La conversion del socialismo cubano.

Opinión/ La práctica como criterio de la verdad

Cubamatinal/  El gobierno del pueblo,  el estado de los trabajadores , comienza a despedir a medio millón de sus empleados, en un intervalo de seis meses, ese es el milagro del socialismo cubano, milagro que intentan imitar los Mesías latinoamericanos con su reciclado  socialismo del siglo XXI, copia fiel de todos los experimentos fracasados y desaparecidos en el siglo pasado.

Por Nelson Núñez Dorta
 

México/ 5 de octubre/ En las universidades cubanas, donde hace años tuve que estudiar y aprobar la filosofía marxista como parte del programa de formación de todo estudiante, se me enseñó el postulado de que, “únicamente la práctica es el criterio de la verdad”. Si la anterior  afirmación es cierta, entonces,  la realidad cubana de hoy indica que el socialismo impuesto por los hermanos Castro, es un rotundo fracaso , pues lo menos que representa, son los intereses de la clase trabajadora, a la que, ese estado proteccionista,  despedirá  masivamente de sus empleos, en una cifra inimaginable para cualquier empresa o país capitalista .

Resulta  sorprendente que la labor de convencimiento y persuasión para que los trabajadores acepten tranquilamente esta medida que los lanza  hacia la calle, ha sido dada a los sindicatos,  esa organización que se  proclama, en el socialismo, máxima representante y defensora de los derechos de la clase obrera.

Lo que sucede hoy en Cuba es sencillamente una reafirmación de lo sucedió antes al llamado bloque socialista, el sistema no funciona, aunque esta rotunda verdad no se quiera admitir por los defensores del dogma marxista -leninista, el estado rector y planificador de la economía, es un verdadero  desastre, la casta burocrática que esta forma de gobierno genera, resulta un parásito que crece hasta destruir al propio cuerpo que lo alimenta.

Aun, en contra de la voluntad del régimen cubano, sus representantes  tienen que aceptar el hecho de que el estado no puede seguir manteniendo a esa burocracia y al paternalismo que, ellos mismos crearon y fomentaron, cuyas intenciones , para mi , siempre fueron, mas de control y sometimiento  que de humanismo y protección popular.

Ahora un importante grupo de trabajadores , intentara desarrollar su iniciativa y crear sus pequeñas empresas, puesto que la dictadura no les permitirá , como sabemos, llegar a ser empresarios e inversionistas exitosos en las ramas de la economía que están abiertas al capital extranjero, el régimen en otra maniobra de supervivencia,  se liberará de medio millón de salarios, vacaciones pagadas y hasta de jubilaciones en muchos casos, pero recaudará una buena suma con la obligatoriedad del pago de  impuestos, pasará el castrismo de ser un protector de sus trabajadores a ser según su propia filosofía, el capitalista explotador, convirtiéndose , “de padre generoso” en inflexible recaudador. 

  Si les queda una pizca de vergüenza,  ese grupo de viejos  dirigentes políticos de Cuba, deberían, por voluntad propia, ser ellos los primeros en pasar a formar parte de esa inmensa masa humana que perderá el empleo en tan solo seis meses y permitir así que, un nuevo pensamiento político y económico ponga fin a tantos años de voluntarismo y experimentos fallidos, que han sumido a Cuba en el mayor desastre y dependencia económica, de su historia.