El gobierno de los Estados Unidos está en mora de incluir a Venezuela entre los países que apoyan el terrorismo. Las armas del ejército venezolano encontradas a la narcoguerrilla colombiana de las FARC y los testimonios hallados en el computador de Raul Reyes, su ``canciller', deberían ser el detonante de una sostenida sanción diplomática y comercial, que podría iniciarse suspendiendo la compra de petróleo al gobierno de Chávez y buscando nuevos mercados donde adquirirlo. Chávez financia su ``revolución socialista' con los dólares que Estados Unidos le paga por su oro negro.