dice considerarse como oposición al nuevo gobierno.
Antes de que el Presidente electo boliviano Evo Morales tomara la bandera de la lucha y de la reivindicación indígena, un hombre, un ex guerrillero, ya la había tomado como propia: Felipe Quispe Huanca, el "Mallku" ("príncipe", en aymara). "Nadie pensaba en el triunfo tan grande de Evo Morales. Pero también le ha costado mucho dinero. Ha tenido que corromper a los indígenas, ha tenido que emborracharlos. Entonces ha quedado igual que los partidos millonarios", asegura desde La Paz Quispe, el ex candidato a la presidencia por el Movimiento Indígena Pachakuti, quien sacó apenas algo más del 2% de los votos. Quispe cuestiona el origen de tanto dinero. "Seguramente está pagado por las transnacionales", dice. El líder indígena, a quien de niño sus maestros le prohibían hablar aymara, señala que ahora que ha pasado la resaca de las elecciones está "a la expectativa de que Evo Morales cumpla con lo que ha prometido a la población boliviana. Si no cumple en los primeros 90 días, creo que Evo Morales va a tener problemas". "Al árbol se le conoce por sus frutos. Hay que ver si son agrios, dulces, agusanados; vamos a probar", relata. ¿Tareas inmediatas para el nuevo gobierno? Quispe no duda en nombrar la más importante: la nacionalización de los hidrocarburos sin indemnización para las empresas afectadas. Después enumera varias: realizar la Asamblea Constituyente, recuperar territorios para los pueblos indígenas, anular las leyes neoliberales, y la cárcel para Gonzalo Sánchez de Lozada, el ex Presidente autoexiliado en Estados Unidos que gobernaba el país en octubre de 2003 -el "octubre negro"-, cuando murieron unas 60 personas a manos del Ejército. "Si es que Morales representa los intereses del pueblo indígena, tiene que entregar el poder y también territorios a los indígenas", señala Quispe. Además, destaca la necesidad de carreteras, de agua potable, energía eléctrica, postas sanitarias y hospitales, "porque Evo Morales en su discurso dijo que iba a entregar un tractor para cada indígena, para que labren la tierra. Nunca hemos sido atendidos por ningún gobierno". "Si no cumple, la población boliviana lo va a conocer como un mentiroso. Nunca más van a apoyar a un mentiroso", dice. "García es un traidor" Quispe cuenta que a Evo sólo lo conoce como dirigente, pero no como amigo. Pero de quien puede dar detalles y opiniones fundadas es sobre el vicepresidente de Morales: Álvaro García Linera, matemático y sociólogo. "Lo conozco mucho, él ha cambiado, ahora es un nuevo neoliberal, ya no es como en esos tiempos", señala Felipe Quispe, quien se refiere a los años en los que militaban en el Ejército Guerrillero Túpac Katari (EGTK), por lo que ambos estuvieron encarcelados. "En esos tiempos, por el año 1984, claro que éramos muy juntos, hermanados. Yo lo llevé a muchos lugares, lo he indianizado, le he enseñado mi cultura política, hemos estado en los lugares sagrados comprometiéndonos, jurando para liberar a la población indígena", dice. "Resulta que me ha traicionado, es un traidor que está en el MAS (Movimiento al Socialismo). Cuando yo estaba en Venezuela este año, me enteré de que era candidato a la vicepresidencia de Morales. Es una vil traición", cuenta con voz amarga. Quispe estima que el gobierno del MAS va a implantar un "capitalismo andino". Es decir, "le venderán gas a Chile, después van a despenalizar la droga; ése era el pensamiento de García Linera. Pienso que harán un estado neoliberal con una careta indígena". "Evo es un oportunista, él nunca ha peleado con nosotros. Nosotros somos los autores de llevar a una instancia superior a la nación indígena", opina. "El MAS es una especie de prostíbulo donde trabajan los prostitutos de la izquierda señorial. Ahí Álvaro García Linera es uno de los prostitutos", dice Quispe, categórico y cortante. Cree que en estos momentos al interior del MAS debe haber una fuerte lucha por ocupar los puestos ministeriales. Sube la voz al preguntarle sobre si aceptaría ocupar algún cargo en el nuevo gobierno. "Nosotros no podemos entrar al horno junto con Evo Morales. Preferimos salir de esto, desmarcarnos, ser oposición. Es más fácil ser opositor que del gobierno. No tenemos por qué hablar, no tenemos por qué ensuciarnos, no queremos entrar a ese prostbulo", sentencia. "Nosotros no podemos entrar al horno junto con Evo Morales. Preferimos salir de esto, desmarcarnos... No queremos ensuciarnos". |