PIONYANG, abril 15.- El vicemariscal norcoreano Choe Ryong-hae aseguró que el arsenal nuclear de la República Popular Democrática de Corea aplastará a Estados Unidos y la nación de Asia responderá con gran fuerza a una guerra desatada por Washington contra Pionyang.
Corea del Norte responderá con un ataque nuclear a una eventual guerra nuclear provocada por el Pentágono, ha declarado el vicemariscal Ryong-hae, citado por Russia Today.
Si Estados Unidos nos provoca le contestaremos inmediatamente con un devastador ataque, con una guerra total para una guerra total, para una guerra nuclear, un ataque nuclear, dijo el militar durante un desfile esta semana dedicado al 105 aniversario del nacimiento de Kim Il-sung, el fundador del Estado y el abuelo del actual líder del país.
Según informa la agencia Yonhap, en el mismo desfile militar Corea del Norte ha presentado por primera vez un misil balístico para submarinos, el Pukkuksong-2.
Pionyang ha instado este sábado a Washington a que ponga fin a su histeria militar. En caso contrario, deberá enfrentarse a represalias por parte de Corea del Norte.
Mientras tanto, las expectativas de que Corea del Norte haga algo provocativo en los próximos días están marcadas con el día más grande del año en el calendario norcoreano, acompañado tradicionalmente por un gran desfile militar y festejos coloridos.
El 15 de abril es oficialmente conocido en Corea del Norte como el Día del Sol y el 105 aniversario del nacimiento del fundador de Corea del Norte, Kim Il-sung, en 1912.
Las tensiones han aumentado considerablemente desde que el presidente estadounidense Donald Trump asumió el cargo en enero. El mandatario republicano
ha criticado en repetidas ocasiones a Pionyang por el desarrollo de armas nucleares y acusó a Pekín de no hacer lo suficiente para detener a su aliado rebelde.
No obstante, la retórica de Trump hacia China ha disminuido desde que recibió al presidente Xi Jinping en Florida la semana pasada, pero su decisión de ordenar un ataque aéreo contra Siria durante la reunión fue visto ampliamente como una advertencia a Corea del Norte de que Estados Unidos estaba listo para tomar acción militar unilateral.
Además, Estados Unidos y Corea del Sur han comenzado sus mayores juegos de guerra, enviando el portaaviones USS Carl Vinson a las aguas de la península de Corea, mientras que imágenes de satélite del Pentágono sugieren que Pionyang podría realizar otra prueba nuclear subterránea en cualquier momento, según indicó Russia Today.