EL ENCUENTRO DE LOS PRESIDENTES DEL CONTINENTE COMENZARA SIN CONSENSOS EN TEMAS CLAVES
Una cumbre que terminará indocumentada
Estados Unidos y Canadá plantearon diferencias sobre el rol del Estado en cuestiones como salud, trabajo y ambiente. El canciller Héctor Timerman apoyó la idea de que los presidentes discutan las cuestiones en las que no están de acuerdo.
Por Fernando Cibeira
“Durante años no hubo documento, porque no había acuerdo sobre Cuba, ahora está Cuba y seguimos sin tener coincidencia”, sostuvo Timerman.
Desde Panamá
Tal vez fueron los efluvios pacifistas que absorbió durante su visita al museo de Bob Marley en su escala previa en Jamaica, lo cierto es que la declaración del presidente norteamericano, Barack Obama, acerca de que Venezuela no representa un riesgo para la seguridad de Estados Unidos probablemente evite que la Cumbre de las Américas que se inicia hoy termine en un nuevo fiasco, pese a la histórica participación de Cuba. No será sencillo. Ayer fue la reunión previa de los cancilleres y la representante de Venezuela, Delcy Rodríguez, insistió que en el encuentro de los presidentes se debía discutir la derogación del decreto contra su país e invitó a Estados Unidos a debatir sobre derechos humanos. También, añadió como un buen punto a conversar la militarización de las Islas Malvinas, un tema que ayer recobró visibilidad a partir de la nueva escalada diplomática entre Argentina y el Reino Unido. Lo cierto es que después de permanecer reunidos varias horas, los cancilleres no pudieron ponerse de acuerdo en lo básico, y nuevamente la Cumbre de las Américas concluirá sin documento final.
El encuentro de los ministros de Relaciones Exteriores comenzó al mediodía con un almuerzo en el Hotel Sheraton, ubicado justo cruzando la calle desde el centro de convenciones Atlapa, sede de la cumbre. Luego pasaron al salón de reuniones para discutir con puntos de vista tan diferentes que enseguida quedó en evidencia que no podrían llegar a un acuerdo. Debían arreglar un listado de “mandatos de acción” para los organismos regionales, pero hubo cinco puntos en los que Estados Unidos y Canadá plantearon diferencias –simplificando, no estaban de acuerdo con otorgar un rol determinante al Estado en cuestiones tales como salud, trabajo, medio ambiente–, por lo que avisaron que firmarían esos items por separado. La conclusión fue que el documento en el que los diplomáticos estuvieron trabajando durante meses no saliera, y se le dé al presidente anfitrión, Juan Carlos Varela, una declaración para que lea en el cierre los pocos temas en los que hubo acuerdo.
Más allá de documento sí o no, algunos países plantearon que los presidentes debían discutir los temas políticos de la región fuera de la “agenda de desarrollo” en que pretende Estados Unidos encorsetar el encuentro. La canciller venezolana dejó en claro que el diálogo que mantuvo en Caracas con el enviado de la Casa Blanca, Thomas Shannon, no concluyó de buena manera, porque volvió a la carga con la cuestión de la derogación del decreto que ya el propio Obama dio a entender que es desproporcionado. En su intervención, el canciller argentino, Héctor Timerman, apoyó la idea de que durante las deliberaciones los presidentes discutan las cuestiones en las que no están de acuerdo y no limiten el intercambio a los puntos en los que piensan parecido, como quieren los norteamericanos.
“Realmente es una pena. Durante muchos años no hubo documento porque no había acuerdo sobre Cuba, ahora está Cuba sentado y seguimos sin tener coincidencia”, sostuvo Timerman, quien agregó que “lo importante no es tener un documento, sino hablar sobre esas diferencias que tenemos”. El canciller puso la presencia de Cuba en la cumbre justamente como una expresión de que, gracias a la discusión y el debate, se puede a avanzar y llegar a acuerdos. En la anterior Cumbre de las Américas, celebrada en Cartagena de Indias en 2012, varios países, incluido Argentina, dejaron en claro que no participarían del próximo encuentro si se seguía marginando a la isla.
Timerman adelantó que “seguramente” la presidenta Cristina Kirchner hablará del tema Malvinas en su discurso de mañana. “Será la misma postura de todos los encuentros. Hay puntos básicos: los derechos argentinos sobre las islas, la necesidad de una negociación pacífica con el Reino Unido y la del cumplimiento de las resoluciones de las Naciones Unidas por parte de todos los países”, completó. Una señal de la importancia, que tomó la cuestión en las últimas horas, es que junto con la Presidenta hoy llegarán a Panamá el secretario de Asuntos Relativos a las Malvinas, Daniel Filmus, junto a los presidentes de las comisiones de Relaciones Exteriores de ambas cámaras, el senador Ruperto Godoy y el diputado Guillermo Carmona. En cambio, Timerman no confirmó si la Presidenta también incluirá alguna referencia a su enojo por las declaraciones de la funcionaria del Departamento de Estado para la región, Roberta Jacobson, sobre “la mala forma” que mostraba la economía argentina.
Las sirenas de las custodias policiales que cruzan la ciudad llevando funcionarios a distintos encuentros, típica de las cumbres importantes, se convirtieron ayer en la música de fondo de la capital panameña que hoy se multiplicará con la llegada de 35 presidentes y la idea de una jornada histórica.
Los 10 momentos más hablados de la Cumbre de las Américas
Los vecinos de al menos siete edificios cercanos al centro de convenciones, muchos de ellos venezolanos, protestaron la llegada de Nicolás Maduro a la ceremonia de apertura de la Cumbre con un sonoro cacerolazo que se escuchó hasta dentro del centro de prensa.
Nicolás Maduro fue caceroleado en Panamá (AP)
EL UNIVERSAL
sábado 11 de abril de 2015 11:03 AM
Panamá.- La VII Cumbre de las Américas que hoy concluye en la capital panameña ha estado marcada por el histórico reencuentro entre Estados Unidos y Cuba, pero la "cumbre de la reconciliación" ha tenido otros momentos estelares. Estos son los algunos de los más hablados de la reunión.
1. El apretón de manos entre el presidente estadounidense, Barack Obama, y el mandatario cubano, Raúl Castro.
Ocurrido de "casualidad" en la noche del viernes durante la entrada de dignatarios a la ceremonia de apertura de la Cumbre, los 10 segundos de "interacción" entre Obama y Castro pasarán a la historia como la reconciliación más esperada del continente.
2. El enfrentamiento entre Estados Unidos y Venezuela.
En una cumbre marcada por el "inicio del fin de la Guerra Fría", como calificó el canciller chileno, Heraldo Muñoz, el deshielo de relaciones entre Washington y La Habana, el recrudecimiento de las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela se ha convertido en la preocupación de muchos dirigentes en Panamá.
3. El paseo por El Chorrillo de Nicolás Maduro.
Al dirigente venezolano no le bastó con darse un paseo por el popular barrio panameño sino que apadrinó la reivindicación de sus moradores para que Obama pida perdón por la invasión de Panamá de 1989 e indemnice a las víctimas que causó la intervención.
4. El cacerolozo contra Maduro.
Los vecinos de al menos siete edificios cercanos al centro de convenciones, muchos de ellos venezolanos, protestaron la llegada de Nicolás Maduro a la ceremonia de apertura de la Cumbre con un sonoro cacerolazo que se escuchó hasta dentro del centro de prensa.
5. Las peleas entre disidentes y oficialistas cubanos.
Una de las actividades paralelas de la Cumbre, el Foro de la Sociedad Civil, estuvo marcada por los enfrentamientos físicos entre los delegados oficialistas cubanos y los opositores, hasta el punto que la Policía tuvo que intervenir en varias ocasiones para poner fin a las peleas.
6. La Cumbre de los Pueblos Indígenas Abya Yala.
La celebración de la V Cumbre de los Pueblos Indígenas Abya Yala, paralela a la VII Cumbre de las Américas, ha permitido que las comunidades indígenas reivindiquen un mayor protagonismo en el mundo político y económico del continente.
7. El partido de fútbol de Evo Morales.
La pasión del presidente boliviano por el fútbol es bien conocida y en Panamá, Morales aprovechó su presencia en la cumbre paralela de los Pueblos para jugar un partido con líderes indígenas de la región.
8. La ausencia de la presidenta Bachelet.
La presidenta chilena, Michelle Bachelet, es la única líder de la región que se ha perdido la histórica "cumbre de la reconciliación" debido a las graves inundaciones que han afectado el norte de Chile.
9. La llegada de "La Bestia".
En una ciudad como Panamá atenazada a diario por los atascos de tráfico, la llegada de "La Bestia", la limusina blindada y con tecnologías de la "guerra de las galaxias" que utiliza el presidente estadounidense en todos sus desplazamientos terrestres, se ha convertido en tema de conversación de muchos conductores panameños.
10. La ausencia de escándalos por parte del Servicio Secreto de Obama.
En la anterior Cumbre de las Américas, la de la ciudad colombiana de Cartagena de Indias en 2012, 12 agentes del Servicio Secreto estadounidenses, encargados de proteger la vida del presidente, fueron pillados por llevar prostitutas a sus hoteles. En Panamá, de momento, los agentes de Obama han mantenido los pantalones en su sitio.
Los 10 momentos más hablados de la "cumbre de la reconciliación" de Panamá
La Cumbre de las Américas se realiza desde ayer en Panamá / EFE
El cacerolazo contra el presidente Nicolás Maduro y el apretón de manos entre el presidente de EE UU, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, son algunos de ellos
efe 11 de abril 2015 - 10:45 am
La VII Cumbre de las Américas que hoy concluye en la capital panameña ha estado marcada por el histórico reencuentro entre Estados Unidos y Cuba, pero la "cumbre de la reconciliación" ha tenido otros momentos estelares. Estos son los algunos de los más hablados de la reunión.
1.El apretón de manos entre el presidente estadounidense, Barack Obama, y el mandatario cubano, Raúl Castro
Ocurrido de "casualidad" en la noche del viernes durante la entrada de dignatarios a la ceremonia de apertura de la Cumbre, los 10 segundos de "interacción" entre Obama y Castro pasarán a la historia como la reconciliación más esperada del continente.
2. El enfrentamiento entre Estados Unidos y Venezuela
En una cumbre marcada por el "inicio del fin de la Guerra Fría", como calificó el canciller chileno, Heraldo Muñoz, el deshielo de relaciones entre Washington y La Habana, el recrudecimiento de las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela se ha convertido en la preocupación de muchos dirigentes en Panamá
3. El paseo por El Chorrillo de Nicolás Maduro
Al dirigente venezolano no le bastó con darse un paseo por el popular barrio panameño sino que apadrinó la reivindicación de sus moradores para que Obama pida perdón por la invasión de Panamá de 1989 e indemnice a las víctimas que causó la intervención.
4. El cacerolazo contra Maduro
Los vecinos de al menos siete edificios cercanos al centro de convenciones, muchos de ellos venezolanos, protestaron la llegada de Nicolás Maduro a la ceremonia de apertura de la Cumbre con un sonoro cacerolazo que se escuchó hasta dentro del centro de prensa.
5. Las peleas entre disidentes y oficialistas cubanos
Una de las actividades paralelas de la Cumbre, el Foro de la Sociedad Civil, estuvo marcada por los enfrentamientos físicos entre los delegados oficialistas cubanos y los opositores, hasta el punto que la Policía tuvo que intervenir en varias ocasiones para poner fin a las peleas.
6. La Cumbre de los Pueblos Indígenas Abya Yala
La celebración de la V Cumbre de los Pueblos Indígenas Abya Yala, paralela a la VII Cumbre de las Américas, ha permitido que las comunidades indígenas reivindiquen un mayor protagonismo en el mundo político y económico del continente.
7. El partido de fútbol de Evo Morales
La pasión del presidente boliviano por el fútbol es bien conocida y en Panamá, Morales aprovechó su presencia en la cumbre paralela de los Pueblos para jugar un partido con líderes indígenas de la región.
8. La ausencia de la presidenta Bachelet
La presidenta chilena, Michelle Bachelet, es la única líder de la región que se ha perdido la histórica "cumbre de la reconciliación" debido a las graves inundaciones que han afectado el norte de Chile.
9. La llegada de "La Bestia"
En una ciudad como Panamá atenazada a diario por el tráfico, la llegada de "La Bestia", la limusina blindada y con tecnologías de la "guerra de las galaxias" que utiliza el presidente estadounidense en todos sus desplazamientos terrestres, se ha convertido en tema de conversación de muchos conductores panameños.
10. La ausencia de escándalos por parte del Servicio Secreto de Obama
En la anterior Cumbre de las Américas, la de la ciudad colombiana de Cartagena de Indias en 2012, 12 agentes del Servicio Secreto estadounidenses, encargados de proteger la vida del presidente, fueron pillados por llevar prostitutas a sus hoteles. En Panamá, de momento, los agentes de Obama han mantenido los pantalones en su sitio.
Ya el Mundo se ha dado cuenta de como Maduro destroza lo poco que queda de un país rico. Increible como en tan poco tiempo han llevado a la ruina a un país tan rico.
ANTE TODO ES UN SER HUMANO.VENEZOLANO SIN IMPORTAR EL CRUCE, PORQUE TODOS LOS LATINOAMERICANOS SOMOS AL FINAL UNA MEZCLA DE RAZAS,YO DIGO DE ORIGENES. SOLO LA ESTUPIDEZ HABLA DE PUREZA DE SANGRE.ASI PIENSA LA DERECHA VENEZOLANA DE LOS COMPATRIOTAS DE NUESTRA AMERICA. UNOS LE PEN TROPICALIZADOS POR NO DECIR FASCISTAS Y POR TANTO ABERRADOS. ESO NO QUIERE DECIR QUE POR AHÍ,ANDAN UNOS COLOMBIANOS DERECHIZADOS QUE LES PARECE GRACIOSO EL CHISTE.
Esto es solo el primee asalto, Maduro es muy querido y lo va a demostrar cuando llegue el avión con las firmas apostilladas por la presidenta del poder electoral, eso es cuando el señor Rodriguez termine en Abril de recoger todas las buenas y las falsas.
Otro pobre retrazado mental que piensa o tiene la ilusión que Obama le va a interesar esas firmas OBLIGADAS. Todo el mundo sabe que quien apostilla pertence al gobierno asi como todo el CNE que esta sumiso al chavismo. Obama no va a aceptar imposiciones sobre quien ingresa o no a USA que ridiculo hace MABURRO su ley contra los 7 funcionarios no va a ser cambiada es más va a ser aumentado con cientos de funcionarios corruptos y criminales más que ya no podrán ir a Disney o a gozar de los millones que robaron.
Sera idea mia.. Pero no vo a maduro en el video, cnn yaya aaco esa.noticia >>>> Cacerolazo de protesta al inaugurarse la Cumbre de las Américas con los jefes de estado y de gobierno de la región en Ciudad de Panamá #CumbreCNN
Medios panameños: Maduro usó un doble para distraer a periodistas que cubren la cumbre
El supuesto doble de Maduro que fue usado para distraer a los periodistas en Panamá / Foto La Prensa de Panamá
La Prensa de Panamá y una estación radial difundieron imágenes de un hombre parecido al presidente venezolano y una mujer similar a su esposa. Ambos abandonaron el hotel Sheraton tomados de manos
El Diario "La Prensa de Panamá" y otros medios de comunicación locales captaron imágenes de un supuesto doble que usó la seguridad del presidente Nicolás Maduro para distraer la atención de los periodistas que esperan su arribo a la Cumbre de las Américas.
En las imágenes se puede notar a un hombre de contextura similar al jefe de Estado venezolano y a una mujer, con características físicas parecidas a las de su esposa, Cilia Flores.
"Medios de comunicación presentes en el centro de convenciones Atlapa pudieron comprobar esta mañana cómo la seguridad del presidente venezolano, Nicolás Maduro, utilizó a un doble para intentar despistar a los periodistas. La maniobra de seguridad también incluyó a una doble de la esposa de Maduro, Cilia Flores. Agarrados de la mano y rodeados de funcionarios de seguridad, ambos salieron del hotel Sheraton, ubicado al lado del centro de convenciones donde se realiza la VII Cumbre de las Américas", reseña el diario en un texto publicado en su portal web.
La estación radial RPC también difundió las supuestas imágenes, en su cuenta en Twitter:
Supuesto doble del presidente de Venezuela Nicolás Maduro saliendo del hotel, ¿Qué opinan? pic.twitter.com/3klhLe3PJX
Muy hijo del dinosaurio cubano y de paso gastando infinidad de dolares en vez de resolver la masacre que esta provocando con la falta de medicinas y de insumos medicos.
Indicó que cuando se habla de Estados Unidos “no estamos hablando únicamente del poder ejecutivo, estamos hablando de un montón de factores de poder, porque la propia conformación de la potencias van generando poderes que se van autonomizando del poder político electo"
Venezuela al igual que toda América Latina y El Caribe,no es una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos. “No es amenaza para nadie, somos pueblos cuyas armas de combate son la solidaridad y las ideas”, sostuvo el presidente boliviano
EL PAIS › CRISTINA KIRCHNER CUESTIONO A ESTADOS UNIDOS Y A GRAN BRETAÑA POR TILDAR DE PELIGROSOS A ARGENTINA Y VENEZUELA
“Es ridículo considerarnos una amenaza”
La Presidenta remarcó “la similitud y la simultaneidad” de las administraciones de Barack Obama, con quien fue particularmente dura, y David Cameron. También cuestionó las “nuevas formas sutiles de intervención” a los países de la región.
Por Fernando Cibeira
Desde Panamá
En un duro discurso, la presidenta Cristina Kirchner fue crítica con Estados Unidos durante la sesión de presidentes de la Cumbre de las Américas. Unió la declaración de “amenaza a la seguridad nacional” declarada por el presidente Barack Obama contra Venezuela con la “amenaza” que dijo ver el Reino Unido en Argentina para justificar el aumento del presupuesto militar en las islas Malvinas. En ese sentido, cuestionó las “nuevas formas sutiles de intervención” a los países de la región. Su posición fue acompañada en sus mensajes por otros mandatarios de la región como Rafael Correa, Nicolás Maduro y Evo Morales, también críticos con las posiciones norteamericanas.
Un dato inusual fue que la Presidenta comenzara hablando del combate al narcotráfico al que se había referido unos minutos antes el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos. El tema no suele figurar entre los ítem que toca CFK en los foros internacionales. En verdad, de lo que quería hablar era del “financiamiento del narcotráfico” y del lavado de las ganancias que genera. “No seamos cínicos. Miles y miles de millones de dólares que se blanquean en paraísos fiscales y en bancos de países desarrollados. Si no se aborda ese problema no hay solución para el narcotráfico”, definió. Y habló sobre la “contradicción” del tema. “Con la droga y el dinero se quedan los países desarrollados; con los muertos y las armas, los pobres de América latina”, dijo.
La Presidenta recordó que era su última Cumbre de las Américas, que era el mismo caso de Obama. Que también era una cumbre “histórica” dada la primera participación de Cuba, aunque descartó que ese hecho fuera por exclusivo mérito del presidente norteamericano. “No, señores, Cuba está aquí porque luchó por más de 60 años con una dignidad sin precedentes”, sostuvo, y consideró un “verdadero triunfo de la Revolución Cubana” lo que se vivió ayer en Panamá.
Pero, siguió, la alegría del hito histórico se vino abajo el mes pasado cuando se conoció el decreto de Obama declarando a Venezuela una amenaza a la seguridad nacional para Estados Unidos. Cristina Kirchner reveló entonces que el viernes a la noche, al llegar a Panamá, había tenido una reunión con Maduro y que le había preguntado por el tamaño de su presupuesto militar. “Creo que me dijo mil millones, o dos mil millones, un poquito más”, mencionó. Recordó que Obama les había dicho a sus compatriotas que no tenían que temer a Irán, luego de firmar con ellos el acuerdo nuclear, porque el presupuesto militar iraní era de 30 mil millones de dólares mientras que Estados Unidos contaba con más de 600 mil millones. Cristina Kirchner dijo que lo primero que hizo al enterarse del decreto norteamericano fue reírse.
Desde el lugar en el que se encontraba sentada la Presidenta no se llegaba a distinguir dónde estaba Obama, en la otra punta de la larga mesa alrededor de la que se ubicaron las 35 delegaciones americanas, todas con sus presidentes a excepción de Michelle Bachelet, quien se quedó en Chile atendiendo las consecuencias de las inundaciones. “No sé si estará presente el presidente Obama o si se habrá retirado, no alcanzo a ver, tendría que ponerme los anteojos y no tengo ganas, no está. No importa, alguien se lo contará”, ironizó la Presidenta. Obama, efectivamente, había salido para mantener una reunión, tal vez previendo que en ese tramo recibiría críticas. No obstante, un rato después cuando ambos presidentes se cruzaron para la “foto de familia” de la cumbre se saludaron con amabilidad. En verdad, en lo personal, el trato entre ellos siempre fue cordial. En lo político, en cambio, nunca pudieron encajar.
La Presidenta unió la desmesurada declaración de Estados Unidos contra Venezuela con lo sucedido días atrás con las Malvinas. “Nuestro propio territorio”, como definió. Luego de un artículo aparecido en un diario sensacionalista sobre una supuesta compra de aviones rusos por parte de Argentina, el ministro de Defensa del Reino Unido declaró un incremento del ya de por sí abultado presupuesto militar del archipiélago. “Absurdo también. Pero me llamó la atención la similitud y la simultaneidad de ambas posiciones”, resaltó. Y después de recordar que “decía el líder que fundó mi movimiento, el general Perón, que se vuelve de cualquier lugar menos del ridículo”, remató: “La verdad que resulta absolutamente ridículo considerarnos a cualquiera de nosotros una amenaza”.
También criticó a Obama por haber dicho que no quería anclarse en el pasado. “A mí sí que me gusta la historia”, retrucó. Repasó la historia de intervenciones norteamericanas en la región, con golpes de Estado o invasiones. Pero habló del surgimiento de “nuevas formas más sutiles de intervención”, algo de lo que también hablaría poco después con la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff (ver página 4). “Golpes suaves donde se utilizan medios masivos de comunicación, multinacionales, denuncias falsas, asociaciones caprichosas de estados con otros estados para hacer no sé qué cosas y qué conspiraciones. Son más sutiles, pero no por ello dejan de ser intervenciones y siempre encuentran su origen bajo el nombre de las ONG”, agregó.
Pese a que otros presidentes lo mencionaron –Raúl Castro respaldó la lucha argentina por Malvinas y la “soberanía financiera”–, CFK esta vez no hizo alusión al conflicto por los fondos buitre ni hizo una mención específica a las críticas de días atrás de la funcionaria del Departamento de Estado, Roberta Jacobson, a la marcha de la economía argentina. En el diálogo que mantuvo con la prensa, al salir del hotel donde estuvo alojada, hacia el aeropuerto, insistió en los puntos ya marcados en su discurso. Aunque destacó algo que también hizo Raúl Castro en su intervención en la cumbre, que el presidente de los Estados Unidos está lejos de concentrar todo el poder del país. “Tiene una parte del poder que generalmente es bastante inferior al poder de las grandes corporaciones económicas, mediáticas, financieras y la articulación de todos estos intereses geopolíticos. Todo esto es el mundo contemporáneo, un mundo difícil, complejo”, cerró.
Y fue histórica...sólo basta ver las intervenciones de la mayoría de los Presidentes del Continente para entender que ya la Patria Grande no es patio trasero de nadie.
Por cierto ¿qué le pasó al torcedor de brazos que salió corriendo antes de culminar Raúl su intervención? ¿será que no quiso escuchar a Cristina y a Nicolás ?
jajajaja
salió bien aporreado. No importa lo que digan sus defensores porque dejó el pelero o por mal educado y falta de respeto o por temor a oír a nuestros Presidentes.
El Presidente de Ecuador ya le había dado un anticipo al yanqui. Por eso, Obama sabía lo que se le venía (después del discurso de Raúl) y decidió poner pies en polvorosa.
El "Emperador" salió huyendo como rata por tirante, aunque después tuvo que posar para la foto.
Un claro símbolo del cambio de época.
Cristina en la Cumbre de las Américas: elogió a Venezuela y Cuba, y cuestionó a Obama
Encuentro en Panamá
Le pegó al presidente de EE.UU. por considerar a ambos países como una amenaza. Definió la participación de Raúl Castro como "el triunfo de la revolución cubana".
Miradas : Luego de criticarlo con un duro discurso, la presidenta Cristina Kirchner tuvo un breve contacto con Obama. (Reuter)
LOS TIEMPOS DE LA CUMBRE DE PANAMA EN LOS CAMINOS Y EN LAS CASAS DE LA ISLA
Una crónica desde el corazón de Cuba
Para bien y para mal, la falta de Internet masiva hace que los cubanos no vivan on line. Para bien y para mal, imitarlos es una experiencia interesante, sobre todo cuando Raúl Castro se encuentra con Barack Obama y Cristina Kirchner tercia en el debate. Estampas y desafíos de la vida cotidiana.
Por Martín Granovsky
Desde La Habana
Difícil saber qué hay delante del micro que está ahí al frente, como parado en la ruta. Algo lo molesta porque anda a 15 por hora. Imposible pasar. Por el carril contrario se acerca una pequeña caravana que hace de tapón. Primero un gordo pedaleando en una bicicleta vieja. Detrás dos policías de uniforme caqui –conduce el de bigotazos– en una moto con sidecar. Y atrás de ellos un Lada de los ’80, aquel auto parecido al 125 que la Fiat fabricó en la Unión Soviética. Es 11 de abril en la carretera central de Cuba. La radio transmite el discurso de Barack Obama en Panamá. Muy pronto hablará Raúl Castro.
Dice un cartel al costado de la ruta: “Quien quiere, gana. Quien no se esfuerza, no quiere”.
En esta ruta ondulada es mejor relajarse y hacer zapping entre las únicas dos AM que se escuchan bien, Radio Reloj y Radio Rebelde. No serán lo más variado para un viaje de 10 horas en coche, pero estos días suena interesante hasta el locutor engolado de Radio Reloj, que con su voz de película argentina de Enrique Serrano cada dos minutos da la hora. Es que hay noticias. En la preparación de la Cumbre de las Américas de Panamá el gran tema para los cubanos fue la presencia del José Félix Rodríguez. Es la misma persona que por encargo de la Agencia Central de Inteligencia y por propia convicción asesinó a Ernesto Guevara en Bolivia el 8 de octubre de 1967. Es el mismo, también, que en 1991 se llegó hasta la Quinta de Olivos acompañando al cubano anticastrista Jorge Mas Canosa para entrevistarse con Carlos Menem y sellar el aspecto más crudo, físico y comercial de las relaciones carnales.
Tanto Reloj, la de las noticias en grageas, como Rebelde, con mayor despliegue, informaron en detalle sobre cómo Rodríguez terminó siendo una provocación que impidiera la participación plena en el foro de la sociedad civil de Panamá de gente como Miguel Barnet, el presidente de la Asociación Cubana de Artistas y Escritores que a los 24 escribió la memorable Biografía de un cimarrón, sobre la vida del esclavo Esteban Montejo.
Dice un cartel: “Unidad, firmeza y victoria”.
Fuera de Cuba el Che puede significar utopía, revolución, ideales, solidaridad, idealismo o el icono de una camiseta. En Cuba es, además de figura legendaria, uno de los padres fundadores de revoluciones y peleas por la independencia junto a Carlos Céspedes, jefe del levantamiento de 1868, al general de la independencia Antonio Maceo, al Maestro, como llaman a José Martí, a Fidel Castro y a Camilo Cienfuegos. El Che fue comandante de la guerrilla y, con Camilo, uno de los dos segundos de Fidel tanto en Sierra Maestra como en el gobierno nacido de la revolución del 1o de enero de 1959. Hasta presidió al Banco Nacional y encabezó el Ministerio de Industrias. Poner al asesino del Che en una cumbre de la sociedad civil, preparatoria de la cumbre de los presidentes, es un mensaje de ataque no sólo a una figura de la revolución mundial sino a un prócer del Estado cubano. Una figura, además, adorada por el pueblo. Aunque ya pasaron 50 años desde que dejó Cuba rumbo al Congo.
–¿A usted le parece? Esa gente mató al Che –dice enojado un cocinero mientras accede a confiar sus secretos para un buen congrí, el arroz con frijoles negros que también llaman Moros y Cristianos.
Para él, en la noche del 10 de abril, un día antes del gran momento de los presidentes que es el sábado 11, la cumbre es de un impacto tal que justifica encender el televisor incluso antes del comienzo de un gran partido de béisbol, el que enfrenta a Tigres (Ciego de Avila) contra Piratas (Isla de la Juventud).
–¿A Rodríguez lo habrán llevado los gusanos?
–Bueno, en Cuba ya no usamos esa palabra. Es un poco agresiva –corrige el cocinero, tan furioso con Rodríguez como actualizado en diplomacia.
Cerca, dos chicos juegan al ludo. Sin celulares inteligentes y casi sin Internet, sin Play Station ni tablets, o sea sin pantallas, jugar fuera de la electrónica es una gran opción. Funciona tanto adentro, sobre la mesa familiar, como en una calle de Santiago de Cuba, donde un grupo de muchachos juega dominó encarnizadamente. Entre los cuatro sostienen sobre sus rodillas una madera sin patas que hace de mesa. No parecen temerle a nada, quizás porque casi no hay autos. Ni ladrones.
Dice un cartel de la ruta: “Ser eficientes es vencer”.
La radio lleva una semana precalentándose y precalentando. Usa un anuncio. “El general de Ejército Raúl Castro Ruz, presidente del Consejo de Estado y del Consejo de Ministros de Cuba, asistirá a la Séptima Cumbre de las Américas.” Pone la voz de Raúl cuando avisa con su voz áspera que estará en Panamá “por invitación del presidente Juan Carlos Varela”. Es decir, quiere decir Raúl, no por acuerdo con los Estados Unidos. Sin embargo es obvio que Varela tuvo un guiño, cuando no el aliento de Wa-shington, para que Cuba participase en la Séptima Cumbre después de que en diciembre Barack Obama y Castro anunciaron que normalizarían relaciones. Era una buena ocasión para pasar de la palabra al símbolo y del símbolo a los discursos y al encuentro entre los dos sin buscar especialmente un tercer país. Como quien no quiere la cosa mientras, obviamente, quiere la cosa.
Es difícil saber si la cosa será tan rápida como parecía en diciembre. Por lo pronto, el turismo norteamericano aumentó, pero no hay una invasión. Aquí delante, por ejemplo, el tránsito como la categoría de situación pastosa conocida en Corrientes a las tres de la tarde o de vuelo en la autopista Rosario-Córdoba a las dos de la mañana sigue ausente. Ni despacio ni rápido. No es una cuestión de cantidad sino de calidad de protagonistas y de la frecuencia con que el tipo de actor se cruce con otro en un mismo camino. El micro de adelante pasa. Se puede pasar también, y hacer la lista de lo que había. Primero un carro con dos personas a bordo, ruedas de bicicleta y toldo. Después un Chevrolet modelo 1950. Luego un camión de los ’40 remotorizado con equipo Diésel, que en Cuba llaman petróleo. El carro no se tira a la banquina. O sabe que en teoría nadie lo molestará o porque no hay banquina, ni siquiera de paja. Y nadie le tocará bocina.
Dice un cartel: “La revolución es invencible”.
Habla Obama. Se escucha un tramo de su voz al principio. Sobreimprime la traductora. Dice Obama sobre las relaciones con Cuba que Estados Unidos “no será prisionero del pasado”, lo cual no significa que lo soslaya sino que políticamente eligió no hablar de él, y que “mira al futuro”.
Sobre la mano derecha de la carretera central, porque los carros también andan por la carretera central de Cuba, la que une los 968 kilómetros entre La Habana y Santiago, se ven unos barracones agrícolas. Es zona de azúcar. La zafra está por terminar. Radio Reloj informa que será la mayor zafra en 11 años, con 22 por ciento de crecimiento entre la cosecha que termina y la recolección anterior. Sin publicidad a la vista, no hay barracón sin consigna.
Dice un cartel: “Nacimos para vencer. Girón para siempre”.
Habla Raúl. Todos ríen cuando dice: “Ya era hora de que yo hablara aquí en nombre de Cuba”. Se escuchan carcajadas ante la idea de que no se quedaría con los ocho minutos concedidos a cada presidente sino que usaría los 48 endeudados en seis tramos de ocho por cada una de las seis cumbres anteriores de la que Cuba fue excluida.
Castro mencionó varias veces la expresión “América latina”, pero sólo después de haber usado otra, “Nuestra América”, la forma en que Martí hablaba de la América que quedaba al sur de los Estados Unidos y que socialmente debía ser también la del mestizo, el indio y el negro. Su discurso fue en buena medida un repaso histórico de la relación con Washington.
“En el siglo XIX, surgieron la Doctrina del Destino Manifiesto con el propósito de dominar las Américas y al mundo, y la idea de la Fruta Madura para la gravitación inevitable de Cuba hacia la Unión norteamericana, que desdeñaba el nacimiento y de- sarrollo de un pensamiento propio y emancipador”, recordó. Y agregó el hermano de Fidel: “Hace 117 años, el 11 de abril de 1898, el entonces presidente de los Estados Unidos solicitó al Congreso autorización para intervenir militarmente en la guerra de independencia, ya ganada con ríos de sangre cubana, y éste emitió su engañosa Resolución Conjunta, que reconocía la independencia de la isla ‘de hecho y de derecho’. Entraron como aliados y se apoderaron del país como ocupantes. Se impuso a Cuba un apéndice a su Constitución, la Enmienda Platt, que la despojó de su soberanía, autorizaba al poderoso vecino a intervenir en los asuntos internos y dio origen a la Base Naval de Guantánamo, la cual todavía usurpa parte de nuestro territorio”. Dijo Raúl Castro que el 1 de enero de 1899 los militares norteamericanos entraron en La Habana. Justo 60 años antes de que cayera la dictadura pronorteamericana de Fulgencio Batista. Ciclos: en 2019 se cumplirán 60 años de la revolución. ¿Cómo serán los próximos 60 años?
Dice un cartel: “Patria es humanidad”. Firma Martí.
Cafetería El Paso está camino a Los Arabos, sobre la carretera central, en una zona muy poblada, con pueblos como Jovellanos o El Perico. Es cerca de Santa Clara, la que en la canción “Hasta siempre” se despierta para verte, en recuerdo del paso del Che rumbo a La Habana tras la victoria guerrillera en Sierra Maestra. Dan café si uno espera cinco minutos y prestan el baño si uno espera a que lo pongan decente. La tierra es seca. Un páramo. Detrás del mostrador un afiche publicita la semana del cine de diversidad sexual. Con el café ya preparado, delicioso como en toda Cuba, sobre las cinco de la tarde llega una adolescente de pollera beige, camisa blanca y pañuelo del mismo tono que la pollera. El uniforme de los primeros años de la secundaria. En preescolar es azul. En primaria es bordó. La nena luce remolona como cualquiera que recién haya vuelto de la escuela. También impecable, peinada, elegante. Una privilegiada, diría Perón. La primaria y la secundaria son obligatorias y a simple vista esa obligatoriedad parece de cumplimiento sagrado. En La Habana hay muchos chicos jugando en la calle. Algunos mejor vestidos. Otros descalzos. Algunos con remera y otros en cueros. Algunos con una pelota de fútbol y otros soñando con ser bateadores de La Isla. En Santiago hay chicos en la calle, jugando. Aun en medio del campo, junto a bohíos donde todavía es preciso andar mucho para buscar agua y la luz eléctrica es un milagro, juegan chicos. En el campo una parte del trabajo se hace con arados de hierro tirados por bueyes. A la vera de las rutas más precarias, los campesinos llevan las riendas de carros cargados de caña. Pero salvo en los fines de semana o en días sin clase, es imposible ver un nene o una nena dando vueltas por ahí, al lado de un buey o de un atado de caña. Deben estar –se supone, y al menos por lo que puede observarse lo cumplen– en la escuela. Hay algo más que en Cuba no se ve: chicos trabajando. Tampoco, en apariencia, otra cosa: chicos pidiendo. Ni siquiera hay nenes con los campesinos en los carros, o ayudando a los que ofertan una habitación, una casa donde quedarse, un taxi Plymouth descapotable, un taxi Lada, un taxi tirado por moto en forma de coco, un tabaquito, una información sobre el mejor mojito, un restaurante con terraza y música en Santiago porque a mí, señor, el dueño después me paga con una botellita de aceite, un ron añejo que mi amigo trae directo de la refinería y usted va a pagar más baratico.
Lo más escuchado dentro y fuera de Cuba es que la Revolución Cubana garantizó y garantiza salud y educación. Los cubanos forman clínicos que funcionan como médicos de familia. El médico de proximidad, que siempre es el mismo, opera como primer recurso. Luego vendrán los especialistas o los hospitales.
Salud y educación garantizadas forman una base sólida. Aumentan la expectativa de vida, aseguran la nutrición inicial y ofrecen un piso para construir la autoestima. Los fenómenos, claro, no tienen una sola cara, porque la existencia de diversos mercados a la vez simplifica el comercio y crea distorsiones. Algunos de los taxistas mayores de 50 del Parque Céspedes en Santiago o del Parque Central en La Habana, hablan cuatro o cinco idiomas. Español, sin dudas. Inglés aprendido sistemáticamente. Francés aprendido en la calle. Italiano, igual. Y ruso. ¿De dónde salió el ruso? De haber estudiado ingeniería en la ex Unión Soviética, antes de la implosión de 1991. De modo que puede haber un diseñador de motores de aviación haciendo changas para turistas. ¿Es porque no hay trabajo para ingenieros? Sí hay. El punto es que un ingeniero cobra el sueldo en pesos moneda nacional y el equivalente no supera los 25 dólares mensuales. Exactamente cinco viajes en taxi. Muchos profesionales combinan el trabajo que les gusta y para el que estudiaron con un pie puesto en el mercado donde se gana en divisas. Otros, quizá más cansados o mayores, ya se volcaron totalmente al mundo en divisas que les permite aumentar notablemente el poder adquisitivo. Es, por un lado, un evidente desperdicio de recursos. Fueron formados por el Estado con conocimientos y habilidades que no usarán en el sector originario. Pero tal vez la mezcla de formación sistemática e inventiva los convierta en la cabeza de algunas de las nuevas cooperativas de turismo y construcción.
¿Cómo juegan en Cuba los distintos bagajes y los distintos pasados?
Cartel al costado de la ruta: “Fin de la injusticia. Entramos de lleno en la hora sagrada de la revolución”.
Discurso de Raúl: “Hemos soportado grandes penurias. El 77 por ciento de la población cubana nació bajo los rigores que impone el bloqueo”.
En el mensaje, el presidente cubano busca ser cordial con su colega de Washington, el primero que no sólo planifica acercarse a Cuba sino que lo realiza. “Hemos expresado públicamente al presidente Obama, quien también nació bajo la política de bloqueo a Cuba y al ser electo la heredó de diez presidentes, nuestro reconocimiento por su valiente decisión de involucrarse en un debate con el Congreso de su país para ponerle fin.”
De todos modos, Castro no se priva de realizar una precisión. “Hasta hoy, el bloqueo económico, comercial y financiero se aplica en toda su intensidad contra la isla, provoca daños y carencias al pueblo y es el obstáculo esencial al desarrollo de nuestra economía. Constituye una violación del Derecho Internacional y su alcance extraterritorial afecta los intereses de todos los Estados.”
–Al mojito no le puedo poner menos azúcar –informa un mozo de la calle Obispo, en el corazón de La Habana vieja–. Cambia el sabor. ¿De España?
–De la Argentina. Entonces tráigamelo con todo el azúcar.
–Ah, de la Argentina. ¿Escucharon el discurso de Raúl? Estuvo firme su Presidenta.
Cristina Fernández de Kirchner, justo después de Raúl Castro, valora la reanudación del diálogo como una “actitud positiva de Obama”. Y dice: “Tengamos claro que Cuba no está aquí y no estamos presenciando el encuentro de dos presidentes que finalmente después de mucho tiempo decidieron darse la mano. No, señores. Cuba está aquí, porque luchó por más de 60 años con una dignidad sin precedentes. Con un pueblo que sufrió y sufre aún muchísimas penurias, y porque ese pueblo fue conducido y dirigido por líderes que no traicionaron su lucha, sino que fueron parte de ella”.
Cartel en la ruta: “Decisión, coraje, valentía”.
Los cubanos protestan contra el bloqueo, pero parecen temer más los efectos sociales, culturales y psicológicos, que aún desconocen en todo su alcance, del llamado Período Especial. Un modo casi benévolo de describir el tremendo sufrimiento social que vivió la isla desde 1991, cuando la nueva Rusia postsoviética cortó lazos y subsidios. Los cuentos narran cosas feas. Los que hoy son gordos o gorditas miran sus fotos de entonces y se ven flacos y flaquitas. No tenían suficiente comida ni transporte. Largas caminatas hacia el trabajo y desde el trabajo. Cuando podían acceder a ella, porque costaba carísimo, la bicicleta para andar kilómetros de ida y kilómetros de vuelta.
–¿Has visto que en las tumbas se pone QEPD?
–Sí. Que en paz descanse.
–En el Período Especial decíamos que había que poner NR.
–¿NR?
–No resistió.
El humor cubano relaja. Quita dramatismo. Explica lo que una vez dijo Pablo Milanés: “Vivir en Cuba es un encanto y un infierno”. ¿Se puede medir, más allá del humor, qué impacto tuvo en la sociedad el Período Especial? Trabajo para sociólogos, historiadores, antropólogos. A los que hoy tienen 30 esa etapa los tomó entre los cinco y los quince. Se acuerdan. A los que tienen 40, entre los 15 y los 25. Se acuerdan aún más. A los mayores de 50 ni hablar. En esta última franja, que agrupa a los nacidos con la revolución o a quienes eran niños o adolescentes en 1959, domina un elemento común: nadie quiere hablar en detalle de una etapa de tanto sufrimiento. Dan títulos y callan. A veces se advierte en el relato cierto orgullo por haber aguantado la prueba. A veces puede detectarse la amargura que retrató tan bien Leonardo Padura en los personajes de su novela Herejes. Muestran frustración, más que resentimiento, y dolor más que odio, porque no se trata de gente como José Félix Rodríguez sino de simples cubanos que tramitaron a su manera una crisis que afectó a todos. Las cosas están hoy muy mezcladas. Un matrimonio de veteranos comunistas puede tener un hijo que vive en Miami porque, sencillamente, no soportó privaciones y piensa que las chances son mayores fuera de Cuba. Una hermana puede tener otra hermana en la Florida. Tiene ganas de verla, pero no quiere dar el brazo a torcer. No la critica, pero por qué no viene ella primero en lugar de decirme que viaje yo. Un emprendedor que cría chanchos en Camagüey y pronto criará pollos asociado a un campesino se queja porque no hay un mercado de maíz. Su madre, ingeniera recibida en la Unión Soviética (y van...), reside en Tampa. Le dice que vaya, que allá tiene futuro. El intuye, cree y sobre todo hace lo posible para que la transición hacia un país menos centralizado y menos estatal lo encuentre en Cuba.
Cartel: “La batalla económica constituye hoy más que nunca la tarea principal”. Firma Raúl.
¿Cómo hace, estos días, contacto con la realidad cubana un latinoamericano de izquierda, o nacional y popular, o simplemente humanista, sin caer en la arrogancia de decirles a los cubanos qué está bien y qué está mal y por qué no deberían quejarse de las penurias en el consumo? Cuba no es injusta como sus vecinos Haití, República Dominicana o Guatemala. Es cierto que los cubanos tienen un sistema sanitario más democrático que el de los Estados Unidos y uno educativo sólo comparable, por el acceso gratuito, al de la Argentina. Y es especialmente exacto que los chicos, o los que fueron chicos incluso durante el Período Especial y siempre durante el bloqueo, se sienten portadores de derechos. Un cubano podrá decir: “Concuerdo con lo que expones, pero además podríamos estar mejor con menos burocracia”. Otro podría pedir, en concreto, un mercado mayorista del que Cuba carece. Otro, más libertades que reforma, más glasnost que perestroika. Otro, más reforma que libertades. Otro, la vuelta más rápida de los pequeños comercios, que la revolución expropió igual que a la General Electric y que hoy se propone reponer junto al sector estatal y al sector público cooperativo dentro de lo que el gobierno llama “proceso de actualización”. Todos exigirán Internet.
¿Y con los Estados Unidos qué? El escenario más probable es una reconexión gradual, muy gradual, porque pesan como mínimo dos elementos. De un lado la necesidad de contar con suministros y divisas. De otro el cuidado que los cubanos tienen por saber que Cuba queda en un área colonial de Washington, donde la idea del patio trasero es literal, como escribió Martí en la famosa carta a Manuel Mercado del 18 de mayo de 1895, conocida como su testamento político porque al día siguiente fue muerto en la guerra.
Dijo Martí: “Ya puedo escribir (...) por mi deber de impedir a tiempo con la independencia de Cuba que se extiendan por las Antillas los Estados Unidos y caigan, con esa fuerza más, sobre nuestras tierras de América. Cuanto hice hasta hoy, y haré, es para eso. En silencio ha tenido que ser, y como indirectamente, porque hay cosas que para lograrlas han de andar ocultas”.