Tras más de un año de investigación y preparación, la Ciudad de Miami está a punto de solicitar el permiso del gobierno federal para atraer inversionistas extranjeros con la promesa de una visa.
El lunes, líderes municipales revelaron que un proyecto de construcción de un rascacielos en Brickell será el primero en la lista para recibir las inversiones extranjeras, si la Ciudad gana la designación como un centro regional de la visa EB-5.
“Esto se trata no solamente del presente, pero también del futuro”, dijo el alcalde Tomás Regalado. “Se trata de una nueva Miami, de posibilidades, y de la creación de empleos”.
La Ciudad quiere convertirse en un centro regional de la visa EB-5 para atraer inversiones para proyectos en los ramos de la construcción, el entretenimiento, el turismo, la educación y la salud, dijo Mikki Cantón, una abogada contratada por el municipio para analizar proyectos de desarrollo económico.
Con la designación del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), la Ciudad podría atraer inversiones de $500,000 a $1 millón para proyectos en ciertos sectores pobres de Miami. Para los empresarios detrás de los proyectos, las inversiones de EB-5 son una buena alternativa al financiamiento tradicional de los bancos que han sido más difícil de conseguir durante la crisis económica.
Por su parte, los inversionistas extranjeros recibirían visas condicionales para ellos y su familia inmediata. Las visas se convierten en residencia permanente si se puede comprobar que el proyecto ha generado al menos 10 trabajos por cada inversión.
Si la Ciudad recibe la aprobación federal, Cantón dijo que el primer proyecto en la lista promete ser exitoso. El empresario inmobiliario Tibor Hollo, un antiguo amigo de Regalado, ha apuntado su proyecto de $750 millones de Panorama Tower, un edificio de 85 pisos que será construido en 1101 Brickell Avenue el próximo verano.
De su propio bolsillo, Hollo piensa pagar el 40 por ciento del costo del proyecto. También ha asegurado financiamiento de tras bancos para cubrir el resto del costo. Sin embargo, el lunes dijo que aceptaría financiamiento de EB-5 para el 15 por ciento del costo a fin de respaldar el proyecto de la Ciudad de Miami.
“Yo no necesito esas inversiones”, dijo. “Pero lo hago con gusto porque ayudará al futuro de la Ciudad”.
El hecho de que el proyecto de Hollo será financiado principalmente con otros fondos, y no sólo inversiones extranjeras, convertiría a Miami en un centro atractivo de EB-5 para los posibles inversionistas. Este balance de financiamiento propicia que cada inversión extranjera pueda crear al menos 10 trabajos, la estipulación principal en el programa federal, dijo Cantón.
Por su parte, la Ciudad espera cobrar un costo administrativo a cada inversionista que escoja a Miami.
La firma de abogados Greenberg Traurig está preparando la solicitud a USCIS con Cantón y un equipo de funcionarios municipales. La solicitud de cientos de páginas será presentada al gobierno federal a principios de enero, y una respuesta podría tardar varios meses.
En el último año, Cantón ha estudiado más de 20 centros regionales de EB-5 en el país. Generalmente, suelen ser entidades privadas. Sin embargo, también ha estudiado de cerca a los centros regionales del Estado de Vermont y de la Ciudad de Dallas. Bajo los planes actuales, tanto la Ciudad de Miami como un equipo de expertos tendrían que analizar y aprobar las propuestas de proyectos que buscan financiamiento de EB-5.
“Tanto nosotros, como el gobierno federal y los posibles inversionistas van a escudriñar nuestro proyecto”, dijo Cantón. “Vamos a ser muy transparentes”.