Al gobierno se le vuelve cada vez más difícil el parlamento. Al final del año legislativo, la oposición se unió y le cobró caro la falta de número al oficialismo. Con el Frente para la Victoria a la cabeza, el Frente Renovador (FR), el Bloque Justicialista (BJ) y el progresismo rechazó el proyecto oficial y dio media sanción anoche en Diputados a un proyecto propio de modificación del impuesto a las Ganancias. La nueva iniciativa, con mayores deducciones y nuevos impuestos para contrarrestar el costo fiscal, establece un mínimo no imposible (MNI) de $ 33.500, en bruto, para solteros y $ 44.000 para casados con dos hijos. Varios gobernadores ratificaron su apoyo a la propuesta del Ejecutivo y, de aprobarse el texto opositor, la tensión se trasladará al Senado.

La iniciativa, analizada en el marco de una sesión convocada en el marco del período extraordinario, fue sancionada en general con 140 votos afirmativos, 86 negativos y 7 abstenciones, tras fracasar el intento del oficialismo de imponer la propuesta del Ejecutivo.

De esta manera se impuso la propuesta alternativa en base a lo elaborado por el Frente para la Victoria y el Frente Renovador.

El anuncio fue realizado en el Congreso, en una conferencia de prensa encabezada por Oscar Romero (BJ), Héctor Recalde (FPV), que la presidieron, y Axel Kicillof (FpV), Facundo Moyano (FR), Graciela Camaño (FR), Marco Lavagna (FR), Victoria Donda (Libres del Sur) y Alicia Ciciliani (PS), entre otros. El líder del FR, Sergio Massa, no apareció en la foto y prefirió hablar, él solo, más tarde.

Quien explicó los detalles técnicos fue Kicillof. El diputado y exministro destacó que el aguinaldo ya no pagará ganancias. Con los nuevos pisos, el MNI aumentará un 40%. “Esto se actualizaría automáticamente a través de un criterio para que sólo pague el 1o% que más gana en Argentina”, señaló. Podrán deducirse cónyuges, alquileres y viáticos.

Para solventar el costo fiscal de la norma, el proyecto prevé la creación de nuevos impuestos. Al juego: las apuestas on-line pagarían un 7.5% de impuestos, mientras que las máquinas un 10%. Retenciones a la minería, que habían sido eliminadas por el gobierno. Los plazos fijos que superen el millón y medio de pesos, y las Lebac también estarán gravados. Además, los nuevos jueces, a partir de la sanción de la norma, deberán pagar ganancias.

Ahora, la norma pasará al Senado, donde, según afirmaron varios legisladores de la oposición, cuenta con el aval del jefe del bloque del FpV, Miguel Pichetto. “Esto no es una discusión técnica, es una discusión política. Se quieren llevar por delante al gobierno nacional generando un desfinanciamiento de las provincias y el Ejecutivo con una reforma que ustedes no hicieron en doce años”, disparó el diputado Luciano Laspina (Cambiemos) apenas iniciado el debate. La intención oficial era elevar el mínimo no imponible un 15%. De esta forma, pagarían ganancias los solteros que ganen desde $21.712 netos y, casados con hijos, con ingresos desde $25.200.

Ganancias es un impuesto coparticipable. Desde temprano, el gobierno hizo circular un cuadro entre los gobernadores con los costos fiscales que insumiría para las provincias el proyecto de la oposición. Ayer, mandatarios de Córdoba, Entre Ríos y Santa Fe, Juan Schiaretti, Gustavo Bordet y Miguel Lifschitz, ratificaron el respaldo a la iniciativa oficial. El Ejecutivo apuesta al apoyo de los gobernadores de más peso en el Senado. Pero habrá que esperar para ver cómo se jugarán las cartas allí.