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23 de junio de 2013, 01:23Por Masiel Fernández Bolaños
 Roma, 23 jun (PL) El compromiso político manifestado para erradicar el hambre en el orbe y la necesidad de implementar acciones efectivas en aras de alcanzarlo, estuvieron entre los principales logros de la recién concluida Conferencia de la FAO.
Los delegados a la cita, que se celebró aquí durante una semana, reconocieron que pese a los avances registrados por algunos países, los desafíos resultan enormes en un mundo con millones de hambrientos.
El director general de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), José Graziano da Silva, se mostró satisfecho por los resultados del evento a la vez que llamó a concretar, mediante acciones, el compromiso manifestado.
El marco estratégico definido por la FAO fue uno de los puntos al que más tiempo se le dedicó en el evento por su importancia en la organización del trabajo. El mismo está conformado por varios objetivos encaminados a optimizar las gestiones en materia alimentaria.
El referido a la eliminación del hambre, la inseguridad y la malnutrición, enfocando el acceso en la distribución y los procesos que posibilitan que la gente tenga su comida garantizada, es apreciado como el más importante.
Los demás propósitos tienen una fuerte relación con el primero mientras que las cuestiones de género se considera que tocan transversalmente todas las metas, sobre todo por el papel de las mujeres en las labores agrícolas.
Planteamientos para organizar las acciones
En un entorno de elevada volatilidad de los precios en la arena internacional, muchos de los delegados abogaron por potenciar el comercio de productos agrícolas mediante un sistema multilateral no discriminatorio ni con subsidios injustos que solo cierran el acceso de las naciones en desarrollo a los mercados de consumo.
La complejidad del tópico alimentario fue sin dudas una de las grandes confirmaciones del encuentro. El tema del hambre no pasa solo por el aumento de la producción, ya que también tiene una fuerte relación con garantizar el acceso y la inocuidad de la comida.
Largas horas de debate dedicadas al presupuesto
Varios de los delegados asistentes coincidieron en que el tema del presupuesto para materializar el Programa de Trabajo en el bienio 2014-2015 fue uno de los temas más complejos del evento y al que se le dedicaron largas jornadas de debates, incluidas madrugadas.
Desde el primer momento, las naciones en vías de desarrollo apoyaron el alza propuesta con vistas a materializar las metas recogidas en el marco estratégico, porque opinaron que estaba encaminada fundamentalmente a apoyar los programas de cooperación técnica en diferentes territorios.
Por su parte los desarrollados, arguyendo que están en crisis, planteaban un crecimiento nominal cero, lo que implicaba incremento nulo en el presupuesto de la organización.
Sin embargo, todos coincidieron en la necesidad de garantizar el programa de trabajo. Finalmente los participantes aprobaron por consenso el monto de 1028,1 millones de dólares, el cual debe garantizar la ejecución de las acciones expuestas en el plan.
La próxima Conferencia de la FAO, programada para 2015, debe ser trascendental, según expertos, pues coincidirá con la fecha límite determinada por la Organización de Naciones Unidas para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Mientras, solo resta esperar que el compromiso manifestado por los países durante el evento se traduzca en acciones concretas y no quede en palabras, por el bien de los millones de seres humanos que solo tiene por compañía al hambre.
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