El humo y los restos forestales quemados también imposibilitaron el trabajo de los helicópteros y aviones hidrantes. Las escasas lluvias en la zona no sirvieron de alivio
Al igual que el sábado, "el fenómeno climático de las cenizas nuevamente nos impide hoy el uso de tres aviones hidrantes y un helicóptero para combatir el fuego", señaló a la agencia estatal Télam Evaristo Melo, director de Defensa Civil de la provincia patagónica de Chubut, donde los incendios afectan ya a más de 3 mil hectáreas.
Más de 300 brigadistas trabajan por tierra para tratar de controlar las llamas, y entre ellos se incluyen desde el sábado refuerzos enviados desde Chile, un gesto que agradeció el gobernador de Chubut, Martín Buzzi, según un comunicado oficial. Buzzi, que el jueves no dudó en afirmar que el fuego fue causado de modo intencional, el domingo anunció que el Gobierno provincial será querellante en la causa judicial que se va a iniciar para encontrar a los culpables.
"Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias para dar con los responsables de poner en riesgo a todo un pueblo y al patrimonio de la humanidad", expresó.
El director de Defensa Civil de la provincia afirmó que por el momento no hay heridos "ni ninguna población en peligro" y confirmó que ya han sido evacuadas más de 50 personas, entre pobladores y turistas que acampaban en las cercanías de la villa turística de El Hoyo, la más afectada por los incendios, y que anoche fue declarada en "alerta roja". Esta zona forma parte de la cordillera de Los Andes, hito fronterizo entre Argentina y Chile, país afectado en los últimos días por una oleada de incendios en los que han muerto siete brigadistas y un poblador carbonizado.
En la vecina provincia de Neuquén, también fronteriza con Chile, se han quemado también en los últimos días alrededor de 3 mil hectáreas. Las autoridades de Chubut y Neuquén coincidieron en señalar esta semana que la ola de calor y la severa sequía que azotan al país dificultaron los trabajos para controlar los incendios.
No obstante, aunque el domingo comenzaron a caer las primeras precipitaciones en la zona, el ministro de Producción de Chubut, Sergio Bohe, aseguró en declaraciones a la televisión local que la situación es incluso peor ya que las escasas lluvias trajeron aparejadas un aumento de la intensidad del viento que dificultó las tareas de los brigadistas.
En una reunión mantenida el viernes en Buenos Aires, el jefe del Gabinete argentino, Juan Manuel Abal Medina, y el embajador de Chile en el país, Adolfo Zaldívar, destacaron "el valor del trabajo conjunto realizado durante días sin descanso por los brigadistas argentinos y chilenos que se debatieron en una zona de difícil acceso y maniobra" para combatir los incendios en Chile.
En ese encuentro Zaldívar expresó la voluntad del Gobierno chileno de colaborar con Argentina para combatir los incendios, una ayuda que se materializó este sábado, según informó hoy el portal de Presidencia.
El fuego, que se inició el martes de la pasada semana en la provincia chilena de Nueva Esperanza, sigue activo aunque por el momento se han controlado 4 de los 6 focos, según las últimas declaraciones del presidente chileno Sebastián Piñera.
Por Mara Landa
El foco de atención está en el parque Torres del Paine, en la región de Patagonia, uno de los parques nacionales más importantes y declarada reserva de la biosfera por la Unesco en 1978. Eduardo Katz, gerente de áreas protegidas de la Corporación Nacional Forestal de Chile, explica que “en el parque se han quemado 12.800 hectáreas y de esas hectáreas podemos considerar que alrededor de un 65% son pastizales o estepa patagónica y el resto es una superficie de bosque y matorrales, y un 5% son bosques más antiguos o primarios“. La gran particularidad de esta zona es “una gran belleza escénica y tiene una gran presencia de distintas especies de fauna. Es un parque que además de recursos hídricos, gran cantidad de lagos, ríos, tiene presencia de glaciares… “.
Por el momento, se ha logrado controlar la situación y, como nos explica Katz, “tenemos sobre 500 personas trabajando en ese incendio, hay muchos medios aéreos atacando y todo el Gobierno lo ha puesto como prioridad número uno”.
El problema del viento El gran problema al que se han enfrentado los servicios de emergencia ha sido las condiciones climáticas pues la gran velocidad del viento les impidió llegar a determinadas zonas sólo accesibles a barcos y helicópteros. Mover a la gente y a los medios ha sido bastante complicado durante el fin de semana pero según Katz, “afortunadamente los frentes que tenemos hoy día todavía activos pero controlados son en lugares en donde podemos llegar fácilmente con nuestra tropas y una gran cantidad de equipamiento“.
En vista de las circunstancias, la actividad turística que recibe el parque y toda la región puede verse disminuida estos próximos meses, pero como nos explica Katz “esperamos que si logramos que el fuego se mantenga al nivel que está hoy día, creemos que vamos a tener un pequeño daño en la actividad turística durante este verano, pero vamos a trabajar y la Naturaleza también va a hacer su parte en renovar estos pastos, renovar estas praderas, y deberíamos tener la capacidad turística en su potencial en uno o dos años ya restaurada.”
Aún no se han aclarado las causas del incendio, pero las autoridades locales sospechan de un joven turista israelí que, por su parte, ha negado su implicación en los hechos. Ayer Israel comunicó que no asumiría la defensa de su ciudadano, pero ha ofrecido su colaboración a Chile y al gobierno.
El fuego se extendió a unas 2.000 hectáreas en la provincia de Chubut, en la zona de Puerto Patriada, cercana a las localidades turísticas de Epuyén y El Hoyo, donde los bomberos luchan por controlar las llamas. “A pesar del enorme esfuerzo que realizan los brigadistas para contener las llamas, lo cierto es que el fuego avanza y se estima que está llegando a las dos mil hectáreas”, señaló el ministro de Gobierno de Chubut, Javier Touriñan, a la prensa.
Las autoridades de Chubut y Neuquén coincidieron en que la ola de calor y la severa sequía que azotan al país dificultan los trabajos para controlar los incendios.
Incendios provocados
Este jueves, el gobernador de Chubut, Martín Buzzi, aseguró que el fuego fue causado de modo intencional, por lo que se busca a los responsables.
La Defensa Civil evacuó a cerca de 30 pobladores y a decenas de turistas que acampaban en la laguna Los Alerces, frente a un cerro incendiado, que forma parte de la cordillera de Los Andes, hito fronterizo entre Argentina y Chile, país afectado por una oleada de 60 incendios en los últimos días.
La sequía que padece Argentina, uno de los principales productores y exportadores mundiales de alimentos, afecta a ricas zonas agrícolas con cultivos de soja y maíz.
Llueve en Chubut y crece la esperanza de controlar los incendios
[ 08 de Enero de 2012 11:26 ]
Las débiles precipitaciones registradas en las últimas horas llevaron alivio a la provincia patagónica. Los aviones hidrantes no pueden acceder a la zona.
Las débiles precipitaciones que comenzaron a caer este domingo en la zona cordillerana de Chubut y el pronóstico de un descenso de la temperatura abrieron la esperanza en los pobladores de la comarca El Hoyo, en el oeste provincial, donde los incendios forestales consumieron dos mil hectáreas y provocó ya 54 evacuaciones.
Evaristo Melo, director general de Defensa Civil de la provincia patagónica, afimró: "El fenómeno climático de las cenizas nuevamente nos impide hoy el uso de tres aviones hidrantes y un helicóptero para combatir el fuego". De todos modos, las débiles lluvias de este mediodía y el pronóstico de descenso de las temperaturas abren mejores perspectivas.
"Ayer, por las cenizas en suspensión no pudieron salir ninguna de las cuatro aeronaves y esta mañana sólo lo hicieron entre las 7.00 y las 8.30. La comarca amaneció con el cielo seminublado, pero las cenizas volvieron a cubrirlo y nuevamente se volvió inoperable", explicó Melo.
El funcionario señaló que "de todos modos, por tierra tenemos 200 brigadistas combatiendo el fuego. Podríamos decir que entramos en una meseta en cuanto a la contención de los incendios, las llamas no amenazan a El Hoyo, a pesar de que se encuentran a unos 5 kilómetros del casco urbano".
Recordó también que "hay 54 personas evacuadas, que se encuentran perfectamente atendidas en la localidad de El Hoyo", que "por ahora el peligro acecha sólo a la población dispersa en el bosque" y que "no hay heridos, ni ninguna población en peligro".
Vecinos hablan de “bomba de tiempo”, “explosión nuclear” y “nube tóxica”.
Gerente de Asuntos Públicos de Arauco asegura que no existe peligro y que la situación ya está controlada.
Especialista, en tanto, explica que la mayor parte de las sustancias si bien son corrosivas, no debieran producir explosiones.
Antenoche se evacuó a un número indeterminado de personas de la comuna de Chillán entre las 23 y las 03 horas debido al riesgo químico que producía el avance del fuego hacia la industria de celulosa en el Complejo Nueva Aldea. En Chonchoral Alto (Santa Cruz de Cuca), efectivos de la Marina señalaron casa por casa que había que evacuar el sector en 5 minutos ya que había riesgo de explosión, a eso de las 02 horas de ayer. En otros sectores como El Litral, que es el poblado de Chillán más cercano al Complejo Nueva Aldea, el mensaje que entregaban efectivos del Ejército un par de horas antes era similar, aunque variaba en el lapso de tiempo para evacuar, a 25 minutos. Se informó profusamente y en forma oficial a través de las radios y en horas de la madrugada que existía riesgo químico. Ayer cuando le preguntamos al ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, en el sector de Santa Ana, Quillón, que era consumido por el fuego, ¿cuál es el riesgo químico que podría producirse si se incendiara la industria de celulosa?, respondió evasivo: “pregúntele a ese señor de la chaqueta amarilla”, indicando hacia Iván Chamorro, gerente de Asuntos Públicos de Arauco (ver nota lateral). Consultado Ricardo Rioseco, gerente de Comunicaciones de la forestal, señalándole que hay infinidad de rumores, algunos absurdos, sobre las posibles manifestaciones de un riesgo químico por incendio, afirma que no es necesario entregar información que cause “alarma pública innecesaria” y que como cualquier otra industria, la celulosa trabaja con diversos químicos.
Desinformados En definitiva, para los vecinos que fueron sacados de sus camas en horas de la noche, provocando una fuga masiva a las 23.30 horas por la ruta Chillán-El Huape el supuesto riesgo químico en caso de incendio es un misterio (ver nota complementaria). Margarita Rojas, residente en Confuencia achaca el problema a la prensa radial: “Se nos dijo que el fuego llegaba a la parte peligrosa. Allí hay químicos que no les sabemos ni el nombre. Si se queman explotan como una bomba atómica y los químicos salen por el aire, causando daño”. Las versiones que entregan los vecinos del sector evacuado, dan cuenta de una mezcla de desinformación e imaginación multiplicadas por el rumor. Expresiones como “explosión atómica”, “nube tóxica” y “bomba de tiempo” son las más recurrentes y provienen de personas que por lo general tienen vínculos con gente que ha trabajado o trabaja en la planta de Arauco, como lo hace la mayoría de la fuerza laboral del sector de Quinchamalí, Confluencia y Santa Cruz de Cuca. Esta “cercanía” también contribuye a amplificar las versiones catastróficas. Para Eliana Sáez, de Confluencia, el peligro “son los químicos que llegan en el tren, que son dañinos para la gente. También las calderas que pueden reventar”, explica. Robinson Aguilera, también de Confluencia, opina que “la Planta Nueva Aldea es una bomba de tiempo, hasta puede ser radioactiva. La autoridad no ha dicho cuáles son los materiales peligrosos. Aquí la cancha (de fútbol) está en un hoyo y la gente pensaba que allí se podría evitar la onda expansiva”. Luisa Caro dirigenta vecinal de Quinchamalí, no dudó en evacuar. “La gente tenía miedo de que fueran a explotar los químicos. Yo no me voy a quedar aquí, voy a volver a Chillán, porque vengo saliendo de una enfermedad y creo que hay peligro”, puntualizó. En tanto, Edulia Saldías del sector Chonchoral Alto, cree que así como fue sacada de la cama en la madrugada y tuvo que evacuar su casa, la Industria Arauco debe dar una explicación pública de los riesgos a que expone a los vecinos.
Sustancias corrosivas, pero no explosivas
Claudio Zaror, Ph. D. en Ingeniería Química y académico de la Universidad de Concepción explica que la mayor parte de las sustancias si bien son corrosivas, no producen explosiones. En la planta debiera haber hidróxido de sodio, el que se encuentra en mayor cantidad en todos los compuestos que participan en el proceso de elaboración de la celulosa. A eso se suma ácido sulfúrico, que ante un eventual contacto con el fuego podría liberar hidróxido de azufre a la atmósfera. Igualmente existiría clorato de sodio, peróxido de hidrógeno o agua oxigenada y metanol. Frente a una emergencia como la que vivió la planta lo más probable es que hayan decidido retirar el petróleo (debieran existir unos 300 metros cúbicos almacenados) y además sacar todo el clorato de sodio, pues ésta es una sustancia que tiene un valor muy elevado, del orden de los 2.000 dólares la tonelada, explica Zaror. El clorato de sodio, sostiene, es un agente altamente corrosivo que si se utiliza puro puede generar graves problemas, pero en la planta está diluido en agua. El experto sostiene que si la planta hubiese sido alcanzada por el fuego se habrían producido emanaciones tóxicas a la atmósfera y una explosión eventualmente sólo hubiera ocurrido por la presencia de petróleo.
El 98% de los incendios en la Patagonia son por causa del hombre2012-01-08 00:00:00 Las condiciones de extrema sequedad, con un déficit de lluvias anuales cercano al 40 por ciento, la baja humedad y altas temperaturas, a lo que se suma el desaprensivo accionar de las personas, son la consecuencia de una temporada de incendios forestales que está resultando más intensa si se la compara con años anteriores. El gobierno de Chubut informó que, ante el agravamiento del fuego, gestionó ante el gobierno nacional y la embajada chilena la llegada de brigadistas trasandinos, que se sumarán a los más de 300 argentinos que desde el martes combaten el siniestro en Puerto Patriada.
La mano del hombre está presente "en el 98% de los casos de incendios forestales en la Patagonia en diversas formas", dijo a Télam Rodrigo Robeta, director de Protección Forestal de Chubut, donde ya se quemaron 2.000 hectáreas.
El funcionario sostuvo que estos accidentes son más habituales "cuando comienzan a eliminarse los desechos vegetales y forestales. En este caso, existe el riesgo de que la persona se descuide y se genere un incendio", aunque aclaró que la otra causa muy común de los incendios "es la negligencia y la intencionalidad".
No obstante, Robeta explicó que las condiciones de extrema sequedad, con un déficit de lluvias anuales cercano al 40%, la baja humedad y altas temperaturas, a lo que se suma el desaprensivo accionar de las personas, son la consecuencia de una temporada de incendios forestales que está resultando más intensa si se la compara con años anteriores.
Los incendios en Chubut y en Neuquén, donde se quemaron unas 3.000 hectáreas de vegetación "se dan en la temporada normal de incendios en la zona patagónica, pero este año estamos previendo una mayor intensidad", dijo Robeta.
El especialista explicó que en toda la zona de la comarca andina "existe, este año en forma más marcada, pero que se ya viene dando en períodos anteriores, un déficit anual de lluvias del orden del 40%, lo que causa un clima más seco que lo habitual dentro de lo que es la temporada de incendios, que comenzó en octubre y que se extenderá hasta marzo o abril de 2012".
"Por las caracterísitcas climáticas que estamos previendo para este año, los incendios serán más intensos, más voraces", dijo el funcionario y anticipó que por lo que se está viendo, ahora, en la zona de El Hoyo y Puerto Patriada, en Chubut, "es probable que se repita en alguna otra zona en los proximos meses".
Además, "si a la sequedad del clima se le suman las altas temperaturas que se dan en la región desde noviembre, la baja humedad y la presencia de vientos que a veces adelantan la pérdida de humedad de la vegetación, ante cualquier foco ígneo que se produzca surgirá un incendio", pronosticó.
No obstante, Robeta diferenció el tipo de vegetación pasible de ser afectado por el fuego: "No es lo mismo que arda vegetación arbustiva que un bosque nativo. En este último caso el `combustible` como lo llamamos nosotros, se comporta de manera diferente ante la presencia de las llamas".
Al referirse a la mano del hombre, el funcionario describió que están "aquellos que mientras hacen una quema o un asado se les escapa una chispa", pero "luego están los incendios intencionales donde un individuo prende fuego adrede".
En tanto, autoridades de Chubut y de Chile evaluaban el traslado de unos 40 brigadistas chilenos a la zona andina de esa provincia, para combatir el incendio cercano a la localidad de El Hoyo.
El gobierno de Chubut informó en un comunicado que, ante el agravamiento del fuego, gestionó ante el gobierno nacional y la embajada chilena la llegada de los brigadistas trasandinos, que se sumarán a los más de 300 argentinos que desde el martes combaten el siniestro en Puerto Patriada.
El incendio, que comenzó el martes pasado, causó 40 evacuados y autoevacuados en esa población, a 12 kilómetros de la villa turística El Hoyo.
El gobernador de Chubut, Martín Buzzi, manifestó a la prensa que espera que se concrete la llegada de los brigadistas chilenos y "estamos agradecidos por este esfuerzo que hace un país hermano que también sufrió en los últimos días un feroz incendio y suma a su gente para apoyar a nuestros valientes y esforzados bomberos".
Buzzi se refería al incendio de 55.000 hectáreas de bosque y pastizales en la Patagonia chilena, que además causó 7 muertos, y en el que trabajan unos 2.000 brigadistas, decenas de aeronaves y equipos de Argentina, Australia, Uruguay y Estados Unidos.
El director del Plan Nacional del Manejo del Fuego (PNMF), Fernando Epele, dijo a Télam que la solicitud del gobernador de Chubut era evaluada por autoridades de ambos países, en tanto los 60 brigadistas argentinos que volvieron de luchar contra el fuego en Chile ya estaban combatiendo el incendio en Puerto Patriada.
La operación de traslado de brigadistas argentinos a Chile y su regreso fue realizada por la Secretaría de Ambiente, precisó Epele.
El funcionario añadió que, "según todos los indicios con que cuentan los investigadores, el incendio en Puerto Patriada fue intencional, aunque resta saber las circunstancias y el motivo por el que hubo varios intentos previos de causar incendios en la zona".