Berni aseguró que los desmanes en el Obelisco fueron "totalmente planificados"
El secretario de Seguridad atribuyó a barrabravas de Independiente y de Chacarita el caos generado en los festejos.
El secretario de Seguridad, Sergio Berni, afirmó ayer que los disturbios desatados anteanoche en los alrededores del Obelisco durante los festejos por el subcampeonato del mundo logrado por la selección nacional de fútbol fueron "totalmente planificados" para "generar un gran caos". Unas 120 personas fueron detenidas por esos hechos en lo que la turba saqueó comercios, rompió vidrios de edificios y teatros, destrozó semáforos y asaltó y golpeó a personas que estaban en el lugar. La mayoría ya está en libertad.
En ese sentido, Berni adjudicó los hechos de violencia a "gente que tiene relación con las barrabravas de Independiente y de Chacarita".
Los dos clubes se encuentran relacionados con los sindicalistas que lideran las CGT opositoras: el gastronómico Luis Barrionuevo fue presidente de Chacarita, mientras que el camionero Hugo Moyano ganó recientemente las elecciones y conducirá a Independiente.
Además, Berni sostuvo que "era responsabilidad" de la Policía Metropolitana la seguridad durante los festejos y se quejó porque la fuerza del gobierno porteño "nunca aparece" cuando hay disturbios.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, lamentó los incidentes y admitió que esto "ha empañado" una "fiesta popular de carácter espontáneo". "Lamentamos este tipo de episodios", manifestó el funcionario ayer a la mañana en su habitual conferencia de prensa en la Casa de Gobierno y pidió que sean "juzgados" quienes cometieron los destrozos.
Berni advirtió que los incidentes fueron impulsados por "delincuentes que intentaron llevar zozobra en un lugar de festejos para poder así hacer saqueos, robar a la gente y pelearse entre ellos", por lo que remató: "No tienen derecho a aguar la fiesta de una sociedad". "No creo que sea una cuestión política, para nada", expresó no obstante, luego de afirmar que los incidentes fueron "totalmente planificados".
Los incidentes se registraron anteayer pasadas las 21.30 en la zona del Obelisco cuando manifestantes se enfrentaron con efectivos de la Policía Federal. Allí, rompieron veredas de las avenidas 9 de Julio y Corrientes, agarraron palos y piedras y se los arrojaron a los policías, quienes respondieron con gases lacrimógenos, balas de goma y camiones hidrantes para intentar persuadirlos durante las tres horas que duraron los incidentes.
Por esos hechos, hubo 70 personas heridas, entre ellas 15 policías, según informó el director general de emergencias médicas, Alberto Crescenti.
"Estos delincuentes intentaron llevar zozobra en un lugar de festejos para poder así hacer saqueos, robar a la gente y pelearse entre ellos. Estaban todos muy alcoholizados. Tuvimos que actuar, a nadie la gusta actuar en un festejo. Actuar en esas condiciones es muy difícil, había criaturas y bebés, había que separar la paja del trigo", indicó Berni.
Para dar una idea de la gravedad de la situación, señaló que "cuanto auto pasaba, lo rompían y le robaban. Estuvo planificado con mucha saña. Eran delincuentes que fueron a buscar el caos". "Esto es robo en poblado y en banda, un delito muy grave", explicó el funcionario.
"Por suerte, hemos trabajado con mucha paciencia y tranquilidad cuidando a las más de cien mil personas que estaban festejando y que nada tenían que ver con estos delincuentes", enfatizó en declaraciones radiales.
Consultado sobre el accionar de las Policía Metropolitana en el operativo de seguridad, Berni dijo que no lo sorprendió que esta fuerza de seguridad haya llegado luego de finalizados los disturbios porque consideró que "es lo normal que pase eso: nunca aparecen".
"No solamente mantuvimos comunicaciones con la Metropolitana, sino que el día viernes fuimos a una reunión de coordinación para los festejos que pidieron ellos y después no fueron", explicó Berni, quien dijo que es bueno "que la sociedad vea esto".
Los jueces de instrucción Laura Bruniard, Diego Rappa y Fernando Klappenbach, y el magistrado del fuero correccional Omar Fente, tienen a cargo la infinidad de hechos que ocurrieron anteayer y por las cuales apenas cinco personas están acusados de delitos graves.
Según fuentes judiciales, los juzgados analizaban varias imágenes tomadas de los destrozos para identificar a los imputados y precisar acusaciones, que tornan sobre los delitos de "daño agravado, robo en poblado y en banda, lesiones leves y graves y atentado y resistencia a la autoridad".
La mayoría quedó libre. Si bien una gran porción de los detenidos recuperaron su libertad a primera hora de ayer, tras constatarse que no tenían antecedentes penales, algunos quedaron detenidos por hechos anteriores.
Los serios incidentes motivaron que los jugadores del seleccionado no asistieran a un acto que se había organizado sobre Diagonal Norte.
Fue la propia AFA la que aconsejó que se suspendiera la presentación, aunque Berni aseguró ayer que la medida no estaba relacionada "con cuestiones de seguridad".
La Asociación señaló más tarde en un comunicado que "las autoridades pertinentes recomendaron que la Selección argentina se abstenga de ir al Obelisco a saludar", frente a un posible "colapso" de tránsito en un "día laboral".
Así y todo, numerosas personas se congregaron en las cercanías para saludar a los jugadores. Luego de la desconcentración, quedaron en el lugar varios jóvenes que intentaron desafiar a la policía apostada en el lugar lanzándole piedras.
En el tumulto, se perdió un niño
Una familia denunció ayer que un niño de 11 años se extravió en la zona del Obelisco durante los festejos mundialistas, adonde había llegado junto a sus padres para festejar por el segundo puesto del seleccionado argentino. Dylan Diego “es morochito, tiene muchas pequitas, manchas en la cara”, señaló su madre. La familia del chico es oriunda de la localidad bonaerense de Virrey del Pino, en la zona oeste del partido de La Matanza.