Varios heridos se han reportado este martes luego que los cuerpos de seguridad de la monarquía Al-Khalifa recorrieron los barrios de la isla de Sitra (este) en busca de disidentes y simpatizantes de la oposición al gobierno.
Según la prensa internacional, se han producido varias detenciones, mientras continúan las protestas a pesar de la violenta represión de las fuerzas del orden que están utilizando gases lacrimógenos, balas de goma y granadas de sonido contra los manifestantes.
Las protestas pacíficas que están siendo reprimidas por las fuerzas de seguridad, se producen luego de que el pasado jueves, un tribunal de apelaciones ratificara la condena de un mes a cinco años de prisión a un grupo de nueve médicos acusados en septiembre pasado de asistir a activistas opositores chiitas heridos durante las represiones a propuestas.
Alí Al-Ekry, ha sido el galeno que recibió la pena máxima de cinco años tras las rejas, y su desvinculación profesional del Complejo Médico Salmaniya, mientras que Ibrahim al Dimistani fue condenado a tres años de prisión y los otros siete profesionales de la salud a sentencias de entre un mes y un año en la cárcel.
Al-Ekry afirmó que esta decisión obedece a un "castigo político, para mantener contentos a los partidarios del régimen". Sin embargo, miembros del Gobierno informaron que el fallo se ejecutó por la relación de los médicos a actividades políticas y no por haber asistido a heridos. También dieron a conocer que cinco de ellos serán liberados por ya haber cumplido la pena.
Miembros de ONG´s y la sociedad bahreiní han calificado como excesiva la pena a un grupo de médicos que "han cumplido con su trabajo de salvar vidas". A pesar de la aclaración gubernamental, Brian Dooley, de Human Rights First, dijo que "la verdad es que a partir de hoy los médicos han de ser encarcelados por tratar a los heridos e informar al mundo sobre la represión del régimen".
Desde el inicio de la revolución bahreiní, el 14 de febrero de 2011, las fuerzas armadas y de seguridad nacional, en colaboración con las fuerzas armadas sauditas que enviaron tanques y unos mil efectivos militares, han reprimido de forma violenta las protestas populares. Varias personas han perdido la vida en medio del accionar de las fuerzas del orden.
Asimismo, numerosos manifestantes revolucionarios bahreiníes han sido detenidos por ejercer su derecho de libertad de expresión en las protestas antigubernamentales, mientras que responsabilizan al rey Hamad Bin Isa al Jalifa de todos los asesinatos y detenciones, así como también de cualquier hecho de sangre que se presente durante futuras manifestaciones.