Los gobiernos del Reino Unido y Estados Unidos en realidad no quieren luchar contra el Estado Islámico. El engaño de los políticos es aparentar que lo están haciendo, afirma el periodista Peter Hitchens, del diario británico 'Daily Mail'.
"No creo que los gobiernos del Reino Unido y Estados Unidos realmente quieran luchar contra el Estado Islámico. Lo que quieren es aparentar que lo están haciendo. Yo juzgo a las personas no por lo que dicen, sino por lo que hacen", declara Peter Hitchens en su artículo publicado recientemente en el diario 'Daily Mail'.
EE.UU. y el Reino Unido "hierven de indignación" ante los bombardeos rusos en Siria, sin embargo, las personas atacadas por Rusia seguramente serían acusadas de extremismo y arrestadas si estuvieran en el Reino Unido, opina Peter Hitchens. Entonces ¿por qué los políticos británicos llaman a estas personas "rebeldes moderados"?, se pregunta el periodista.
No es que Londres y Washington estén en contra de los bombardeos como método de combate. "Hicimos nuestra parte en Belgrado, Bagdad y Trípoli, donde nuestras bombas sin duda mataron a civiles inocentes, incluyendo a niños", comenta Hitchens y agrega, que los gobiernos del Reino Unido y Estados Unidos tampoco juzgan a su aliado de la OTAN Turquía, que en vez de luchar contra el grupo terrorista en Siria (intención anunciada por parte del gobierno turco el verano pasado) bombardea a las milicias kurdas.
El caso es que la retórica anti-extremista de los políticos occidentales es contradictoria, ellos juegan un doble juego declarando la guerra a los extremistas islamistas y al mismo tiempo vendiendo armas a Arabia Saudita, "el hogar del fanatismo islamista", recita Peter Hitchens.