Un elenco formado por 30 jóvenes y enérgicos bailarines transmitirá al público todo el sentimiento cubano sin renunciar a la espectacularidad de un musical al estilo Broadway. Nada menos que 500 vestidos se exhibirán durante la representación. Más de 70 modistos trabajaron durante meses en la confección de los trajes.
La directora artística del espectáculo, Yolena Alonso, definió así el espíritu de este musical: "Una mezcla de estilos contemporáneos y folclóricos, con una puesta en escena moderna y un toque de fantasía".
Sones, rumbas, mambos, boleros y salsa componen la banda sonora de ¡Viva Cuba!, creada por Pachito Alonso, responsable a su vez de una de las más afamadas orquestas de salsa cubanas, Los Kini Kini, formada por 16 miembros. En ella, jóvenes músicos como Cristian y Rey Alonso -hijos de Pachito-, se mezclan con veteranos como José Luis Arango, voz clásica del bolero cubano.
El musical cuenta la historia de Cuba a través de cuatro actos con la ayuda de un narrador. El primero viaja hasta la Cuba ancestral, marcada por la llegada de cientos de miles de esclavos africanos. Bailes y acrobacias se funden de una manera sugerente y primitiva.
La segunda parte se sitúa en una plaza colonial de La Habana, a finales del siglo XIX, mostrando una escena costumbrista en la que también se detecta la influen cia de la alta sociedad española en Cuba. En ese mismo acto, titulado Plaza Central, se incluye la rumba, un ritmo que se debe a la mezcla con la cultura africana. En este número se bailan las dos canciones más conocidas de Cuba: El Manisero ("Si te quieres por el pico divertir/cómprame un cucuruchito de maní") y La Guantanamera.
"Son los dos temas clásicos con los que todo cubano se identifica", resaltó Pachito Alonso, que especificó que el resto de la banda sonora es original. En la parte musical también ha colaborado el compositor Edesio Cristian Alejandro.
La tercera parte, ambientada en un deslumbrante casino que emula al famoso Tropicana, recrea la celebración del fin de año de 1958, víspera del triunfo de la Revolución Cubana. En esta época confluyen el mambo y el chachachá.
El cuarto y último acto recrea la Cuba actual, "pero sin referencias políticas", comentó Yolena Alonso. Cada uno de los cuatro actos tiene una duración de entre 20 y 25 minutos.
Entre Cuba y Alemania
Estrenado en el Teatro Nacional de Cuba, el musical ¡Viva Cuba! está íntimamente conectado con una saga de músicos, los Alonso. La directora artística del espectáculo, Yolena Alonso, es la nieta de Pacho Alonso, considerado una leyenda del bolero, e hija de Pachito Alonso, un reconocido músico de salsa. En total, cuatro miembros de la familia participan en ¡Viva Cuba!: Pachito, Yolena, Cristian y Rey Alonso.
De hecho, Pacho Alonso creó en los años sesenta el ritmo Pilón, que también ha sido incluido en el repertorio del musical. "Es un baile muy sencillo, que se pega mucho", comentó la coreógrafa cubana.
Con tan sólo 30 años, Yolena lleva una década al frente de la compañía de baile Yoldance. En Cuba se formó como bailarina de danza contemporánea y después se trasladó a Alemania para formarse como coreógrafa y especializarse en el género de los musicales. Durante su estancia en el país germano, Yolena Alonso participó en la puesta en escena del espectáculo de inauguración de la Potsdamer Platz de Berlín.
Curiosamente, la empresa productora de ¡Viva Cuba!, Showkontor, es alemana. Actualmente, por motivos de trabajo, Yolena vive a caballo entre Cuba y Alemania. El productor del espectáculo, Peter Krick, explicó que el objetivo de este musical es "sacar el espíritu de Cuba". El viernes, ¡Viva Cuba! continuará con su gira española para trasladarse a la Expo de Zaragoza.