El expresidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) Miguel d'Escoto condenó de “la manera más enérgica” los recientes asesinatos de altos funcionarios del Gobierno sirio, responsabilizando al “asesino y genocida imperio estadounidense” por el atentado terrorista perpetrado este miércoles en Damasco.
A través de un comunicado, D-Escoto manifestó sus condolencias y solidaridad con el presidente sirio, Bashar al-Assad, por las muertes de su ministro de Defensa, Daoud Rajha, y de su Subjefe del Ejército, Assef Shawkat.
“No vacilamos en condenar de manera categórica y enfática al terrorista, asesino y genocida imperio estadounidense por este más reciente de sus muy frecuentes atrocidades. Éste es el tipo de cosas por las que han estado en campaña por muchos meses. Sólo Dios sabe hasta donde su maléfica campaña nos llevará”, enfatizó.
De igual manera, calificó a los gobernantes de “ese imperio terrorista como individuos que han perdido toda legitimidad para representar al noble pueblo de los Estados Unidos”.
También señaló que “no hay ningún país del mundo donde se hace más imperativo un cambio de régimen, si queremos alcanzar una paz justa y duradera antes de que desaparezca la especie humana”.
En vista de ello, hizo un llamado al pueblo norteamericano a “ejercer sus prerrogativas democráticas y demostrarle al mundo que en los Estados Unidos la democracia aun tiene un sentido y que harán todo lo que considere justo y necesario para lograr ese cambio de régimen”.
El exdirectivo de la ONU (2008-2009) expresó también sus condolencias a las familias de las víctimas de estas últimas atrocidades de las cuales los Estados Unidos es, sin duda, el principal autor intelectual” y al “noble pueblo de la República Árabe Siria”.
Por último, manifestó sentirse orgulloso por el “liderazgo ético de las naciones de Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América” (ALBA) y de “nuestros hermanos espirituales de la Federación Rusa y de la República Popular China”.
“No cabe duda que el imperio diabólico es realmente fuerte, pero Dios es más fuerte y más temprano que tarde su Misericordia y Justicia se harán sentir”, puntualizó D'Escoto.
La muerte de los funcionarios sirios se produjo luego que un suicida se inmoló frente a la sede de seguridad nacional, mientras se realizaba una reunión de ministros y jefes de seguridad, en Damasco.