"EE.UU. intenta mostrar que está dispuesto a hacer la guerra a Rusia"

Publicado: 9 mar 2016 09:14 GMT | Última actualización: 9 mar 2016 09:15 GMT

La OTAN ha fracasado en sus operaciones de cambio de régimen, en parte porque Rusia no permite que EE.UU. vaya dejando un reguero de estados fallidos, destaca el analista político Dan Glazebrook.

Marit Hommedal / Reuters

Una de las calles de la ciudad libia de Sirte tras violentos enfrentamientos entre las fuerzas del Gobierno interino y partidarios de Muammar Gaddafi, el 18 de octubre de 2011.

Los juegos de guerra de la OTAN son parte de un intento continuo de EE.UU. de demostrar al mundo que está dispuesto a correr el riesgo de entrar en una guerra mundial contra Rusia para defender su derecho a propiciar cambios de régimen ilegales y crear Estados fallidos, destaca el analista político independiente Dan Glazebrook en una entrevista concedida a RT.

Bajo el nombre de 'Respuesta fría', Noruega acoge los mayores ejercicios militares anuales de Europa, en los que participarán alrededor de 15.000 soldados de Estados de la OTAN. El escenario reproducirá un conflicto militar ficticio con las fuerzas armadas de un país con clima frío. Las fuerzas de seguridad noruegas consideran a Rusia una de sus principales amenazas, pese a que los funcionarios de la OTAN afirman que este hecho no está vinculado con los ensayos militares.

El verdadero papel de la OTAN

Glazebrook destaca que los países de la OTAN y EE.UU. ya están llevando a cabo una guerra económica contra Rusia a través de sanciones y de su política de apoyo a Arabia Saudita que afecta a los precios del petróleo. "Además, hemos visto cómo Turquía, miembro de la OTAN, ataca y derriba el avión ruso; también hemos visto en las últimas semanas a Turquía y Arabia Saudita empezar la invasión de Siria", afirma el analista político.

Tras sumar estos hechos, el analista destaca que "EE.UU. está listo, capaz y dispuesto a librar una guerra mundial potencial con Rusia. No solo para luchar contra Siria o Libia, sino en realidad correr el riesgo de una guerra mundial contra Rusia para defender su derecho a realizar un cambio de régimen ilegal, para crear estados fallidos y para transformar a los países pacíficos en baños de sangre sectarios".

No importa lo que la OTAN diga, lo que revela su juego son sus acciones

En lo que se refiere al conflicto en Siria, Glazebrook señala que "Rusia ha sido invitada por el Gobierno sirio para evitar el colapso de este frente al ataque del escuadrón de la muerte sectario patrocinado por EE.UU., Reino Unido y otros". Según el analista, la situación queda clara al ver que estos hechos se califican como agresión de Rusia cuando en realidad Moscú solo está intentando gestionar su defensa contra la agresión ilegal dirigida por EE.UU. en todo el mundo.

"Es un hecho observable y empírico que, con este tipo de ejercicios, la OTAN está rodeando y cercando a Rusia con sus tropas y amenazándola. Sabemos por experiencia que no hay que creer a los líderes de los países de la OTAN cuando estos intentan tranquilizar a Rusia. […] Las garantías de la OTAN no valen el papel en el que están escritas. No importa lo que la OTAN diga, lo que revela su juego son sus acciones", concluye el analista

Reincidentes: El Pentágono quiere 'reavivar' los entrenamientos a los rebeldes sirios 'moderados'

Publicado: 9 mar 2016 07:34 GMT | Última actualización: 9 mar 2016 08:13 GMT

Washington está dispuesto a confirmar la máxima de que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra: los militares estadounidenses quieren volver a entrenar rebeldes sirios.

Rebeldes participan en una ceremonia de graduación en un campamento en Guta, un distrito en las afueras de Damasco, Siria / Bassam Khabieh / Reuters

El general Lloyd Austin, comandante del Centcom (Mando Central de EE.UU.), ha pedido permiso a la Administración Obama para restablecer el programa de entrenamiento y equipamiento de rebeldes sirios 'moderados' utilizando esta vez un enfoque diferente, informa 'The Hill'. En su versión modificada el programa se centrará en el entrenamiento de habilidades y destrezas específicas en un número inferior al del programa inicial.

Supuestamente los combatientes kurdos son los principales aliados de EE.UU. en Siria, pero no está claro a qué grupos de rebeldes será destinada la nueva versión del programa. Los militares estadounidenses colaboraban con las Fuerzas Democráticas de Siria que, según las estimaciones del general Joseph Votel estaban integradas en un 80% por kurdos, y con las Unidades de Protección Popular (YPG, por sus siglas en kurdo).

La Casa Blanca se vio severamente criticada por ese programa, presupuestado con 500 millones de dólares, que resultó ineficaz y un gran derroche. A finales de septiembre del año pasado la Presidencia estadounidense anunció su suspensión por "no haber satisfecho las expectativas".

La Defensa de EE.UU. reconoció que los rebeldes 'moderados' entrenados por el Pentágono entregaban municiones y transporte obtenidos gracias al programa estadounidense a grupos terroristas como el Frente Al Nusra. También hubo múltiples casos de deserciones de los propios combatientes para pasarse al lado de los extremistas. Austin admitió que de los 60 combatientes sirios entrenados a través del programa especial solo seguían luchando cuatro o cinco personas.