El dolor llenaba las almas cubanas. El sabotaje que reventó al vapor francés La Coubre en el Puerto de La Habana dejó más de 100 muertos y de dos centenares de heridos. La consternación y la rabia dieron paso a la firmeza y el desafío. En la despedida de las víctimas del acto terrorista, el5 de marzo de 1960, Fidel proclamaba la divisa de lucha del pueblo cubano.