La sesión solemne de inauguración de las Cortes Generales (parlamento bicameral español) se celebrará este jueves en la sede del Congreso de los Diputados.
Será la primera vez que el también jefe del Estado encabece un acto de este tipo desde que fue proclamado heredero al trono en ese mismo hemiciclo el 19 de junio de 2014, tras la abdicación de su padre, el rey emérito Juan Carlos I.
Ante la falta de acuerdo para la formación de un ejecutivo tras las elecciones del 20 de diciembre de 2015, se optó por no celebrar esta ceremonia de apertura del efímero periodo parlamentario anterior, que culminó con la convocatoria a nuevos comicios, el pasado 26 de junio.
Esta sesión es considerada especial, pues además de ser el estreno del monarca, será también la primera de un Congreso y un Senado completamente renovados, con un gobierno en minoría del derechista Partido Popular (PP) y la irrupción de nuevas fuerzas políticas.
Con una administración sin mayoría absoluta y la Cámara baja más fragmentada en cuatro décadas de democracia en España, Rajoy prometió que en esta legislatura el diálogo y los pactos serán sus herramientas clave.
Sin embargo, hace dos semanas confirmó que entre sus ministros elegidos para esta nueva etapa apenas hay seis caras nuevas.
Mediante un comunicado y sin dar explicaciones públicas, el reelecto mandatario anunció un equipo en el que mantuvo al núcleo duro de su anterior mandato (2011-2015).
Tras 10 meses de interinidad que terminaron el 29 de octubre con su investidura, el jefe del Gobierno mantuvo en sus puestos a los tres titulares del área económica: Luis de Guindos en Economía, Cristóbal Montoro en Hacienda y Fátima Báñez en Empleo.
Una decisión que el Partido Socialista Obrero Español y la coalición de izquierda Unidos Podemos, segunda y tercera fuerzas en el Congreso, desautorizaron por continuista.
Sobre todo, por la política de duros recortes sociales y laborales aplicados por esos tres departamentos durante la etapa precedente, cuando el PP abusó de su hegemonía en la Cámara baja y aprobó una serie de impopulares reformas con toda la oposición en contra.