Tremendo humanista, lleno de amor al projimo, a sus semejantes y de tremenda condicion humana te salio el companero, incapaz de alegrarse por la liberacion de seres humanos.
Estas decepcionado, sataneco?
Eso pasa cuando se ponen religiones, partidos o ideologias por encima de la humanidad, la razon y la logica.
Gusanamente feliz, Luis
Tremendo malintencionado habìas resultado vos, Luisito felìz.
Si yo me quedara como los tontos, embelesado viendo el àrbol florido sin quitar la vista de èl, podrìa adherir a la alegrìa que sienten unos cuantos por estas horas, estimulados por los medios de incomunicaciòn.
Pero mi visiòn es mucho màs amplia. Puedo ver un àrbol florido (la liberaciòn de una mujer despuès de 6 años como rehèn) y puedo ver atràs un bosque que se està incendiando (la trampa imperialista que se cierne sobre el continente).
Otra hubiera sido la historia si la libertad de la que gozan estas personas fuera producto a un canje humanitario llevado a cabo, de comùn acuerdo, por las dos partes en conflicto.
Existen dos Colombias. La Colombia capitalista y tìtere del Imperialismo, y la Colombia insurrecta.
No puedo caer en la estupidez de celebrar la liberaciòn de Betancourt, cuando tanta gente buena se està pudriendo en las càrceles del criminal y narcotraficante Uribe.
Entiendo la felicidad que embarga a todos los gusanos. Pero no pretendan que yo pueda compartir los mismos sentimientos.
Ustedes estàn con el Capitalismo, la derecha y el Imperio. Ustedes avalan todos los atropellos y los crìmenes cometidos por èstos.
Yo estoy de la vereda de enfrente. Con los que se oponen a estas lacras humanas y no se dejan engañar por sus cantos de sirenas.
Si Uribe se anotò un triunfo, todos nuestros pueblos hoy sufren la derrota. Porque el triunfo de Uribe fortalece las malas intenciones de quienes se quieren apoderar de los recursos de nuestra Patria Grande que con gran esfuerzo se està intentando construir.
Vos, Luisito gusano y felìz, estàs muy lejos de los anhelos de Josè Martì y tantos otros pròceres de nuestro Continente.
Y no me vengas a criticar mi Humanismo y mi religiòn, no me vengas a hablar de "amor al pròjimo", porque no tenès la suficiente altura moral para hacerlo.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)