Así afirmó en entrevista con Prensa Latina José Luis Merino, miembro de la Comisión Política del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y uno de los fundadores de este partido de izquierda de El Salvador.
El ALBA es una herramienta que ha permitido, 'sin saquear, sin robar las riquezas de los países, levantar el bienestar, mejorar los niveles de vida prácticamente de toda Latinoamérica e incluso de los propios norteamericanos en el corazón del imperio', aseguró.
Hay barrios de ciudades norteamericanas que tienen calefacción por la ayuda que ha quedado establecida desde el ALBA, desde Venezuela, añadió.
También -detalló- millones de personas han recuperado la visión gracias a la Operación Milagro, programa que atiende a pacientes con afecciones visuales de manera gratuita.
Comenzó en Cuba y luego se extendió por Latinoamérica, en especial por Venezuela, y ya aquí en El Salvador funciona un centro oftalmológico donde labora una brigada de especialistas cubanos que ha realizado cerca de 10 mil operaciones quirúrgicas de cataratas y pterigium en poco más de un año de funcionamiento.
Asimismo, miles de latinoamericanos han recuperado su capacidad de producir gracias al músculo económico del ALBA, como en el caso de campesinos salvadoreños, destacó.
'En este momento de crisis económica mundial, y en los momentos más graves de esa crisis fueron los pueblos dentro del ALBA y del proyecto PetroCaribe los menos golpeados porque las economías habían adquiridos otras capacidades', enfatizó.
La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América- Tratado de Comercio de los Pueblos o ALBA-TCP nació en 2004 con énfasis en la lucha contra la pobreza y la exclusión social.
Es un proyecto de colaboración y complementación política, social y económica entre países de América Latina y el Caribe promovida en sus inicios como contrapartida del Área de Libre Comercio de las América, impulsada por Estados Unidos.
Acerca de las amenazas del presidente electo de Estados Unidos Donald Trump contra Cuba, el Comandante Ramiro, seudónimo de guerra de este luchador salvadoreño, dijo a Prensa Latina que tomará posesión de su gobierno con realidades concretas.
'Trump amaneció como presidente electo un miércoles y ese día se dio cuenta de que no tenía partido, que su partido, el Republicano que lo llevó como candidato, no comparte todas sus visiones', comentó.
Se dio cuenta ese día que no tiene senado, que no tiene congreso porque obedecen al partido, y sin ninguna duda tendrá que examinar la realidad en que le toca desempeñarse, añadió Ramiro.
'Y sin ninguna duda para nosotros ese impacto que ha producido Fidel en los corazones de prácticamente todos los hombres y mujeres del planeta, esa solidez de la relación con su pueblo, y del pueblo cubano con su partido', va a contrarrestar cualquier amenaza del presidente electo de Estados Unidos, recalcó.
'No se puede pensar que su partida física desarma al pueblo cubano, es al revés: la partida de Fidel ha reverdecido y ha hecho aflorar todas las emociones, los sentimientos, el cariño por él como persona',
Pero sobre todo, 'como idea, pensamiento de dignidad, firmeza y valentía que él cultivó en su pueblo y en todos nosotros, en todos los latinoamericanos y los revolucionarios del mundo', resaltó.
Aseveró tener la confianza en que Trump no podrá cumplir sus amenazas y tendrá que ajustarse a esa realidad.