| Argentina, Uruguay y don Juan Carlos
Humor negro: Un Rey aficionado a la caza de osos, propuesto para mediar en un conflicto ecológico | | | | | (IAR-Noticias) 06-Noviembre-06 | 
| | En la imagen, el Rey cazador, Juan Carlos, entre Fox y Zapatero durante la XVI Cumbre Iberoamericana | | Los antecedentes de cazador empedernido y depredador de la naturaleza del Rey de España, no impidieron un pedido del presidente Néstor Kirchner para que inrtevenga como "mediador" en el conflicto ecológico que mantienen la Argentina y Uruguay a raíz de la instalación de una trasnacional papelera que amenaza con contaminar el rio Uruguay que divide ambos países. Informe especial Para los que manejan información confidencial en España no es ningún secreto que el Rey Juan Carlos es el principal lobbysta de los intereses capitalistas españoles en el exterior. Es vox populi -aunque la prensa española lo oculta celosamente- que el Rey Juan Carlos es un hábil entrelazador de operaciones financieras que aportan jugosos dividendos a sus misteriosas "cuentas en negro" en las entidades bancarias que se valen de su influencia para conseguir negocios. Pero además de esa ocupación profesional que ya le ha proporcionado importantes ganancias a las arcas de la "familia real" , el Rey de España es conocido por su afición a la "buena vida" y por su irrefrenable pasión de matar animales en cacerías turísticas desarrolladas durante sus "viajes de negocios" encubiertos en misiones oficiales. En una de esas "misiones oficiales secretas", esta vez en Moscú, don Juan Carlos fue acusado por la prensa rusa de matar "por placer" a un oso amaestrado (animales que en particular le despiertan su instinto de cazador). En octubre, el gobernador de la región rusa de Vólogda, Viacheslav Pozgaliov, ordenó investigar todas las circunstancias de la cacería que tuvo lugar en agosto pasado durante la visita privada del Rey Juan Carlos. La información destacaba que el Rey abatió un oso criado en una aldea vecina y “totalmente manso”, que fue además “embriagado previamente con abundantes cantidades de vodka con miel”. La afición enfermiza de Juan Carlos I de Borbón por los safaris de caza no es desconocida: permanentemente se hace escapadas para cazar osos, jabalíes y bisontes, a lejanos paraísos de Europa y Ãfrica, en el mayor secreto posible. En febrero del 2004 se fue a Polonia invitado por el presidente Alexander Kwasinieswski a cazar faisanes y terminó cazando un zubr o bisonte europeo, una especie protegida por estar en peligro de extinción. Pagó 7.500 dólares por abatir a un anciano zubr, y el escándalo en Polonia provocó que los españoles se enteraran de la vocación de sus Rey por los safaris y asesinatos de animales. En octubre del mismo año, 2004, el Rey participó en una cacería en los Cárpatos rumanos y abatió un lobo y una osa gestante, especies protegidas por la Convención de Berna, lo que originó una protesta por parte de los rumanos amantes de los animales y la ecología. Una cacería en Burgenland, Austria, en enero del 2005, también movilizó a los ecologistas austriacos. Hace unos días estuvo en los Montes de Toledo, cazando con la princesa Carolina de Mónaco y su esposo Ernesto de Hannover, que por estas fechas, acostumbran a venir a España”. Son incontables los safaris y animales abatidos por el Rey Juan Carlos, en cacerías y "viajes de negocios" representando a su país, que sólo llegan a los oídos de los españoles través de los comentarios de los medios internacionales. "Mediador ecológico" Los antecedentes de cazador empedernido y depredador de la naturaleza del Rey de España, no impidieron un pedido del presidente Néstor Kirchner para que inrtevenga como "mediador" en el conflicto ecológico que mantienen la Argentina y Uruguay a raíz de la instalación de una trasnacional papelera que amenaza con contaminar el río Uruguay que divide ambos países. En el marco de la XVI Cumbre Iberoamericana realizada en Uruguay, el presidente argentino Néstor Kirchner le solicitó el sábado al Rey Juan Carlos de España que intervenga como mediador del diálogo con Uruguay para la superación del diferendo que mantienen ambos países platenses por la instalación de plantas de celulosa a orillas de un río limítrofe, aseguraron fuentes del gobierno español.
El Rey Juan Carlos es el principal lobbysta de los intereses económicos españoles que son fuertes en varios sectores de Argentina, en particular en la energía, e interviene en las negociaciones de contratos, tarifas y precios, contando con la especial simpatía de Kirchner, otro hábil manejador de cuentas secretas en Suiza. La propuesta de "facilitación" española tiene origen dudoso. La secretaria de Estado de España para Iberoamérica, Trinidad Jiménez, indicó que había sido Kirchner quien solicitó a Zapatero la buena voluntad del Rey, mientras un portavoz de Buenos Aires aseguró que fue Juan Carlos quien se ofreció como facilitador en su reunión con el mandatario argentino. De cualquier manera, y más allá de la discusión de los "negocios" que hay de por medio, el Rey Juan Carlos, un cazador despiadado de animales en extinción, medie en un conflicto ecológico se parece en mucho a una chiste de humor negro. La construcción de dos plantas de celulosa en la margen uruguaya del Río Uruguay, una de la firma finlandesa Botnia y otra de la española Ence, consideradas empresas potencialmente dañinas del ambiente, ha levantado protestas masivas y cortes de ruta por parte de organizaciones sociales y ambientalistas de la Argentina. Los estudios exhibidos por organizaciones ambientalistas demuestran que el daño ecológico que va a producir la instalación de esas multinacionales en la fauna y en el medio ambiente resultarán irreversibles si no se las detiene. Hasta ahora las trasnacionales, con la complicidad del Banco Mundial y de tribunales internacionales, siguen adelante con su proyecto contando con la complicidad de los gobiernos de Uruguay y de Argentina. Tanto Kirchner como el presidente uruguayo, Tabaré Vazquez, ya aceptaron que don Juan Carlos intervenga como mediador para "destrabar el conflicto". ¿Podrán dormir tranquilos los que se oponen a este proyecto de depredación del medio ambiente? |
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