23 de septiembre de 2013, 05:06París, 23 sep (PL) Unos ocho mil empleos serán suprimidos de aquí al año próximo en los centros de llamadas telefónicas en Francia, lo cual agravará el ya deprimido mercado laboral, donde más de tres millones de personas están hoy en paro.
En dos años este sector, que cuenta con 55 mil asalariados en todo el Hexágono, perderá el 15 por ciento de su fuerza laboral, denunció el Sindicato de Profesionales de los Centros de Contacto.
El gremio atribuye el problema a la guerra de precios entre las empresas de la telefonía móvil y concretamente al arribo al mercado de nuevas y poderosas compañías.
"Esto ha provocado un verdadero tsunami en nuestro sector", afirma Laurent Uberti, presidente del sindicato, quien denunció que varias firmas reducen personal aquí y trasladan sus servicios a otros países para bajar costos de operación.
Los centros de llamadas han sido relocalizados básicamente en naciones del Maghreb, Costa de Marfil o Madagascar, donde los operadores telefónicos son dos veces más baratos que en Francia.
El anuncio se suma al realizado la semana pasada por la aerolínea Air France, que confirmó su decisión de eliminar dos mil 800 empleos el año próximo.
Otras grandes empresas llevan a cabo proyectos semejantes, entre ellas el consorcio automovilístico PSA Peugeot Citroen, que cerrará unos ocho mil puestos y prevé clausurar la fábrica ubicada en Aulnay-sous-Bois, en los alrededores de esta capital.
El desempleo crece en este país desde hace más de 25 meses consecutivos y en la actualidad afecta a unos tres millones 280 mil personas en edad laboral.
En una entrevista concedida este lunes a la cadena de radio RTL, el ministro de Economía Social y Solidaria, Benoit Hamon, reconoció que el paro es la principal preocupación de los franceses y las promesas incumplidas de solucionar este problema causan un escepticismo popular profundo.
Una encuesta publicada el fin de semana revela que 76 por ciento de los franceses desaprueban la gestión del presidente François Hollande.
El titular de Economía Social y Solidaria reiteró la voluntad del gobierno de revertir la curva ascendente del desempleo y dijo que el aumento del índice de popularidad del mandatario estará directamente relacionado a la reducción de este fenómeno.
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