El religioso se hallaba delicado de salud desde hace algunas semanas, según informó monseñor Ovidio Pérez Morales a la cadena Globovisión.
Castillo Lara se convirtió en cardenal el 24 de abril de 1985 y fue Superior Provincial de los Salesianos en Venezuela, miembro del Consejo Superior de los Salesianos en Roma y consejero de la Pastoral Juvenil en todo el mundo.
Había ganado notoriedad por su polémica con Chávez, de quien se convirtió en un marcado opositor y llegó a recomendarle que se haga un "exorcismo".
"Más que darle la bendición, le haría un exorcismo", dijo en una entrevista con el estilo frontal y directo con el que había afirmado que Venezuela vivía una "dictadura".
Lara acusó a Chávez de gobernar como un "tirano" para imponer una "revolución absurda y anacrónica" similar a la de Cuba, país al que había calificado como "un cadáver", postura de la que nunca se retractó.
Su posición frente al gobierno venezolano recibió elogios en la oposición y punzantes calificativos del jefe de Estado, quien lo había considerado "bandido, alcahuete, inmoral y golpista".
Al oficiar su misa del pasado 11 de abril en honor a las víctimas del fallido intento golpista contra Chávez en 2002, Castillo había hecho un llamado a la reconciliación de los venezolanos.
"El odio no es un sentimiento cristiano y lamentablemente, en el país se está haciendo una siembra irresponsable de odio en todos los sectores y nos estamos dejando llevar por él; hay que derrotarlo para reconstruir la hermandad defendiendo la justicia", había instado.
El vocero de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), Baltazar Porras, destacó las cualidades personales de Castillo Lara y precisó que las exequias durarán tres días.
"La muerte del cardenal Castillo Lara enluta no sólo a la Iglesia y la sociedad venezolana, sino a la Iglesia universal, sabemos todos lo que fue su actuación al lado de los papas Pablo VI y Juan Pablo II ocupando muy altos cargos y responsabilidades", recalcó.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)