El número de personas que luchan por alimentarse en Reino Unido se ha triplicado y actualmente existen más de un millón de ciudadanos pasando hambre producto de la crisis económica que ha obligado al gobierno a aplicar recortes a los beneficios sociales, según informó la fundación "Acción de la Iglesia contra la Pobreza".
A pesar que la economía británica evitó una vuelta a la recesión y creció un 0.3 por ciento -según la Oficina de Estadísticas Nacionales- más rápido que lo previsto en los primeros tres meses de este año, Reino Unido sigue enfrentando una especie de epidemia de hambre encubierta.
En el reporte "Caminando en la Miseria", realizado en cooperación con la renombrada organización contra la hambruna, Oxfam; detallan que en el último año aumentó drásticamente el número de personas que no pueden cubrir el costo de la alimentación.
La severa agenda de austeridad implementada por el Gobierno desde 2010 es uno de los factores que está dejando a las familias más pobres en necesidad de buscar suministros de emergencia.
Con el fin de reducir el déficit, el Gobierno ya ha recortado unos 18 mil millones de libras (unos 27 mil 372 millones 100 mil dólares), y otros 10 mil millones (15 mil 206 millones 700 mil dólares)l se irán para el año 2016. Organizaciones benéficas temen que la situación empeorará.
El departamento para el trabajo y las pensiones respondió diciendo que el sistema de beneficios sociales cubre las necesidades básicas de alimentación de las familias más vulnerables. Pero estas fundaciones de caridad y las más de 500 mil personas que tuvieron que acudir a bancos de alimentos el año pasado, probablemente estarán en desacuerdo.