El presidente iraní, Hasán Rohaní, ha llegado este lunes a Rusia en visita oficial. Su reunión con el líder ruso, Vladímir Putin, está prevista para este martes 28 de marzo. Según el servicio de prensa del Kremlin, "durante las negociaciones se prevé que los jefes de Estado discutan una serie de cuestiones acerca de la cooperación ruso-iraní".
"Se prestará una atención especial a las perspectivas de expansión de las relaciones comerciales, económicas y de inversión, en particular en el contexto de la realización de grandes proyectos conjuntos de infraestructura de energía y transporte", reza el informe. Asimismo se planea que Putin y Rohaní intercambien puntos de vista sobre temas de actualidad internacional y regional y firmen una serie de documentos bilaterales.
Política exterior
Aunque Teherán y Moscú mantienen diferentes puntos de vista sobre muchos de los actuales problemas en Oriente Medio, al mismo tiempo existen muchos puntos comunes con los que pueden trabajar conjuntamente tanto en Siria como en Irak y Afganistán.
Las tendencias objetivas sugieren la necesidad de soluciones comunes a los problemas comunes
"Todas las dificultades significan que las relaciones entre Moscú y Teherán se están desarrollando en un contexto positivo (...) Las tendencias objetivas sugieren la necesidad de soluciones comunes a los problemas comunes", opina el profesor Vladímir Sazhin, del Instituto de Estudios Orientales de la Academia Rusa de Ciencias.
"No estoy hablando de una relación estratégica ni de relaciones de aliados. Esta asociación debe ser pragmática para ambas partes".
El analista cree que ahora "Irán es dependiente de Rusia" porque la Casa Blanca respalda las políticas antiiraníes y porque Teherán "tiene una gran cantidad de oponentes en la región", entre ellos Arabia Saudita e Israel. Por lo tanto, "una reunión bilateral [con Rusia] al más alto nivel es muy interesante y muy importante para el futuro" del país.
Cooperación energética
Durante su visita a Moscú, Rohaní se centrará en la cooperación en la industria energética entre los dos países. Ambos líderes se preparan para adoptar una hoja de ruta común para el desarrollo de la cooperación económica a medio y largo plazo, así como alcanzar acuerdos sectoriales en el ámbito de la comunicación y en la industria del gas y el petróleo.
El ministro de Energía de Rusia, Alexánder Nóvak, informó que las dos partes están negociando contratos por un total de 10.000 millones de dólares. Se trata en concreto del desarrollo de 11 campos de petróleo y gas en Irán. Alexéi Antónov, analista de la empresa Alor Broker, opina que la producción y transporte de hidrocarburos será la principal área segura de la cooperación entre Moscú y Teherán durante las próximas décadas.
Comercio
El volumen de comercio actual entre Rusia e Irán es de aproximadamente 1.000-1.500 millones de dólares. El profesor Vladímir Sazhin, del Instituto de Estudios Orientales de la Academia Rusa de Ciencias, cree que Rusia e Irán tienen muchos intereses comunes en términos económicos y comerciales.
"Rusia e Irán tienen muchos intereses comunes en términos económicos y comerciales"Vladímir Sazhin, profesor del Instituto de Estudios Orientales de la Academia Rusa de Ciencias
Rusia exporta a Irán automóviles y, a su vez, está interesada en la importación de productos agrícolas iraníes. Se espera que la posible firma de Irán del acuerdo sobre el establecimiento de una zona de libre comercio con la Unión Económica Euroasiática abra nuevas perspectivas para la cooperación en este ámbito.
Las sanciones como "carta valiosa"
Es necesario tener en cuenta que Teherán se enfrenta a la constante amenaza de la introducción de nuevas sanciones por parte de la nueva Administración de Washington. Rustam Tankáyev, experto principal de la Unión Rusa de Petróleo y Gas, considera que "Irán definitivamente necesitará algún tipo de ancla, algún tipo de mecanismo que pueda bloquear los efectos de las sanciones en su contra si estas sanciones se imponen de nuevo".
Según el experto, Rohaní puede usar la cooperación con Rusia como tal mecanismo. El factor de sanciones puede convertirse en una de las "cartas más valiosas" para el desarrollo del comercio en la región.
Confrontaciones por el gas
Las relaciones entre Irán y Rusia no siempre han sido fáciles, dice el analista independiente Dmitri Adamídov. Las dificultades se han debido principalmente al hecho de que los dos países son competidores tradicionales en la región del Caspio, Asia Central y Oriente Medio. Ahora, la difícil situación en el mercado energético añade aún más tensión. Ambas naciones siguen siendo competidoras en este sector.
Irán tiene la intención de aumentar drásticamente la producción de petróleo. Además, tiene enormes reservas de gas y planea centrarse en el mercado europeo, donde podría competir directamente con Rusia. En esa situación, los dos países tendrán que coordinar sus posiciones y predeterminar su participación en el mercado, destaca Rustam Tankáyev.
"EE.UU. dejó claro que el retorno de Irán a los mercados internacionales no será triunfante"Dmitri Adamídov, analista independiente
"Yo no esperaría de este encuentro ningún avance importante. Irán lo negocia todo durante mucho tiempo antes de llegar a un acuerdo. Pero la ventaja de Rusia consiste en que con la llegada de Trump EE.UU. cambió drásticamente la retórica hacia Irán y dejó claro que el retorno del país a los mercados internacionales no será triunfante. Así, tanto en el ámbito de la energía como en el ámbito del complejo militar-industrial Moscú tiene una buena oportunidad" para desarrollar la cooperación con Teherán, concluyó Adamídov.