A las 7:00 p.m. del propio 12 de abril, Truman se juramentó como presidente y sostuvo un breve intercambio con el gabinete. Al finalizar la reunión se le acercó Henry L. Stimson, secretario de la Guerra y veterano político en Washington que había ocupado cargos en varias Administraciones desde William McKinley. Le dijo que necesitaba informarle sobre un asunto de la mayor urgencia, referente a un vasto proyecto en curso para producir un explosivo de poder destructivo increíble. Según afirma Truman en sus Memorias, esta fue la primera noticia que recibió sobre la bomba atómica. Al día siguiente James F. Byrnes, exdirector de movilización de guerra, le explicó con «que estaban perfeccionado un explosivo capaz de destruir el mundo entero».