Miguel Terán, quien ejecutó hace 40 años a Ernesto “Che” Guevara, fue operado por médicos cubanos en enero, aunque no para restaurar su vista como reportaron versiones periodísticas la semana pasada, familiares confirmaron el viernes a la AP. Según publica hoy el diario Los Tiempos se trató de una operación muy sencilla.
Terán nunca perdió su vista, pero fue operado para extraerle una “carnosidad” en un ojo, una intervención menor que no resultó exitosa porque el militar aún acusa molestias como enrojecimiento frecuente, dejaron los familiares a AP bajo la condición de que no se difundieran sus nombres.
La operación fue parte de la “Operación Milagro” de ayuda del gobierno cubano al boliviano, en la cual Cuba ha mandado más de 2.000 médicos desde diciembre de 2005.
El diario habanero Granma informó el sábado que un hijo de Terán se dirigió al diario El Deber de esta ciudad boliviana, para agradecer a la misión cubana por haber devuelto la vista al suboficial.
Sin embargo, las fuentes señalaron que los hijos de Terán no viven desde hace varios años en Bolivia y que nunca emitieron tal mensaje. El Deber ha informado que quien se presentó hace varios meses como hijo de Terán desapareció misteriosamente, y que su identidad nunca pudo ser verificada.
Terán es el militar boliviano que el 9 de octubre de 1967 cumplió la orden del gobierno democrático boliviano de entonces, general René Barrientos, de ejecutar al “Che” tras su captura en la víspera por el entonces capitán y ahora general retirado de ejército Gary Prado.
Prado ha señalado que la orden fue imprevista, porque se suponía que el Che sería juzgado en Santa Cruz por alzamiento armado contra el estado boliviano y otros delitos conexos, como primer responsable de una guerrilla con combatientes cubanos, peruanos y bolivianos que dejó 55 soldados y unos 50 guerrilleros muertos.
En declaraciones a la AP, el general Prado dijo también que tiene contacto esporádico con Terán y que el suboficial no había perdido la vista.
Manifestó su extrañeza por las versiones de que Terán había sido operado por médicos cubanos, al insistir en que como militares tienen el seguro de la Corporación del Seguro Social Militar (Cossmil). “Tenemos un excelente oftalmólogo aquí, (Terán) no tendría necesidad de acudir a otro lado”, dijo el general.
Sin embargo, las fuentes indicaron que Terán sí decidió someterse a cirugía menor como una decisión espontánea cuando acompañó a una consulta con los facultativos cubanos a una mujer mayor, amiga de la familia. Allí se presentó la oportunidad y la intervención se hizo en el momento, indicaron los familiares.
Agregaron que el militar viajó hace varias semanas a Brasil y que permanecerá allí por varias más para recibir atención especializada por una dolencia en las costillas.