La lectura que de la historia realizan las izquierdas mediáticas en torno a figuras como Augusto Pinochet o Fidel Castro resultan desiguales y medidas con distinto rasero. A Pinochet de la ha tratado como el gran monstruo dictador pero a Fidel Castro se le perdona todo o casi todo. Tal es la confusión de medios de comunicación como el diario español “El País”, con una agenda política muy definida y que pasan por ser medios “independientes”. En la primera entrega de este artículo señalamos el caso de Pinochet. Aquí  apuntaremos algunos datos que contextualizan el Chile de Salvador Allende al que respondió Pinochet y la filiación de Allende al comunismo soviético. La rama castrista de éste –cercana a Allende- tiene hoy nuevos intentos del neocomunismo, visible en países como Venezuela.

Vinculación de Allende con el comunismo soviético

El exarchivista de la KGB Vasili Mitrokhin logró sacar de Moscú, con ayuda de agentes de inteligencia británicos y al huir a Londres en 1992, los archivos que llevan su nombre y que han tenido un amplio impacto mundial al ser publicados en Inglaterra con los títulos: The Mitrokhin Archive: The KGB in Europe and the West (2000) y The Mitrokhin Archive II: KGB and the World (2006). Después serían publicados en otros países.

Según estos archivos, La KGB mantenía "contactos sistemáticos" con Allende desde 1961. Envió miles de dólares a su campaña a través del partido comunista chileno e, incluso, sobornó a un adversario para que no se presentara a las elecciones presidenciales. Lo que así sucedió, pues, el escritor y poeta Neruda retiro su candidatura en la que representaba al Partido Comunista Chileno. Allende se presento como candidato a presidente por la Unión Popular (UP) del partido Socialista Chileno, Partido Comunista Chileno y otros partidos y fuerzas menores. Allende gano  en 1970 las elecciones presidenciales por el 36,6% frente a Alessandri con el 34,9%, candidato de la derecha (Partido Conservador, Partido Liberal, etc.) y que había sido presidente de la república chilena en 1958 y 1964, y frente a Tomic con el 27,8%, candidato del Partido Demócrata Cristiano. 

En documentos internos, la KGB se atribuyó en parte el mérito de la victoria, que consideró un fuerte revés para la influencia de Estados Unidos en la región y en el marco de la guerra fría, de la toma de posiciones de ambas potencias que venía teniendo lugar en todo el mundo y con relación a lo cual América Latina era una zona estratégicamente sensible especialmente para los americanos.

El agente de la KGB que mantenía el contacto con Allende concertaba los encuentros a través de la secretaria y amante del presidente, Miria Contreras Bell, apodada La Payita. “Allende es muy atento con las damas y trata de rodearse de mujeres encantadoras”, escribió el agente Svyatoslav Kuznetsov, según lo publicado en los Archivos Mitrokhin. 

Cuando Kuznetsov sugirió reorganizar el ejército y los servicios de inteligencia chilenos y estrechar las relaciones de inteligencia con Moscú, “Allende respondió positivamente”, dice el archivo de la KGB.

Vinculación de Allende – UP con el comunismo castrista

El tirano comunista Fidel Castro también jugo un papel muy importante en el Chile revolucionario de Salvador Allende. Conviene recordar que el tirano comunista Castro y la Cuba comunista participaron muy activamente en dicho proceso revolucionario chileno. El tirano Castro recorrió Chile durante tres semanas en 1971 y donde, en el marco de la guerra fría en la que la Cuba comunista jugaba un papel no desdeñable, apostó claramente por una salida radical para Chile frente a lo que consideraba posiciones burguesas y reaccionarias. El tirano Castro, entre otras cosas, apoyo y relanzo las famosas caceroladas. El presidente Allende, y ante la actitud del tirano comunista Castro, en algún momento tuvo que decir que quien mandaba en Chile era él.

No obstante, Allende, en contra lo que había prometido al pueblo chileno y de forma especial, a los sectores moderados que integraban su candidatura, de que no implantaría el comunismo en Chile, paso a paso y con poco mas de un tercio de los escaños parlamentarios conseguidos en 1973, inició una deriva comunista en Chile con el apoyo y, sobre todo, la presión de fuerzas y movimientos pro castristas que, en la calle y por medio de los sindicatos, la educación, la universidad, la cultura y otros sectores para el combate revolucionario, propugnaban la alternativa mas radical y pro comunista. 

Experiencias neocomunistas en Venezuela y otras partes 

El comunismo cubano, el neocomunismo internacional (Foro de Sao Paulo, etc.), ahora sin la guerra fría y sacando lecciones de lo que paso en Chile, Nicaragua y otras partes, están, de nuevo, intentando en la Venezuela del ex golpista, extremista y pro castrista de Chávez y en otras partes, lo que no consiguieron con el proceso revolucionario pro comunista chileno, nicaragüense, etc. Utilizan el movimiento antiglobalización y la experiencia venezolana como punta de lanza. En el proceso revolucionario venezolano están colaborando fuerzas neocomunistas, antioccidentales y radicales de América latina y otros continentes.

En la actualidad cuentan con una situación económica mucho mas favorable, con que ya no hay guerra fría y el comunismo no provoca tanto miedo al hundirse el Muro de Berlín, la URSS y sus satélites; cuentan con  el precio del petróleo y gas venezolano pero también con la colaboración, entre otros, del régimen fundamentalista extremista de Irán y de otras fuerzas y movimientos extremistas, profundamente antiamericanos.

No puede olvidarse cómo el tirano comunista Castro en sus pastorales revolucionarias, que escribe una vez que ya no puede volver al poder debido a su grave enfermedad y a las operaciones que sufrió, ha reivindicado la paternidad de la campaña propagandística lanzada con el nombre de Diálogo de Civilizaciones y que después retomo el presidente Jatami de Irán y el presidente español ZP- Zapatero Presidente tras el atentado terrorista de destrucción masiva del 11M, el mayor de España y Europa que causo cerca de 200 muertos y miles de heridos, y tras los piquetes ilegales, golpistas y de “agitprop” del 13M y 14M que le dieron la vuelta a las encuestas electorales y a las elecciones generales del 14 de marzo de 2004.

Todo ello, y mucho más que podríamos añadir, le da, de momento, al Socialismo Bolivariano del Siglo XXI mucho mayor margen de maniobra. Además, la guerra terrorista internacional, la internacional terrorista hace que, de momento, no se pueda prestar mucha atención al proceso revolucionario neocomunista venezolano y a otros procesos vinculados con el mismo. 

Estos procesos piqueteros y de permanente agitación social, estos modelos radicales vinculados con  el movimiento antiglobalización - altermundialista más radical (y en el que, también, se han integrado sectores nacionalistas y fundamentalistas radicales, sectores destructores-nihilistas de cuanto peor mejor), con el movimiento neocomunista y anarquista internacional, con foros (Foro de Porto Alegre, Foro Social Mundial, etc.), con lideres, movimientos, medios, tanques de pensamiento, fundaciones, ONGs, circuitos, redes, piquetes y fuerzas antioccidentales y antiamericanas, de momento,  vienen actuando con mayor astucia, versatilidad, preparación y rigor, con mayor capacidad de engaño, seducción, marketing, manipulación, contaminación, de dar gato por liebre para, por las buenas o por las malas, desalojar a sus oponentes, competidores (a los que desacreditan, a los que convierten en los peores chivos expiatorios y contra los que vale todo lo peor), para hacerse con el poder, para mantenerse en este el mayor tiempo posible y para, desde el poder, crear toda una estructura, organización, funcionamiento, red y representación política, ideológica, económica, financiera, empresarial, mediática, judicial, policial-militar-de seguridad, funcionarial, profesional, cultural y social que les permita, tanto en el gobierno como en la oposición, en lo público, privado y eclesial, en la sociedad civil, en el campo de los emisores, mediadores, de las instancias de encarnación, socialización, institucionalización, divulgación y agitación, ser una fuerza dominante, dirigente, decisiva, representar el mundo, imponerlo y hacerlo, crear, establecer e imponer lo política, ideológica, simbólica, icónica, económica, mediática, educativa, histórica, cultural, social, sexual y existencialmente correcto, y desestabilizar, deslegitimar, ningunear, liquidar y linchar simbólica, inmaterial pero, también, materialmente a sus principales adversarios y competidores, a sus principales críticos, a los que no se dejan recuperar, a los que no se pliegan a sus imposiciones y planteamientos. 

En los Archivos Mitrokhin se da cuenta de la importante ayuda aportada por la KGB para que el marxista Salvador Allende resultara elegido presidente de Chile. Esta operación fue considerada como uno de los mayores éxitos del espionaje soviético en su batalla contra Estados Unidos. 

Hay otras publicaciones que dan cuenta de que Allende fue un agente de la KGB con el nombre en clave de Líder. El contacto sistemático de Allende con la KGB, habría comenzado en 1961 cuando los soviéticos establecieron una misión comercial en Chile, que sirvió de pantalla para realizar operaciones encubiertas. Su contacto era Svyatoslav Kuznetsov. En esa época la URSS gastó más en Chile que en cualquier otro país latinoamericano, incluyendo un subsidio personal de 50.000 dólares para Allende, el Líder, que, aunque se declaraba marxista y partidario del proletariado revolucionario, tenía unos gustos muy refinados y sentía una gran atracción por los placeres más mundanos y libertinos. Su relación con las mujeres, al margen de su esposa, fue instrumentalizado y se volvió contra él en momentos políticos importantes.