Un interesante análisis sobre la situación actual de España
Resumen Latinoamericano - Requetebién. No puede haber persona honrada que diga lo contrario. Todo funciona según lo previsto en su ADN social, cultural y político. España vacomo tiene que ir, muy bien.
Por cualquier sitio que lo mires, todo encaja: la cúpula del Estado, la Monarquía, está en perfecta armonía con el orden de las cosas; algunos se avergüenzan de su supina ignorancia, de sus tropezones de beodo, de suscacerías salvajes o de su agiotismo desmedido? Pamplinas. Los Borbones son los mejores reyes que nos podían tocar y no desentonan en absoluto del paisaje general del Reino que gobiernan. Un Reino con su clase política perfectamente adaptada a las exigencias del mercado actual: quitar al pobre, dar al rico, desahuciar, proteger las grandes fortunas, destrozar la clase media, apoyar a los banqueros? Llamarse Botín, tan a las claras, es una prueba de honradez.
Además España tiene unos sindicatos mayoritarios bien armonizados con el Mercado. Este puede ordenar cuantos recortes quiera; los sindicatos teatralizan una respuesta y controlan el hervor social por la siniestra, del mismo modo que la policía lo hace por la diestra. Y como adormidera, se invierte a mansalva en fútbol y en toros. Y en docenas de amenos e inteligentes canales de televisión en los que uno encuentra evasión y solución para todo: hasta el Maestro Joao te puede encender una velica y se acabó la crisis. Y siempre nos quedará Eurovegas.
Un país en el que hasta la Iglesia se preocupa por lo común, por lo colectivo, y de ahí sus esfuerzos por reactivar el negocio inmobiliario, con sus obispos afanados todo el día en el Registro de la Propiedad? Un país con una Justicia activa, con presidentes como Carlos Dívar, injustamente apartado de su cargo por quienes hacen lo mismo que él y no tienen su nobleza de hacerlo vox populi. Un país en que sus Fuerzas de Orden Público son modelo de trasparencia: basta entrar en la página web de la Asociación de la Guardia Civil Duque de Ahumada y ver cómo en primera plana aparece el fundador del glorioso instituto junto al General Galindo, con todas sus medallas y bajo el lema “El Honor es mi divisa”. País sin rencores, que libera y honra a un condenado a 75 años por torturar, matar y echar en cal viva a Lasa y Zabala. Uribetxeberria es un pringado.
Y en cuanto a las autonomías, España no puede estar haciéndolo mejor. Pueden los pueblos del Estado y sus parlamentos decidir lo que quieran, que siempre estará Madrid, en palabras de Alfonso Guerra, para “cepillarlo un poco”. Ya lo hizo con el Estatuto de Cataluña de 2006 y, a pesar del cepillado, el Tribunal Constitucional, declaró en 2010 su inconstitucionalidad y negó el sentido jurídico a la palabra “nación”. Como resultado, del 25% de declarados independentistas se ha pasado al 42% en sólo dos años y la marea sube. Pero España tiene solución para todo y ya lo dejó caer el llorado Gregorio Peces-Barba, cuando citó la frase de Espartero:“cada 50 años hay que bombardear Barcelona para mantenerla a raya”. Y como España es precavida, ahí están las últimas inversiones en armamento: 1.782 millones ahora; 31.000 millones previstos en el futuro. ¿Que los independentistas suben votos? España compra tanques. ¿Que aumenta la agitación social? España invierte en antidisturbios. ¿Quién puede decir que no funciona?
El caso de la CAV es similar. En el 2009, tras un pacto españolista y con buena parte del electorado maniatado, un hombre sin más luces que las que le presta el sol se convirtió en el Lehendakari más ovacionado de la historia de España. En Navarra sufrimos en el 2011 algo similar, salvo que PSOE y UPN se cambiaron los cromos, con el mismo objetivo: como en Cuba, la defensa de la unidad constitucional. Y como en Cuba, pocos años después Navarra y la CAV van a tener unos parlamentos con mucho más peso independentista que antes.
Por eso España funciona a las mil maravillas. Así, tal como es. Lo peor que nos podría ocurrir es que su rey fuera honrado, que sus políticos fueran inteligentes, que sus banqueros fueran comedidos, que sus obispos imitaran a Cristo, que sus jueces cumplieran la ley, que sus policías parecieran personas, que sus militares pensaran, que su sindicalismo fuera combativo, que sus televisiones enseñaran algo, que sus tertulianos supieran escuchar, que a catalanes y vascos se nos mirase como a ciudadanos y no como a mitayos? Porque una España así no cambiaría el fondo de su esencia, ni nos resolvería el problema económico ni nacional, pero tendría un peligroso efecto adormecedor, un cierto encanto para los bienpensantes, un bálsamo para los tibios, un freno para los timoratos.
España está bien como está: cortijo de pícaros sin moral, ladrones a espuertas, tricornios sin bozal, payasos institucionales, sotanas mugrientas, rencorosos a jornal, prevaricadores, chapuceros, crueles hasta el sadismo con el débil y serviles hasta la náusea con el poderoso. Es la España que nos está poniendo a las puertas de la independencia a vascos y catalanes (y ojalá gallegos) con mucha más celeridad de la que nunca soñaron Agirre, Maciá o Castelao. Y es la España pútrida que, con la emancipación de sus colonias, abrirá la puerta a su propia liberación, porque bien dijo Marx que en la Historia, como en la Naturaleza, la podredumbre es el laboratorio de la vida. Con esa otra España, todavía en agraz, nos hermanaremos. Con esta, que siga igual. Va muy bien.
Más de dos millones de personas pasan hambre en España
Un 46% de los ciudadanos españoles ha cambiado sus hábitos alimentarios en los dos últimos años por el en el precio de la comida (33%) y a razones de salud (21%).
Un 5% de los españoles, es decir, unos 2,35 millones de personas, no tienen lo suficiente para comer a diario, porcentaje que se eleva al 6% en otros países ricos, como Gran Bretaña, , Australia y .
Así se desprende de una encuesta encargada por Oxfam (Intermón Oxfam en España) a unas 16.000 personas en 17 países, en el marco de la campaña mundial “Crece” que se ha publicado hoy.
La encuesta evalúa los hábitos alimentarios de los ciudadanos en los dos últimos años, justo antes de empezar la crisis actual de los precios de los alimentos.
El 5% de los españoles que pasan hambre contrasta con el hecho de que una de cada dos personas encuestadas en países en desarrollo, como Kenia y Tanzania, afirma carecer de comida suficiente a diario.
En términos generales, el 54% de los encuestados de los 17 países aseguraron no comer lo mismo que hace dos años, sobre todo por motivos económicos (39%) y de salud (33%).
Uno de los resultados más reveladores de la encuesta es que el 79% de los ciudadanos de Kenia aseguraron haber cambiado su dieta en los dos últimos años, de los cuales el 79% lo achaca al precio de los alimentos.
Por otro lado, el aumento del precio de los alimentos es la mayor preocupación de los encuestados en lo que se refiere a la comida (66%), porcentaje que sube al 70% en el caso de España.
Sin embargo, en los países pobres la principal preocupación es el acceso a los alimentos (57% de los consultados en Kenia y 54% en Tanzania).
La pizza, la pasta y el pollo encabezan la lista de los alimentos favoritos en la mayoría de los países, junto con platos nacionales como la paella en España y el “biryani” en la India. Las únicas excepciones son las naciones más pobres de África, donde siguen dominando los platos tradicionales a base de maíz.
En España, los platos preferidos son los de arroz, seguidos de la pasta, los huevos, la carne y la pizza.
“Lo que comemos está cambiando rápidamente y para demasiadas personas está cambiando a peor. Una gran cantidad de personas, especialmente en los países más pobres del mundo, están reduciendo la cantidad o la calidad de los alimentos que consumen por el aumento del precio”, señaló Ariane Arpa, directora general de Intermón Oxfam.
Arpa instó a los líderes mundiales, especialmente los del G-20, a que actúen “ahora para arreglar el sistema alimentario, que no funciona”.
“Deben regular los mercados de materias primas, deben reformar las políticas de biocombustibles para mantener los precios de los alimentos bajo control y deben invertir en los pequeños productores en los países más pobres y ayudarlos a adaptarse al clima cambiante”, añadió. Unas 28.000 familias pasan hambre en España
Un 39,5% de las 72.425 familias con niños atendidas por el Programa CaixaInfancia en 10 ciudades españolas, unos 28.000 hogares en total, han pasado hambre en los últimos 10 años o lo están pasando ahora. El 48% de los hogares atendidos se encuentran en situación de pobreza severa.
El 81,8% de ellos sufren exclusión laboral -paro, empleo irregular- y el 73,1% experimentan exclusión de vivienda debido al hacinamiento, la insalubridad y los gastos excesivos, entre otros indicadores. Más de la mitad de las familias atendidas viven de alquiler y muchas de ellas tienen que pagar una hipoteca media de 437,7 euros al mes. Estos datos se desprenden de un estudio elaborado por la fundación FOESSA sobre el impacto de CaixaProinfancia, el programa para la superación de la pobreza infantil de la Obra Social La Caixa que ha atendido a más de 172.000 niños de entre 0 y 16 años y 99.000 familias:
"El 85,5% viven por debajo del umbral de la pobreza", ha señalado un portavoz de la fundación.
El pasado noviembre, UNICEF presentó un informe sobre la pobreza en la infancia que indicaba que uno de cada cuatro menores residentes en España vive en una familia que tiene unos ingresos inferiores al 60% de la mediana nacional. La cifra ha aumentado un 23% desde 2005 y sitúa a España a la cola de los países miembros de la UE. Entre los 27, solo se encuentran en peores condiciones Rumanía, Bulgaria, Letonia e Italia.
Un 36,7% de los hogares que refleja la muestra están ocupados por familias monoparentales en las que un adulto -la madre, en el 98% de los casos- se hace cargo de mantener a sus hijos en solitario. Según este estudio, el sustentador principal tiene una edad media de 38 años y un nivel de estudios bajo. Casi ninguno dispone de una semana de vacaciones. El informe de UNICEF ya señalaba como un indicador relevante sobre la pobreza infantil el hecho de que los menores formen parte de familias numerosas o monoparentales que se encuentran en situación de desempleo o tienen un trabajo precario. Datos actuales reflejan que más de la mitad de los hogares que reciben ayudas tienen a todos los miembros de la familia en paro, y en el 48% de los casos, hay alguna persona desempleada y sin formación ocupacional durante el último año.
Casi todas las familias atendidas están excluidas de las obligaciones ciudadanas y la vida política: no suelen participar en elecciones, no acceden a la educación pública, no tienen posibilidad de habitar una casa digna y suelen presentar problemas de salud. En cambio, desde un punto de vista social, no suelen provocar conflictos ni estar aislados, aunque tres de cada 10 hogares están afectados por problemas de este tipo.
Según las cifras de 2008, España ocupa, junto a Grecia, el último lugar de la Unión Europea en gasto público en familia e infancia, con un 0,7% del PIB, por debajo de la media de la UE, que se situó en el 2,3%.
El BCE quiere que haya salarios de menos de 400 euros en España. Nos llevan al Tercer Mundo.
En esta categoría laboral, que la entidad propuso a España el pasado agosto, el trabajador no paga impuestos y abona las cotizaciones sociales de forma voluntaria
El Banco Central Europeo es partidario de crear una nueva categoría laboral en España con un sueldo máximo de 400 euros mensuales para empleos de “escasa consideración” en los que el trabajador no paga impuestos y abona las cotizaciones sociales de forma voluntaria. Así se lo expresó el instituto emisor al Gobierno en la ya famosa carta que envió el pasado agosto cuando arreciaba la crisis de la deuda, según contó Rajoy a los agentes sociales en su reunión con los agentes sociales el pasado jueves para discutir posibles aspectos de la futura reforma laboral.
La recomendación fue enviada en una carta con distintas medidas que el Ejecutivo debía emprender a cambio de que el BCE continuara con su programa de compra de deuda española, entre ellas una “devaluación competitiva” de los salarios y acciones contra el desempleo juvenil, incluyendo la creación de una nueva categoría de trabajadores con sueldos inferiores al Salario Mínimo Interprofesional (situado en 641,4 euros mensuales en España).
La fórmula se conoce como los ’minijobs’ (mini-empleos) y fueron inaugurados en Alemania en 2003 como medida para atajar el desempleo y la economía sumergida.
El líder ‘popular’ aseguró haber conocido el documento por fuentes distintas al Ejecutivo socialista en funciones, y transmitió su intención de utilizarlo como su hoja de ruta en su gestión, con el objetivo de entrar en el grupo de cabeza del euro.
Más allá de los ‘mini-jobs’, las medidas exigidas por el BCE empezaron a aplicarse con la reforma de la Constitución para limitar el déficit pactada entre el PSOE y el PP, cuyo desarrollo legislativo será una de las primeras normas que aprobará el Gobierno de Rajoy cuando se constituya a finales de este mes.
La pobreza crece cada vez más en España
Con motivo del Día Internacional de Erradicación de la Pobreza, las organizaciones humanitarias denuncian que cada vez más españoles pasan a situarse bajo el umbral de la pobreza. El perfil es distinto del solicitante de ayuda que hasta hace un tiempo acudía a estas instituciones para pedir ayuda: ya que se trata de personas con una situación anterior "normalizada", procedentes de contextos socioeconómicos seguros, que han entrado a formar parte de los colectivos atendidos por la ONG.
Cruz Roja, por ejemplo, atendió a más de 1,7 millones de personas en sus diferentes programas sociales a lo largo de 2010, cifra sensiblemente superior a la del año 2009, cuando se asistió a casi 1 millón 400 mil personas.
Por eso, la previsión para 2011 es que tanto en los proyectos generales de Intervención Social como en el programa de reparto de alimentos crezca en número de beneficiarios un 20%, superando los dos millones de personas. De ellas, 900 mil de ellas acuden a la Cruz Roja para una necesidad básica: comer.
«La pobreza en España aumenta y se cronifica, mientras que la asistencia pública se erosiona y disminuye», dijo por otra parte el presidente de Cáritas, Rafael del Río, en la presentación este jueves de la Memoria 2010. Este informe revela cómo en 2010 la organización atendió a más de 6,5 millones de personas, un 4,3% más que en el 2009, de las que 1,6 millones estaban en España.
Ésta es una una cifra histórica en los 60 años de esta institución, y supone un incremento del 15% respecto al año anterior. Al igual que le sucedió a Cruz Roja, siete de cada diez ciudadanos que solicitaron ayuda habían acudido antes. La mayoría acude para pedir la atención básica de emergencia: comida, ropa, pañales y pago de suministros como luz y agua.
Con la crisis socioeconómica que sacude España, y a la que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha contestado con más recortes, el nuevo perfil de pobre en España tienda a ser más joven, y femenino. Al mismo tiempo, se equilibró la cantidad de autóctonos e inmigrantes que acudieron para solicitar ayuda. En el 2007, los extranjeros representaban el 70 % de los que se acercaban hasta esta ONG, mientras que hoy están a la par con los españoles.