Hemos tenido sendos debates, y hemos visto que el capitalismo vive en gran parte del comercio de armas. Los países capitalista , sabemos que tienen armas atómicas, como Francia, Inglaterra, EEUU, Rusia, La India, Pakistán, Etc.

Países gobernados por la Izquierda también tienen Armas atómicas, cómo China y Corea de Norte. ¿Pero qué es la energía atómica?   La Energía atómica también puede ser usada, con fines “pacíficos” , es decir para crear luz eléctrica.  España, Alemania, Suecia entre otros tiene energía atómica.

El problema de fondo, pues, no es quienes las tengan y quienes, no, sino quines atizan con su hipócrita “humanismo” una peligroso guerra nuclear en el medio Oriente. En este sentido, en ninguna de mis palabras me he manifestado sobre el desarme nuclear de nadie, y si Irán las tiene que las tenga, para mi no es relevante. El problema es que si los fanáticos e ignorantes de la extrema Izquierda, atizan más el odio propagandístico, dos potencias atómicas enfrentadas puede ser peligroso para todo el mundo.    

Y el problema no es que Irán las quiera tener, sino cómo las va usar.

Para Quico:

Quico, los judíos tenemos ya misiles defensivos,  cómo el ARROW, capaces de destruí un misil lanzado desde Irán antes de llegar a suelo judío. La pregunta es: ¿Si un misil tiene cabezas nucleares, que impacto tendría para el medio ambiente su desintegración en el aire, y  el impacto de su veneno y radio actividad para la zona donde sea esparcido. En concreto en una  guerra Nuclear significa, que puede salir más dañados otros pueblos que los enfrentados.

Por otra parte, una cosa es tener una capacidad atómica para  disuadir y otra para agredir. ¿Qué yo sepa, Israel, ni pretende borrar del mapa a ningún país,  ni nadie tiene pruebas contundentes que Israel tenga dichos juguetes.  

Pero en este sentido, seguimos mirando una irresponsabilidad   ignorante, tanto de la extrema Izquierda fanática  como de la derecha.

Hacer la guerra es más fácil que hacer la paz, dijo un intelectual. Hoy los seres humanos hemos creado armas tan destructivas que un edificio, como la Catedral del Paris que se llevo más 100 años para su construcción, con tan solo una Bomba, y en un abrir y cerrar de ojos, se puede reducir a cenizas.

Pero hay armas más funestas que otras. Hay armas convencionales, y armas no convencionales. Y acá no estamos hablando de las armas convencionales que usa cualquier ejército del mundo, cómo el cubano, el argentino o el Salvadoreño, sino de armas atómicas.

Pero tampoco he querido hacer hincapié, ni siquiera en dichas armas, sino en una cruenta guerra, u Holocausto Nuclear como dice, Fidel Castro, cuyo mayor peligro se encuentra en la zona del Medio Oriente.

Israel ayer como hoy no quiere verse enfrentado en una aventura nuclear, pero como cualquier país del mundo, tampoco está dispuesto a rendirse sin apelar el derecho de la autodefensa. No obstante, bajo cualquier derecho patriótico de cualquier pueblo, nación o identidad cultural, está la obligación de los pueblos, de la gente pensante, de cualquier país, religión, color de piel o cultura, de luchar por la paz y por evitar un holocausto nuclear en nuestro hogar qué es nuestro planeta tierra.

En esto podemos mirar que todo desate bélico puede surgir de una cadena de discursos y panfletos incitando el rencor en una zona donde los ataques y contra ataques militares son casi el pan de cada día. Bajo está lógica, existen pacifistas, incluso críticos, contra las políticas de los gobiernos de Israel, (porque una cosa es el Estado de Israel y otra sus políticos), pero también cuidan sus palabras para no incitar más a la guerra.

Saben mucho de estos pacifistas, incluyendo muchos judíos, críticos contra su propio gobierno, que una cosa es luchar por la paz y por el derecho de todos y otra luchar conjuntamente con aquellos que hacen la guerra y qué la quieren mantener hasta ver a un Estado, Israel, destruido. 

Y la política militar de éstos, que en verdad no son pacifistas, sino miembros  políticos militares de las organizaciones que luchan en la zona, es instar a sus hermanos musulmanes iraníes a lanzar una guerra nuclear contra Israel.

Irán por su parte, sabemos que no reconoce a Israel, y no solo esto, sino que el presidente iraní ni siquiera dice el Nombre de “Israel” sino “Estado sionista”. Y Curiosamente el “Panfleto” peligroso de “Estado Sionista”, no solo es utilizado por las elites del régimen iraní, sino también por los elementos de extrema izquierda ignorantes.

Es posible en este sentido que no “exista extrema” izquierda, dado que si existiera en todo caso seria la izquierda real, talmente separada de todos los elementos ignorantes sectarios que se creen los dueños de la verdad y que se dan el lujos de segregar dentro de la izquierda tratando de marginar a aquellos que no les gusta los que dicen o defienden. En tal estado de cosas, sino existe la “extrema” izquierda, porque la misma es humanista por excelencia, entonces, lo que existen son ignorantes hipócritas sectarios  sentados en su propia Sillón al cual ellos mismos le llaman “verdad absoluta”.

Estos ignorantes pues, no son tampoco de izquierda, sino fundamentalistas que por guardar la uniformidad de los discursos de las mayoría de dirigentes “izquierditas”, están codo a coda con el fundamentalismo islámico, gendarmes éstos de la guerra para destruir al llamado por ellos, “estado sionistas”.

La posición de la “realidad”, pues, para estos fanáticos es adherirse a la peligrosa propaganda de hacerle la guerra al “estado sionistas”, aunque esto implique un peligroso holocausto nuclear. También estos “humanistas” de pacotilla olvidan que dicho “estado sionistas” está habitado por ya casi 7, 5 millones de seres humanos entre ellos naturalmente mujeres, niños y ancianos. Ignorantes, que bajos su “posición”, de  su propia verdad eterna, existente solo en su reducido cerebro, no ven que están conjuntamente con el fanatismo islámico, metidos en el Barco que lucha por activar en la zona un peligroso Holocausto Nuclear. La pregunta es, ¿Es posible que a la derecha imperial le convenga una guerra nuclear, pero que le conviene a los islamistas y sus aliados supuestamente de “izquierda”? ¡Los primeros  tal vez quieran “acabar con la pobreza” matando a los pobres, y los segundo acabar con el “estado sionista” matando judíos!

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Hacer la guerra es más fácil que hacer la paz, dijo un intelectual. Hoy los seres humanos hemos creado armas tan destructivas que un edificio, como la Catedral del Paris que se llevo más 100 años para su construcción, con tan solo una Bomba, y en un abrir y cerrar de ojos, se puede reducir a cenizas.

Pero hay armas más funestas que otras. Hay armas convencionales, y armas no convencionales. Y acá no estamos hablando de las armas convencionales que usa cualquier ejército del mundo, cómo el cubano, el argentino o el Salvadoreño, sino de armas atómicas.

Pero tampoco he querido hacer hincapié, ni siquiera en dichas armas, sino en una cruenta guerra, u Holocausto Nuclear como dice, Fidel Castro, cuyo mayor peligro se encuentra en la zona del Medio Oriente.

Israel ayer como hoy no quiere verse enfrentado en una aventura nuclear, pero como cualquier país del mundo, tampoco está dispuesto a rendirse sin apelar el derecho de la autodefensa. No obstante, bajo cualquier derecho patriótico de cualquier pueblo, nación o identidad cultural, está la obligación de los pueblos, de la gente pensante, de cualquier país, religión, color de piel o cultura, de luchar por la paz y por evitar un holocausto nuclear en nuestro hogar qué es nuestro planeta tierra.

En esto podemos mirar que todo desate bélico puede surgir de una cadena de discursos y panfletos incitando el rencor en una zona donde los ataques y contra ataques militares son casi el pan de cada día. Bajo está lógica, existen pacifistas, incluso críticos, contra las políticas de los gobiernos de Israel, (porque una cosa es el Estado de Israel y otra sus políticos), pero también cuidan sus palabras para no incitar más a la guerra.

Saben mucho  estos pacifistas, incluyendo muchos judíos, críticos contra su propio gobierno, que una cosa es luchar por la paz y por el derecho de todos y otra luchar conjuntamente con aquellos que hacen la guerra y qué la quieren mantener hasta ver a un Estado, Israel, destruido. 

Y la política militar de éstos, que en verdad no son pacifistas, sino miembros  políticos militares de las organizaciones que luchan en la zona, es instar a sus hermanos musulmanes iraníes a lanzar una guerra nuclear contra Israel.

Irán por su parte, sabemos que no reconoce a Israel, y no solo esto, sino que el presidente iraní ni siquiera dice el Nombre de “Israel” sino “Estado sionista”. Y Curiosamente el “Panfleto” peligroso de “Estado Sionista”, no solo es utilizado por las elites del régimen iraní, sino también por los elementos de extrema izquierda ignorantes.

Es posible en este sentido que no “exista extrema” izquierda, dado que si existiera en todo caso seria la izquierda real, talmente separada de todos los elementos ignorantes sectarios que se creen los dueños de la verdad y que se dan el lujos de segregar dentro de la izquierda tratando de marginar a aquellos que no les gusta lo que dicen o defienden. En tal estado de cosas, sino existe la “extrema” izquierda, porque la misma es humanista por excelencia, entonces, lo que existen son ignorantes hipócritas sectarios  sentados en su propia Sillón al cual ellos mismos le llaman “verdad absoluta”.

Estos ignorantes pues, no son tampoco de izquierda, sino fundamentalistas que por guardar la uniformidad de los discursos de las mayoría de dirigentes “izquierditas”, están codo a coda con el fundamentalismo islámico, gendarmes éstos de la guerra para destruir al llamado por ellos, “estado sionistas”.

La posición de la “realidad”, pues, para estos fanáticos es adherirse a la peligrosa propaganda de hacerle la guerra al “estado sionistas”, aunque esto implique un peligroso holocausto nuclear. También estos “humanistas” de pacotilla olvidan que dicho “estado sionistas” está habitado por ya casi 7, 5 millones de seres humanos entre ellos naturalmente mujeres, niños y ancianos. Ignorantes, que bajo su “posición”, de  su propia verdad eterna, existente solo en su reducido cerebro, no ven que están conjuntamente con el fanatismo islámico, metidos en el Barco que lucha por activar en la zona un peligroso Holocausto Nuclear. La pregunta es, ¿Es posible que a la derecha imperial le convenga una guerra nuclear, pero que le conviene a los islamistas y sus aliados supuestamente de “izquierda”? ¡Los primeros  tal vez quieran “acabar con la pobreza” matando a los pobres, y los segundo acabar con el “estado sionista” matando judíos!

Hoy el pueblo israelí es un Estado. ¿Qué diferencia hay entre Estado y pueblo? ¡Los pueblos nómadas, como los indios de Norte América, no tenia aún Estado, por ende, su organización era prehistóricamente hablando, en grupos!

Al finalizar la prehistoria, y  cuando fue inventado el Estado, de donde parte la conocida como “nuestra historia moderna”, los pueblos son organizados en torno al Estado. De modo que si antes las comunidades primitivas no reconocían, ni fronteras, ni limites territoriales, hoy los Estados “modernos” tiene sus propias fronteras y jurisdicción territorial propia.  Hoy modernamente, pues, no solo se considera Estado,  a las Instituciones públicas y privadas de un País, sino también a todo su territorio, y  a las personas que lo habitan.  Hoy Estado y pueblo, prácticamente es el mismo concepto.

¿La situación del “Estado judío” es la realidad de la guerra? ¡Y como ya he dicho, una cosa es criticar las decisiones de ciertos políticos israelitas, y otra cosa al Estado hebreo, qué como todos los Estado modernos de la historia implica todo un pueblo!

Y por otra parte, como también ya he explicado, hay gente crítica, con los efectos de la guerra, pero que luchan férreamente por lograr la paz en la zona, dado que la guerra ahí no lograra nada bueno  para nadie.

Pero hay fanáticos, “amarrados” a una verdad eterna, que mientras hablan de justicia se apegan a la guerra asimétrica de los palestinos y demás árabes, como los de Hizbolah. Personalmente, sé que no soy un pacifista y que estoy sin hipocresías a lado de Israel: ¿Pero que me diferencia a mí,  de los que están a lado de los Grupos armados árabes?  ¡Nada, de modo que si dejo de ser humanistas por ser judío, también, los que agarran las armas para hacer la guerra asimétrica y sus cómplices no puede ser humanista.  

Y está es la llamada “Causa palestina” que un grupo de comandos disparan a un ejercito bien armado desde edificios civiles, para provocar lo que después se propagandiza como “genocidio”. Y de esto habemos quienes y aun estando por principio históricos, con Israel, también, queremos que ya no se de, que no haya más muertes de gente civil ni mucho menos de niños en ninguno de los dos pueblos. Pero esto no se consigue, ni justificando una guerra asimétrica basada en el USO  DE ESCUDOS HUMANOS, ni incitando a un Holocausto Nuclear.

Sabemos, por otra parte, que Irán y China tienes armas atómicas por diferentes motivos, además China es un país con una Revolución con capital mixto, digna de respeto, de un buen ejemplo a seguir.

Irán en efecto no inicio el conflicto entre árabes e israelíes, porque fueron los mismos árabes de la zona y no los persas, quienes se negaron a vivir conjuntamente con un Estado Judío. También es cierto que no fueron los persas que juraron tirar a los judíos al Mar.  

Pero Irán no es en efecto un país árabe, pero si un país musulmán. Un país que desde la llegada de los  Ayatollah, su famosa “Revolución Islámica”, no solo cortaron todo vínculo con Israel, sino que le declararon  la guerra.

Pero Irán, no pretende ser un apotencia atómica, para destruir al “estado sionista”, sino porque también quieren ser un Imperio como lo fueron antes.  

¡Que irónico, no, los ignorantes que repudian a un imperio defienden a otro!