La prostitución o esclavitud sexual en nuestro país tiene como uno de los principales beneficiarios a la prensa escrita que recibe grandes beneficios de los anuncios de prostitución.
Los españoles gastamos 50 millones de euros diarios en prostitución. Se calcula que en España hay unas 300.000 prostitutas. Los especialistas calculan que los proxenetas obtienen unos 110.000 euros al año por mujer.
Se calcula que llegan a Europa unas 500.000 mujeres al año desde Europa del este para ejercer la prostitución. Según la OIT el 72% de los esclavos en los países enriquecidos lo hacen en este sector.
La prostitución o esclavitud sexual en nuestro país tiene como uno de los principales beneficiarios a la prensa escrita que recibe grandes beneficios de los anuncios de prostitución. Por tanto no nos cabe duda de que la prensa es un auténtico proxeneta.
SI ESTÁ NENA FUERA CUBANA, DIJERA LA MAFIA QUE ES UNA MENOR DE EDAD DE SOLO 5 AÑOS. FARSANTES MENTIROSOS, COMO ES UNA PUTA JAPONESA SE CALLAN EL HOSICO.
DIJERA LA MAFIA. POBRES MUJERES, "DEMÁS DE BLANCO" LAS METEN EN LA PILA HASTA QUE SE AHOGAN. PERO COMO SON JAPONESAS SIDEN QUE SON DIOSAS DE LA "LIBERTAD" . Y ELLAS TAMBIÉN SON BIEN PRÉPARADAS.
Un Pitbull, como este que ves acá, Residente, tiene más dignidad que vos y que todos los cubanos que difaman y que han vendido a CUBA.
El Pitbull es el símbolo de la lucha inclaudicable, de luchar sin rendirse hasta vencer o morir. El Pitbull, es también el símbolo de la lealtad como de la responsabilidad individual. En concreto, Residente, unPITBULL VALE MÁS QUE VOS.
Y tus colegas, Residente, son igual que vos, cobardes indignos y traidores, cosa que no está en la Dignidad ni en la cabeza de un NOBLE PITBULL.
El periodista español Sebastián Ferraté está desde hace seis meses en la cárcel cubana de La Condesa. El reportero televisivo nunca tuvo claro, tras su arresto, cuáles eran los cargos contra él. La causa parece ser un documental en el que denunció la explotación sexual en la isla. Sebastián es uno de los 535 reporteros que está hoy entre rejas por defender su profesión. Mientras, un centenar
En 1978, Oliver Stone, antes de convertirse en afamado director en Hollywood, escribió su primer guión por el que logró un Oscar. ¿Su título? El expreso de medianoche (Midnight Express). El director Alan Parker llevó a la pantalla la historia autobiográfica de Billy Hayes, un joven norteamericano detenido en el aeropuerto de Estambul y encarcelado en una horrible prisión turca por tráfico de drogas. Hayes no pudo demostrar su inocencia, pero logró fugarse de la cárcel. La cinta narraba las aberraciones que soportó en sus cinco años de presidiario.
El periodista español Sebastián Ferraté vive desde hace seis meses su particular expreso de medianoche en la cárcel cubana de La Condesa, en La Habana. Mucho peor que el protagonista de Stone. Porque si Hayes conocía el motivo de su detención (un delito de tráfico de drogas), el periodista español nunca tuvo claro, tras su arresto, cuáles eran los cargos contra él. El reportero televisivo fue detenido el 11 de julio de 2010 en el control de inmigración del aeropuerto José Martí de la capital cubana cuando se disponía a entrar en el país por la terminal internacional. ¿Su delito? La realización en 2008 de un documental, que le fue encargado por una productora de Telecinco y emitido por esta cadena, en el que se denunciaba la explotación sexual y la compra de menores en la isla con la anuencia de miembros de la Administración castrista. Aquello provocó una reacción violenta de las autoridades cubanas, que abrieron un proceso contra el periodista español, sin que él fuera informado para preparar su defensa. Años después, cuando Ferraté regresó a La Habana en un viaje de negocios, se encontró con sus huesos en la cárcel sin que nadie le aclarara cuáles eran las imputaciones. Hace unos días le han comunicado que se enfrenta al expediente 284/2010 por los cargos de Proxenetismo y Trata de Personas. La acusación tiene su gracia: lo que investigaba y denunciaba el periodista se ha convertido en materia delictiva contra él. El Órgano Penal cubano también lo acusa de realizar entrevistas a una serie de prostitutas que presentan ahora como ficticias. Es decir, que el periodista pagó a unas mujeres para que pasaran como fulanas, porque en La Habana resulta difícil, imposible, encontrar a busconas por la calle y, mucho menos, que se presten a participar en programas televisivos, con dinero o sin dinero. Lo desconozco.
Al parecer, el Código Penal cubano en su articulo 302.1 penaliza el pago a mujeres para tener sexo, pero eso no es lo que hicieron los periodistas. Se limitaron a denunciar la situación en la isla. Una cosa es ejercer la prostitución y otra muy distinta elaborar un reportaje sobre la prostitución en Cuba. Y para ello el periodista, cómo no, tuvo que mantener entrevistas con mujeres de la calle.
Pero ahí no acaba el tejemaneje cubano. El 2 de diciembre del 2010, se incorpora a la causa, seis meses después, un escrito de la Policía en el que se destacan unas entrevistas realizadas por el periodista a tres jóvenes homosexuales. Uno de los testigos, al parecer, afirma que recibió dinero para satisfacer a unos turistas. ¿Del reportero? Por lo visto, las autoridades cubanas viven con una venda en los ojos. Como en Cuba tampoco funciona la prostitución masculina, todo el peso de la Ley, por lo tanto, debe recaer en un periodista español al que se le ocurre elaborar un documental sobre la hipocresía del sistema castrista. Meten en la cárcel a las jóvenes que se atreven a viajar de unos departamentos territoriales a otros sin un permiso administrativo para ejercer la prostitución, pero hacen la vista gorda cuando estas generan miles de millones en divisas.
La verdad es que la actuación de los cubanos no se justifica bajo ningún parámetro legalista. Se trata de una reacción de venganza y ajuste de cuentas contra un periodista. Un ataque frontal a la libertad de expresión e información. Sebastián no está en la cárcel por un asunto de delincuencia común sino por dejar al aire algunas de las miserias del sistema cubano. Un régimen virtual en el que sus autoridades no practican lo que predican. El caso del periodista español no figura en el último informe de Reporteros Sin Fronteras sobre la libertad de expresión en el mundo, pero presenta todos los mimbres para su estudio. Sebastián sería uno más de los 535 reporteros que permanecen en la actualidad entre rejas por ejercer su profesión y defender la libertad de información, por mucho que los cubanos pretendan encubrir la realidad con argumentos prefabricados. En la presentación del Informe 2010, Jean-François Julliard, secretario general de Reporteros sin Fronteras, afirmó que las autoridades de los países afectados tenían una responsabilidad directa en la lucha contra la impunidad que rodea los crímenes contra los periodistas.
Pero, al margen del comportamiento del régimen cubano, el Gobierno español también tiene una parte de corresponsabilidad en este atentado contra la libertad de expresión. Me consta que el cónsul de España en Cuba está al tanto de toda la trastienda del caso pero no ha presentado ninguna queja por la situación de Sebastián. Tampoco el embajador Manuel Cacho Quesada. Lo mismo sucede con el Ministerio de Asuntos Exteriores. Primero, Moratinos y, después, Trinidad Jiménez, son corresponsables por lo que le pueda suceder al periodista en la cárcel cubana. Ante el caso del reportero español, la diplomacia española reacciona de la misma manera que con otros asuntos de calado político: total complacencia con el régimen castrista.
Y si subimos un peldaño más la escalera de responsabilidades, el presidente del Gobierno tampoco puede quedar al margen del atropello que está sufriendo un profesional español de la comunicación. Si el ejecutivo de Zapatero se cree todas las patrañas que le lleguen desde La Habana sobre la actuación de Sebastián entendería el calificativo de Bambi que acuñó Raúl del Pozo para calificar el talante del presidente del Gobierno.
Desde estas páginas pediría a Reporteros sin Fronteras que tomen cartas en el asunto y se dirijan al Gobierno español para que expliquen qué pasa con Sebastián. Sabemos que lleva seis meses preventivo en la cárcel, pero desconocemos qué gestiones ha desarrollado el cónsul español en La Habana para lograr la libertad del periodista. Tampoco sabemos las instrucciones que ha recibido desde Madrid. ¡Tan graves son las acusaciones para que permanezca entre rejas! O pretenden que cumpla una pena preventiva porque están convencidos de que ese proceso jamás prosperaría en un estado democrático. Los políticos cubanos se quejan continuamente ante los periodistas de que los españoles los tratamos con la prepotencia que una metrópoli ejerce sobre una colonia o que nos entrometemos en sus asuntos internos. Pueden tener parte de razón, pero en los casos de derechos humanos, del respaldo legal en un estado de derecho, algo tan elemental como el habeas corpus –que le denegaron a Sebastián– de la libertad de expresión y del libre ejercicio para los periodistas las autoridades cubanas son las menos apropiadas para dar lecciones morales.
Quienes reivindicamos la inmediata liberación del periodista español estamos totalmente convencidos de las artimañas de las que se habrá servido la Administración cubana para confeccionarle a Sebastián un traje a su medida. La acusación de proxenetismos es todo un despropósito. Cuando tengamos acceso al expediente podremos encontrarnos cualquier prueba contra el periodista por muy aberrante que sea. No sería el primer caso vivido en Cuba en el que se han construido y manipulado declaraciones de testigos.
Con este artículo sé que estoy cavando mi propia fosa por si en un futuro decido volver a Cuba, un país al que adoro por su gente, su paisaje y su cultura, pero que necesita una regeneración y unas reformas profundas. Y no desde fuera, sino desde el propio pueblo cubano. La isla necesita una transición a la española, pero pasan los años y nunca echa a andar. Sebastián es una víctima más del régimen.
Paradojas de la vida: mientras Sebastián se pudre en una celda cubana, un centenar de etarras se pasea libremente por el malecón de La Habana con el beneplácito de las autoridades castristas. Uno de ellos es Urtiaga Martínez, el coordinador de la colonia etarra. El Gobierno español solicitó su extradición en 2003, pero desde entonces Cuba sigue sin contestar. Hace unos meses, el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco volvió a procesar a Urtiaga como el enlace etarra con la guerrilla colombiana, pero Cuba negó una vez más su extradición. El caso del dirigente etarra es muy similar al de Cubillas en Venezuela, por lo que no nos debe extrañar que ambos países se hayan convertido en los nuevos santuarios de ETA en América, por mucho que el Gobierno español mire hacia otro lado cuando se hace esa acusación.
He leído desde los principios tus escritos, y llegué a la conclusión, de que a quien aquí le gusta la carne de macho es a ti. Y eso es por que con toda certeza eres un marica reprimido y como en tu entorno no te atreves a “salir del armario”, a presentarte como lo que eres, arremetes aquí contra quien piensas que puede hacer aquello que tú no te atreves, especie de mariposa reprimida. El hecho de que algun@s te contestan cortésmente, solo significa que son mucho más hombre o mujer que tú. Al menos parecen ser personas con personalidad propia cosa que tú no sabes ni que es (seguramente que te pongas a buscarlo corriendo en Internet), no como tú que bailas al son que te marcan tus amos ANDA QUE TE ZURZAN, ¡¡ZORRA SALIDA!!(Quico)
19 Jul 2007 ... Las prostitutas del mundo occidental se escandalizarían al saber que una “ jinetera” cubana ofrece su cuerpo entero por unos tejanos o por... www.diariodelviajero.com/.../el-turismo-sexual-en-cuba - España - En caché - Similares
15 Oct 2008 ...Turismo sexual en Cuba. Para ver la triste realidad del tursimo sexual en Cuba vea esta página. Video sólo para mayores de 18 años. ... rafaelmartel.com/turismo-sexual-en-cuba/ - En caché - Similares
18 Sep 2009 ... Las jineteras cubanas,El turismo sexual en Cuba,sexual en Cuba,jineteras cubanas ,El turismo sexual. www.deletealo.com › De Interes - En caché
13 Nov 2008 ...Turismo sexual, una puerta de escape en Cuba. La prostitución es la forma más fácil de obtener dinero para las cubanas. ... www.laprensa.hn/Series/content/view/.../68515 - En caché - Similares
Dentro de poco voy a ir con un colega a cuba para hacer turismo sexual y querría saber si alguno ha ido y q zonas son las idóneas para ... www.forocoches.com › ForoCoches › Zona General › Viajes - Similares
El turismo sexual en Cuba. Sector turístico. Explotación. Márketing. Prostitución. Trabajo. Investigación. Psicología. Testimonios. html.rincondelvago.com/el-turismo-sexual-en-cuba.html - En caché - Similares
23 May 2010 ... Si nos atenemos a la definición de Turismo Sexual, en Cuba no existe esta modalidad de turismo; sin enbargo, Cuba siempre ocupa los primeros ... www.articuloz.com › Noticias & Sociedad › Otros - En caché
30 Jul 2006 ... El turismo sexual en Cuba sigue siendo un tema tabú en nuestra sociedad, en el sentido que las personas que viajan por este motivo a Cuba no ... www.conexioncubana.net/index.php?... - En caché - Similares
ESTO ES ESPAÑA, RESIDENTE, PAÍS QUE APESAR QUE RECIVE LIMOSNA DE LA EUROPA RICA ESTA LLENO DE INJUSTICIA SOCIAL, PEOR QUE CUBA. LA CUBA CRIMINALMENTE BLOQUEADA.
Si nos atenemos a la definición de Turismo Sexual, en Cuba no existe esta modalidad de turismo.
Los países receptores de turismo sexual se caracterizan, sobre todo, por disponer de una amplia oferta de sexo barato en lugares públicos y por la ausencia de leyes represoras del sexo con menores. Todo lo contrario de lo que ocurre en Cuba dónde no existen los prostíbulos con luces de neón, el ejercicio de la prostitución está penalizado, el proxenetismo está penalizado y el estupro (relaciones sexuales con menores) está más penalizado que en otros países. Por tanto, deberíamos concluir diciendo que en Cuba no existe el turismo sexual.
Sin embargo, Cuba siempre aparece en los primeros puestos en la lista de países receptores de Turismo Sexual. Esta contradicción se explica porque más allá del voluntarismo de un régimen comunista trasnochado que puede prohibir la prostitución y todo lo que quiera, la prostitución sigue existiendo.
La prostitución está penalizada, pero la figura delictiva no es la prostitución como tal, sino el delito social. A la prostituta que se ofrece a turistas se le hace un acta de apercibimiento y se la avergüenza públicamente ante el CDR (Comité de Defensa de la Revolución) al que pertenezca su domicilio. Al tercer apercibimiento va dos años a la cárcel por delito social.
Cuando Cuba comenzó a recibir turismo, a comienzo de los años 90, si que era más notoria la oferta sexual. Hace años, La Rampa, una de las principales arterias de La Habana por donde pasan todos los turistas, era "el mayor prostíbulo al aire libre de Cuba". No se podía dar dos pasos sin que te asaltase una prostituta. Hoy ya no es así ni mucho menos, el régimen castrista quiere evitar a toda costa que Cuba sea considerada un paraíso del Turismo Sexual, eso no conviene a la Revolución castrista.
En todas las zonas turísticas de Cuba existe una fuerte vigilancia policial que tiene como única misión la represión de la prostitución. Si ven a una mujer acosando a un turista, es detenida inmediatamente. Es muy difícil evitar este control por lo que la prostitución prácticamente ha desaparecido de la vista pública en las zonas frecuentadas por turistas.
Sin embargo, una acuciante necesidad económica producida por unos salarios de unos 20 dólares al mes y la imposibilidad de vigilar todo el país, hace que muchas mujeres continúen dedicándose a la prostitución en zonas menos vigiladas. En zonas menos turísticas o en las que existe una prostitución orientada al cliente cubano la vigilancia policial es menor, puede que allí aún esté visible la prostitución.
Primera característica: no existe una oferta pública de sexo
Por tanto, la primera característica del Turismo Sexual en Cuba es que no existe una oferta pública de sexo, sino una oferta mayoritariamente clandestina que se lleva a cabo en lugares poco vigilados y también a través de intermediarios que tratan con los turistas, como conserjes de hotel, taxistas, guías callejeros, cafeterías, etc.
Otras mujeres inician el contacto con el turista de un modo aparentemente casual, desde su trabajo o desde lugares por los que tiene que pasar el turista (tiendas, hoteles, cafeterías, viajes, etc.). El carácter extrovertido y curioso de los cubanos facilita esta primera aproximación, cualquier pretexto es válido para acercarse al turista. Lo más peligroso es el momento del acercamiento, ya que si son sorprendidas pueden recibir una carta de apercibimiento y también les puede perjudicar en su trabajo. Una vez con el turista a su lado es más difícil que la policía las intercepte para pedirles la documentación.
Segunda característica: lo practican jineteras
Los cubanos llaman "jineteras" a las mujeres que buscan sexo con turistas, término muy acertado pues no se trata de prostitutas profesionales en el sentido que nosotros le damos al término. Una jinetera es una mujer que tiene otra profesión remunerada y que si ganase lo suficiente para subsistir no se prostituiría.
Esta es la segunda característica del turismo sexual en Cuba; lo practican jineteras, mujeres que tienen una profesión. Pueden ser profesoras, enfermeras o dependientas y se ven obligadas a obtener ingresos adicionales ofreciendo sexo.
Tercera característica: todas quieren que las saquen de Cuba
La tercera característica del turismo sexual en Cuba es que estas jineteras, aunque de un modo inmediato busquen obtener algún dinero o regalos del turista por sus servicios sexuales, lo que buscan casi todas es que las saquen de Cuba. Procurarán estar con el turista todo el tiempo que dure su estancia en la isla, se convertirán en algo así como "una novia a plazo fijo". Y procurarán que, en un segundo viaje, vuelva para casarse con ella y llevársela a su país, dónde espera llevar una vida mejor.
Por eso, muchos turistas que tienen dificultad de encontrar parejas en sus países llegan a Cuba con el propósito de contraer un matrimonio de conveniencia con una cubana y llevársela a su país. Con dos viajes, uno para conocerla y otro para casarse, resuelven su problema.
La prostitución es la forma más fácil de obtener dinero para las cubanas. Algunas “jineteras” logran casarse con los extranjeros y salir de la isla. Es común verlas en las calles de La Habana
No es necesaria la noche para que salgan a cabalgar. No tienen horarios, pero sí imponen algunas condiciones.
Las "jineteras", como se les llama a las vendedoras de sexo en este país, se encuentran en El Malecón y hasta en el supermercado. Las hay de todas las edades y razas, su característica común es poseer un cuerpo escultural.
Son apetecidas por los turistas y algunos hasta se casan con ellas. El "cachondeo" de las caribeñas seduce sobre todo a los europeos que llegan frecuentemente a la isla en busca de placer.
"Generalmente se conoce que las cubanas somos cariñosas y sabrosas, eso llama mucho la atención de los hombres que llegan al país", me dijo una de las recepcionistas del hotel donde estaba hospedada, pues llama la atención ver a un gran número de extranjeros tomados de la mano con atractivas morenas.
La prostitución es la vía más fácil de supervivencia, sobre todo para las mujeres y más para las adolescentes de las provincias más pobres de la isla porque llegan a la capital con mucha más necesidad.
Algunos de sus compatriotas las juzgan y otros comprenden el porqué venden su cuerpo por 20 o 50 CUC -entre 500 y mil lempiras - o por una ropa con brillo, maquillaje u otro artículo de uso personal.
Sus puntos Durante el día se pasean en las afueras de los hoteles y con mucho coqueteo se insinúan a los hombres. Por las noches se les ve en céntricas barriadas de Miramar, La Quinta Avenida o la salida del túnel de La Habana.
Una señal es suficiente para que la "jinetera", se acerque al cliente y negocie. En un nuevo sitio comercial del centro de esta ciudad también suelen contonearse. Allí, Alina, de 22 años, le guiñó el ojo al fotógrafo quien la llamó por curiosidad, rápidamente retornó y empezó a platicar.
Le dijo que la tarifa son 50 CUC, 25 por el servicio y el resto para alquilar un cuarto en una vivienda, pues en los hoteles "tienen prohibido" ingresar.
"Llámame por la noche, yo te indicaré dónde debes llegar, pues si un policía me ve por tu hotel me puede atrapar y mandarme a la cárcel", le dijo.
Con apariencia de niña por su cara bonita y forma de vestir, Alina se confunde entre otras chicas cubanas que no se dedican a este oficio. Otras con más experiencia tienen contactos con los porteros de los hoteles e ingresan sin ningún inconveniente acompañadas por sus clientes.
Aunque la Policía las persigue, ellas les juegan la vuelta. Se hacen acompañar de chicos a los que se les denomina "chulos", quienes aparentan ser sus novios y son los que hacen el trato con el turista y con los empleados del hotel. Algunos de sus acompañantes son también "jineteros".
"No sólo hombres vienen en busca de placer. Hay mucha mujer europea que llega en busca de un chico atractivo", me dijo un taxista. Los taxistas son otros de los contactos de las trabajadoras del sexo para conseguir clientes.
En El Malecón se concentran a partir de las siete de la noche los turistas quienes llegan a disfrutar del ron y a escuchar el son cubano.
Ese lugar se convierte en una pasarela de mujeres guapas, quienes sobre tacones muy altos y cortísimas minifaldas atraen la mirada de los extranjeros. Allí es más fácil despistar a los policías, pues éstos se plantan sobre todo en los parques y en las afueras de los hoteles. Muchas de las muchachas no sólo buscan dinero. La mayoría guarda la esperanza de encontrar el hombre que las saque de la isla y les ofrezca un futuro mejor.
De "jineteras" a "damas"
Así se refieren los cubanos a las mujeres que en busca de unos pesos convertibles se convirtieron en las flamantes esposas de europeos o "gringos" adinerados.
Es común ver a cubanas casadas con extranjeros que llegan a este país. A simple vista se observa lo atentas que son las nativas con ellos y lo complacidos que éstos se sienten. Para muchas es su puerta de escape, si logran casarse con ellos pueden dejar la isla.
Según los caribeños, muchas de las jineteras son visitadas periódicamente por turistas que llegan a Cuba sólo por ellas.
El origen de la prostitución
Según analistas, durante las décadas del 60 y 70 y casi toda la del 80 la prostitución no existía en la isla. Los casos eran muy aislados. Fue a partir de los noventa que se ha desarrolló el turismo sexual por conveniencia, ante la llegada de estudiantes de países del tercer mundo que se matriculaban en escuelas y universidades cubanas.
En esa época todavía no había llegado la dolarización, pero algunas jóvenes establecieron tempranas relaciones basadas en conseguir objetivos materiales como ropa, calzado y electrodomésticos, o simplemente con la idea de tener acceso a lugares especiales destinados a estos extranjeros.
El bajo nivel de vida producto de los pobres salarios que incluye a profesionales de todas las ramas, así como el auge del turismo, fue factor determinante para que en Cuba resurgiera la prostitución.
La tasa más baja de vih
Pese al desenfreno sexual que se ha generado, Cuba posee uno de los niveles más bajos de esta enfermedad comparado con otros países de Latinoamérica y el Caribe. En la XVII Conferencia Internacional de Sida que se celebró en la ciudad de México, en agosto, se reveló que la tasa de infección es de un tres por ciento, la más baja del mundo.
Uno de los grandes logros es que en ningún caso se registra la transmisión del virus por el uso de drogas intravenosas, transfusiones de sangre o el contagio de madre a hijo durante el proceso de nacimiento.
Cien mil abortos al año se reportan en Cuba La práctica del aborto voluntario en Cuba no es ilegal. Es un servicio institucionalizado de salud, por lo que existe un número importante de hospitales y otras unidades acreditadas para este proceder con personal debidamente calificado y entrenado. El Ministerio de Salud Pública garantiza los servicios de aborto con una alta calidad y seguridad.
Un objetivo principal de las autoridades sanitarias es el de disminuir estas interrupciones voluntarias susceptibles de ser evitadas, ya sea por decisión de la mujer o la pareja o mediante una anticoncepción eficaz.
El Perfil Estadístico de la Mujer Cubana, publicado en 2000, por la gubernamental Oficina Nacional de Estadísticas reveló que entre 1968 y 1996 se registraron 5.6 millones de nacidos vivos y se realizaron unos 3.2 millones de abortos. Actualmente se realizan unos 100 mil abortos anuales en Cuba.
De los 11.3 millones de cubanos, el 51% son mujeres. Cinco millones y medio son mujeres entre 0 y 76 años. Casi dos millones tienen una edad 16 a los 35 años, según la prensa cubana. Tres años de prisión puede enfrentar una "jinetera" si es atrapada por la Policía. De ser encontrado con una "jinetera", el turista no recibe sanción alguna
Las prostitutas del mundo occidental se escandalizarían al saber que una “jinetera” cubana ofrece su cuerpo entero por unos tejanos o por una cena en un simple restaurante de segunda categoría. Muchas lo hacen esperando a ese príncipe azul que las sacará de la vida austera en que se han visto sometidas desde la infancia.
El fenómeno del turismo sexual nació a principios de los años noventa en Cuba debido a la paupérrima situación económica del país tras la pérdida de los fondos que recibían de la Unión Soviética. Desde entonces, los nativos vieron en el turismo una manera rápida para subir peldaños en la escala económica y social. Ya sea confeccionando brazaletes, montando tenderetes o construyendo discotecas y hoteles a mansalva. Algunos usando la imaginación como los “liadores” de porros que se alquilan por día en Jamaica y otros u otras entregando lo que tienen; su cuerpo adolescente a todo aquél turista sin escrúpulos que llega a un país que considera “inferior” y pretende hacer todo aquello que es incapaz de hacer en casa. En España precisamente empezaron a proliferar los chárter cargados con lo que supuestamente eran hombres de negocio que adquirían el denominado “paquete cubano”: jabón de tocador, medias de cristal, productos higiénicos y algún extra más. A esos empezaron a llamarlos en la isla, los “turipepes”.
El turismo sexual parecía controlado hasta que se le escapó de las manos al gobierno cubano. Las prostitutas de un día, pasaron a dedicarse más a menudo a este negocio que poca mano de obra se necesita. Con el tiempo necesitaron de proxenetas para defenderse, luego vinieron las casas de alquiler por horas, restaurantes privados y dedicados al tema y con ello se desplegó una red que superó las iniciales expectativas de un simple sobre-sueldo o sueldo a secas. Llegaron las navajas, las drogas, etc.
Fidel Castro trató de pararlo en 1998. Lanzó el “Operativo Lacra” realizando masivas redadas para controlar la situación, cerrando incluso locales y discotecas. Eso provocó a la larga que la prostitución se ejerciera de una manera más a escondidas limpiando levemente la imagen del régimen cubano y hoy en día son pocas las que ofrecen su cuerpo a cambio de un tejano o de una cena. Las tarifas se mueven entre los 25 y 60 euros e incluso se ofrecen servicios a través de Internet donde más que páginas de contactos parecen carnicerías donde sólo falta el corazón de la ternera.
Hoy en día el turismo sexual todavía sigue. De todas maneras, la prostitución se realiza de una manera más discreta. Cuentan en Cubanet que en locales como El Túnel todo es posible con dólares en la mano con algunas muchachas que recién han cumplido los 16 años de edad. Los precios por supuesto sólo los pueden ofrecer los turistas venidos de occidente y alguna chica todavía espera que el principito azul que va a esos antros se la lleve a España por 500 dólares (precio que cuesta toda la burocracia) y rehaga su vida en un mundo mejor. Demasiado pedir para alguien que sólo busca sexo a cambio de carne adolescente.
Cuba posiblemente sea el país más conocido en cuanto a turismo sexual pero otros destinos comunes son Brasil, Camboya, Costa Rica, China y Tailandia.
SI ESTÁ NENA FUERA CUBANA, DIJERA LA MAFIA QUE ES UNA MENOR DE EDAD DE SOLO 5 AÑOS. FARSANTES MENTIROSOS, COMO ES UNA PUTA JAPONESA SE CALLAN EL HOSICO.