El exministro canadiense Jean Lapierre ha muerto este martes en un accidente de avioneta que también ha acabado con la vida de su mujer y de tres de sus hermanos. Todos ellos iban al funeral de su padre, en la zona este de la provincia de Quebec. El juez de instrucción provincial ha señalado en un comunicado que las siete personas que viajaban a bordo de la aeronave —los dos ocupantes restantes formaban parte de la tripulación del aparato— fallecieron en el siniestro.
La cadena de televisión TVA, en la que Lapierre trabajaba como comentarista de la actualidad tras abandonar la carrera política, ha señalado que la avioneta bimotor en la que viajaba el antiguo titular liberal de Transporte se estrelló por el mal tiempo en el momento en el que se disponía a aterrizar en el aeropuerto de las Islas de la Magdalena, en el Golfo de San Lorenzo. Lapierre, de 59 años, viajaba a la zona para asistir al funeral de su padre, fallecido poco antes a los 83 años tras una larga lucha contra el Parkinson.
En las primeras imágenes de la escena del accidente se puede observar la avioneta Mitsubishi partida en tres sobre la nieve. La agencia de seguridad aérea canadiense ha afirmado estar investigando el accidente. Sin embargo, las adversidades metereológicas han impedido a los expertos de este organismo llegar a la zona hasta este miércoles. El choque se produjo a las 11.40 hora local (17.40 hora peninsular española).
Testigos visuales del siniestro señalan que la avioneta inició un brusco descenso antes de caer al suelo en medio de un gran estruendo a apenas 100 metros de la pista de aterrizaje, segúninforma el diario canadiende National Post. Estas mismas fuentes coinciden en señalar que en el momento del accidente las condiciones meterológicas eran "malas", con fuertes rachas de viento y niebla densa. El servicio meteorológico canadiense había lanzado una alerta por fuerte viento en la región.
Lapierre, un político conocido por su buen humor y sus habilidades comunicativas, había reconvertido su carrera profesional en entusiasta comentarista político tras servir como titular de Transporte durante el Gobierno del liberal Paul Martin, entre julio de 2004 y febrero de 2006. También ejerció de principal escudero de Martin en Quebec, la provincia en la que nació y ha fallecido.
"Vamos a echarle terriblemente de menos", ha afirmado un Martin visiblemente consternado en en el canal de televisión CTV. "Era un muy buen analista político, uno de los mejores. Pero sobre todo era una figura política superlativa en su país y para mi fue un gran privilegio trabajar con él", ha añadido. El alcalde deMontreal, la segunda ciudad más grande de Canadá por población y la primera de la zona francófona, Denis Coderre, ha remarcado la capacidad de su compañero de filas por su capacidad de comunicación y de escucha y por su pasión política. "No dejaba a nadie indiferente... Todo el mundo querrá rendirle tributo", ha subrayado.