La mayoría de los cubanoamericanos en Miami apoya flexibilizar sanciones contra Cuba: encuesta
Un
sondeo mostró que los cubano-estadounidenses en Miami apoyan la
flexibilización de las políticas de línea dura adoptadas por Estados
Unidos contra Cuba durante la Guerra Fría, y que incluso una mayoría
está dispuesta a aceptar vínculos más estrechos con la isla de Gobierno
comunista.
El estudio, publicado el martes por la Universidad Internacional de
Florida, dijo que el 52 por ciento de los 1.000 encuestados
estadounidenses de origen cubano en el condado de Miami-Dade se oponen
al embargo comercial de cinco décadas contra Cuba, pero la cifra se
reduce a un 49 por ciento entre los votantes registrados en Estados
Unidos.
El 68 por ciento favorece las relaciones diplomáticas con Cuba,
mientras una cifra similar, el 69 por ciento, está a favor de levantar
las restricciones de viaje para todos los estadounidenses a la isla,
según la encuesta, que tiene un margen de error de tres puntos
porcentuales.
La política actual sólo permite visitas de estadounidenses bajo una
licencia estrictamente controlada por motivos culturales y académicos.
Los resultados ponen de manifiesto el cambio entre los miembros de la
comunidad y muestra que las opiniones son mucho menos monolíticas
debido a los cambios demográficos.
El estudio fue financiado por el Grupo Trimpa, una firma consultora
basada en Denver que promueve el cambio social, y Open Society
Foundations, que financia causas de políticas públicas.
Guillermo Grenier, profesor de sociología en la universidad que ayudó
a dirigir el estudio, dijo que los resultados podrían llevar al
Gobierno de Barack Obama a volver a revisar la política de Estados
Unidos hacia Cuba, permitiendo más viajes y actividad comercial para
ayudar al emergente sector privado.
“No hay razón para temer más sobre la reacción política sobre la política hacia Cuba”, dijo a Reuters en una entrevista.
La comunidad cubano-estadounidense en Estados Unidos, que suma entre
1,8 y 2,2 millones de personas, ha sido tradicionalmente un grupo de
presión muy eficaz para bloquear los esfuerzos por levantar el embargo.
Realizada entre febrero y mayo, la encuesta encontró que los
exiliados más jóvenes, que salieron de Cuba más recientemente, eran más
favorables a los cambios en la política que los que llegaron en la
década de 1960.
“Las tendencias son claras”, dijo Grenier, señalando que los
exiliados más viejos están muriendo, mientras que 20.000 nuevos cubanos
llegan a Estados Unidos cada año en virtud de un acuerdo migratorio con
Cuba.
Por ejemplo, solo el 8 por ciento de los jóvenes
cubano-estadounidenses de entre 18 y 29 años apoya el embargo, comparado
con el 60 por ciento de los mayores de 65 años, según mostró el sondeo.
En 1991, el 87 por ciento de los encuestados apoyó el embargo, en comparación con el 48 por ciento actual.