HEROICAS SIRTE Y BENI WALID Por Mónica Saiz,Correo del Orinoco
Dos nombres que deberían flamear en las banderas y palpitar en los corazones de cada manifestante por la justicia y la igualdad en el mundo. Hace unos meses, dos lugares lejanos y quizás hasta desconocidos.
Si no fuera por Telesur, quizás no sabríamos siquiera que el pueblo Libio sigue resistiendo, a pesar de los bombardeos sistemáticos y despiadados de las potencias del Norte. Hoy, a diario buscamos en las noticias el estado de la resistencia de los heroicos hombres y mujeres que allí combaten al imperialismo más poderoso de la historia humana.
Pero Libia sigue ausente en la indignación de los indignados, ausente en las protestas contra Wall Street. Todavía los manifestantes europeos y estadounidenses no se dan por enterados que sus oligarquías piensan calmar la casa, expoliando hasta la última gota de sangre a los países del tercer mundo.
Todavía no se avivaron los que manifiestan en Madrid, en Londres, en París, New York que el destino de ellos está atado al nuestro. Y quizás para desgracia nuestra. Todavía no la ven. Están indignados por su propia situación e indiferentes por la suerte de los revolucionarios libios, a quienes imaginarán como seres oscuros y peligrosos conducidos por el dictador Gaddafi, tal como sus clases dominantes -los mismos contra los que ellos patalean y despotrican-, les contaron por TV.
Habría que avisarles, habría que decirles que tengan cuidado, no sea que vuelvan a disciplinarlos con las migajas de la explotación nuestra, que vuelvan tranquilos a sus casas una vez que la OTAN termine el trabajo sucio; una vez que la oligarquía mundial logre quebrar la resistencia Libia, quedarse con Siria e Irán, saliendo de la recesión; después de haberse atragantado con los capitales, los recursos naturales, el sudor y la vida de nuestros pueblos.
Es evidente la dispersión y manipulación de las luchas. Por ello es necesario insistir en la importancia de construir una herramienta antiimperialista de carácter internacional, superando todos los obstáculos que se interpongan. El imperialismo no caerá solo, debemos derrotarlo. saiz.monica@gmail.com
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