Rodeada por sus copartidarios y luego de años en el exilio Aida Abella, cuenta las historias de la Colombia que ama, habla de sus viajes cuando fue funcionaria del ministerio de Educación por las regiones más apartadas del país atravesando paisajes inhóspitos; recuerda la Colombia que conoció antes de irse y que nunca ha dejado pese a los 17 años, 6 meses y cuatro días que pasó en Ginebra, Suiza.
La candidata presidencial por la Unión Patriótica (UP) comenta cómo vivió las protestas sociales en el lejano país, se le nota el entusiasmo cuando recuerda que fue por Internet que se enteró del último paro agrario nacional y el entusiasmo que le dio ir “con una ruana” a protestar frente a la sede de las Naciones Unidas en ese país.
Sus banderas son la paz, la equidad y la justicia social, por eso se lanzó como candidata presidencial por la UP. Dice que si no hay garantías hará una campaña presidencial desde el exterior.
Luego de lanzar su candidatura presidencial usted dijo que si no hay garantías hace campaña desde el exterior, ¿cómo la haría?
Ahora tenemos una manera de comunicarnos impresionante: el Internet y las redes sociales, ellas llegan a todo el mundo. En este momento no hay fronteras en la comunicación.
Pero hay muchos lugares en el país que no tienen ese tipo de tecnologías...
Hay cabeceras municipales y casi todas ellas tienen conexión. Hay gente que me escribe que vive en zonas donde yo creía. Creía que en muchas zonas de la costa no había gente, lo mismo que en el llano. Y es que si no nos dan las garantías no podemos hacer una campaña diferente. Lo que queremos es confrontar ideas y eso es lo que enriquece la vida política.
¿Y los recursos para financiarla?
Pues pediremos limosna, contribuciones de a peso, no tenemos dinero para hacer la campaña, pero tenemos las ganas y la fuerza de la gente, eso es todo lo que necesitamos.
¿Cómo va a enfrentar la 'maquinaria política', la Unión Patriótica?
Nosotros no tenemos ni plata, ni notarías para comprar votos, ni infraestructura; pero tenemos la voluntad de la gente. Esperamos que nos dejen expresar y comunicarle lo que tenemos. Queremos recrear la discusión política, emplear la ética política y el respeto hacia quienes piensan distinto y diferente, es mejor no tener dinero para hacer campaña, vamos a emplear los métodos de la sociedad misma para hacer campaña.
¿Qué le dejó el exilio en materia política?
Viví en países donde hay deferentes formas de gobernabilidad. En Suiza hay un concejo donde hay 7 personas, y cada año hay un nuevo presidente, eso airea la política. Aquí tenemos otro sistema pero hay cosas de gobernabilidad que se pueden traer aquí.
¿Cuáles son sus banderas políticas?
La paz con justicia social. Hay cosas en este país que se deben solucionar, por ejemplo, el derecho de los campesinos, ellos no tienen las grandes extensiones de tierra, ellos trabajan de sol a sol y no tienen una pensión de jubilación, ¿por qué no reconocerla?
Son 18 años por fuera del país y dice que no se ha apartado ¿cómo han sido esos 18 años?
Cuando uno se va al exilio lo hace entre el dolor y el descubrimiento pero uno sigue llevando la patria adentro, nunca nos fuimos, seguimos aquí. Teníamos la posibilidad de conocer a través del Internet. Nosotros estamos tan enterados como los colombianos de lo que pasa aquí y nos duele igual.
Frente a la situación de la UP, ¿ve posible un escenario en donde se les restablezcan curules?
Esa es una solicitud que hemos hecho en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por el genocidio de la Unión Patriótica. Queremos que se nos restituya lo que teníamos, este es el caso más importante de esa comisión y el más documentado. Nosotros exigimos la verdad, queremos conocer porqué se cometió este genocidio político. Queremos que no se vuelva a repetir esta situación, que nos devuelvan las curules en el momento de más alta votación de la UP, cuando teníamos 14 parlamentarios entre senadores y representantes y que el Gobierno deje de poner trabas y reconozca el genocidio, porque la justicia colombiana tiene diferentes fallos donde lo hace.
Usted ha dicho que actores que hoy están en la política fueron partícipes del genocidio y que están identificados, ¿quiénes son?
Ellos siguen en la política, acabamos de lograr la condena de César Pérez quien propulsó la masacre de Segovia (Antioquia), pero aún muchos andan por ahí. Exministros como Lemos Simmonds que fue quien señalaba abiertamente a Bernardo Jaramillo, pero como ellos hay otros.
Me gustaría que dijeran algo sobre lo dicho por el general Zamudio quien, cuando se le preguntó por qué están matando a la UP respondió: “a este ritmo no se va a acabar”, eso es una acusación del alto mando y no se le ha juzgado, ni investigado.
¿Es necesaria la reelección de Santos para que continúe el proceso de paz?
Él ha tomado una gran decisión y ha arriesgado mucho, pero pueden haber otros gobiernos que pueden continuar con este proceso, no nos podemos seguir disparando otro siglo más.
¿Cómo ve a los que el Gobierno ha denominado como 'enemigos de la paz'?
Hay enemigos del proceso, pero también hay millones de amigos que desean ver este país sin violencia. Hay sectores se han enriquecido con la guerra, una guerra de pobres contra pobres, de los de abajo que han hecho la guerra para volverse ricos y estar en el poder.