14 de septiembre de 2013, 16:08El Cairo, 14 sep (PL) El proceso de apelación solicitado por el expresidente egipcio Hosni Mubarak, sobre el que pesan cargos que podrían acarrearle la pena de muerte, proseguirá el 21 de octubre próximo, anunció hoy un tribunal de esta capital.
Esa instancia judicial citó para testificar ese día a varios altos cargos del gobierno del expresidente derrocado por las revueltas de 2011 y juzgado por presuntos cargos por responsabilidad en el asesinato de manifestantes.
Los testigos serán interrogados sobre acciones castrenses contra los levantamientos de enero y febrero de ese año en los que murieron unos 850 manifestantes, víctimas sobre las que Mubarak fue emplazado.
El expresidente es acusado de haber autorizado a enfrentar con la fuerza aquellas protestas y por el consiguiente fallecimiento de las víctimas, causas por las que recibió cadena perpetua al ser enjuiciado en 2012 en primera instancia "por complicidad".
Las audiencias se extenderán durante los días 19, 20 y 21 de octubre y serán a puertas cerradas bajo el argumento de proteger testimonios que afectan a la seguridad nacional, al contrario de las anteriores, transmitidas en vivo por televisión.
Mubarak, en prisión domiciliaria tras ser exonerado de otros cargos por corrupción y uso ilegal de fondos, compareció este sábado a su séptima audiencia de apelación sentado en una silla de ruedas tras las rejas de la celda reservada a acusados.
El expresidente, por cuyos cargos en aquellos hechos violentos podría merecer la pena de muerte, compareció junto a sus dos hijos, acusados como él de corrupción, y a altos funcionarios como el exministro del Interior Habib el Adli.
Mubarak, de 85 años y salud resquebrajada por padecimientos cardiovasculares, recibió libertad condicional al exonerársele cuatro casos abiertos a juicio, tres de ellos por corrupción y uno por la citada muerte de manifestantes.
La presente situación de prisión domiciliaria del exgobernante, que apeló a la sentencia inicial y el tribunal de casación ordenó un nuevo juicio, siguió a su salida el 22 de agosto último de la cárcel, desde la cual fue trasladado a un hospital militar.
El proceso al controvertido gobernante egipcio se desarrolla en medio de choques sangrientos que siguieron al desalojo de dos acampadas el 14 de agosto último de partidarios del presidente Mohamed Morsi, depuesto el 3 de julio pasado.
Unos mil muertos, miles de heridos y dos mil detenidos es el saldo de los enfrentamientos que siguieron a esos hechos entre militares e islamistas que piden el retorno al cargo del gobernante, electo en los comicios de junio de 2012.
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