Fernando Sánchez Dragó
José Salguero Duarte Jueves 4 noviembre 2010
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Las estupideces las diga quien las diga, por muy honorable que sea el emisor, no dejan de ser estupideces. Y un día sí y el otro también tanto en la clase política como personas relevantes de esta sociedad, sueltan algunas majaderías, como la que dijo hace unos días Francisco Javier León de la Riva, alcalde del PP de Valladolid, contra la ministra Leire Pajín. Así como la que pronunció del barón socialista Alfonso Guerra, sobre su compañera de partido Trinidad Jiménez, ministra también del Gobierno socialista José L. Rodríguez Zapatero.
Frases pilladas por un descuido a micrófono cerrado o abierto hay muchas, como el “manda huevos” pronunciada por el que fuera presidente del Congreso de los diputados por el PP Federico Trillo. El “vaya coñazo” del líder del PP Mariano Rajoy, dicha cuando se encontraba en un desfile de las Fuerzas Armadas Españolas. O el “h. p.” pronunciada por Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid.
Creo y pienso, que los altos cargos políticos deberían ser comedidos, porque son espejos en los que se fijan la sociedad. Pero lamentablemente algunos están dando una imagen poco ejemplarizadora, tanto en sus comportamientos políticos como en otras facetas anejas a los cargos que ocupan. Y es por lo que al creer que “todo el monte es orégano”, atentan contra los buenos principios, la moral, la dignidad y la ética.
Días pasados, con motivo de la remodelación del Gobierno socialista español, llevada a cabo por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero. El escritor y miembro de la Real Academia de la Lengua, Arturo Pérez-Reverte, dijo del ministro Moratinos al ser sustituido en el cargo, que era “un perfecto mierda y ni para irse tuvo huevos”.
Creo, que para decir eso el escritor, es posible que exista algún interés e intencionalidad, como puede ser que se encuentre probablemente promocionando su nueva obra literaria. Por consiguiente, no hay que entrar al trapo, ya que como dijera el escritor irlandés George Bernard Shaw: “Un chisme es como una avispa; si no puedes matarla al primer golpe, no te metas con ella”.
Y eso es lo que hizo la compañera de Moratinos la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde. Porque al ser preguntada por lo pronunciado por Reverte contestó: “Los creadores y los intelectuales tienen esa libertad de opinar lo que consideran…”.
Sin embargo, fueron muchas voces las que se levantaron en contra de Reverte. No sólo de ciertas huestes socialistas, sino de personas que no estaban de acuerdo con sus insultos. Al creer que Moratinos ha sido uno de los ministros menos malos de entre los que componían el anterior gobierno socialista.
Pérez-Reverte, aprovechándose del revuelo formado, no ha rectificado sino todo lo contrario echando más leña al fuego, diciendo: “No esperaba este éxito… Si lo llego a saber lo insulto mucho antes…”.
Estimado lector, si lo anterior de Reverte, debe ser aceptado dentro del contexto de la libertad de expresión. Y del todo vale con tal de promocionarse y de vender más libros en este decadente estado libertino, decadente, mercader y corrupto. Lo escrito por Fernando Sánchez Dragó en su última obra Dios los cría, no tiene ninguna justificación, al ser propia de un probable mal nacido carente de dignidad.
Porque, al parecer, figura escrito entre otras cosas: "En Tokio me topé de frente con unas lolitas, de esas que visten como zorritas, con los labios pintados, carmín, rimel, tacones, minifalda... Tendrían unos 13 años. Las muy putas se pusieron a turnarse…".
Dragó, con ese y otros fragmentos de su obra, se ha quitado definitivamente la careta, demostrado lo vomitivo y repugnante que es. Y por mucho que intente dar marcha atrás reculando, diciendo que se ha creado “un entupido debate, porque no se trajinó a las niñas”. Es comprensible y lógico que sus libros sean retirados de las librerías, y a su vez, le haya sido rescindido el contrato en ciertos estamentos privados donde prestaba sus colaboraciones.
Pero, lamentablemente para gran parte del pueblo. No ha ocurrido lo mismo en Telemadrid, porque la máxima responsable de ese ente público, la presidenta de la Comunidad de Madrid por el PP, Esperanza Aguirre, salió en su defensa.
Y si no estoy de acuerdo con esta postura tomada por la ilustrísima Esperanza Aguirre hacia Sánchez Dragó. Tampoco lo estoy con su expresión citada inicialmente en esta tribuna de “h. p.”. Porque al salir de sus labios femeninos eso, flaco favor le hizo doña Esperanza a las mujeres. Ya que hubiera estado más acertada, si hubiera dicho al referirse a un hombre --hijo de un gran padre puto--.
Para finalizar, creo que don Fernando Dragó no conoce la vergüenza. Porque a este señor, con perdón para los señores, le da igual arre que so al ir probablemente al sol que más calienta. Y si no tiene la capacidad creativa suficiente, pone su firma a un libro escrito por un negro, como así hizo, teniendo la desfachatez de decírselo a micrófono cerrado a Ana Botella, cuando la entrevistaba en un programa de Telemadrid. |